Nos ha sido remitida por correo electrónico la siguiente carta en respuesta a la enviada por Pedro Sánchez a la militancia del PSOE. Por su valor crítico y periodístico la copiamos tal cual nos ha sido remitida, sin añadiduras o correcciones, salvo destacar algunas frases dentro del estilo propio del periódico.
Estimado secretario general en funciones,
Acuso recibo de tu carta a la militancia del PSOE y me tomo la libertad de contestarte pues el partido siempre había sido un lugar de debate, donde la crítica se aceptaba y se asumía como necesaria. Mi apoyo contra la carencia de espíritu democrático de las derechas hacia el gobierno es, como no podía ser de otro modo, total. Está España ante la peor derecha de casi toda nuestra historia democrática y te ha tocado sufrirla. Tampoco es que exista la mejor izquierda de la historia, aunque esto lo sabrás de sobra pues la tienes sentada en el consejo de ministros. En este aspecto no cabe más que apoyar al PSOE y seguir remando. ¿Hacia dónde? Eso ya se verá.
Como habrás visto en la presentación de la misiva escribo “secretario general en funciones” pues eso es lo que eres toda vez que el Comité Federal convocó la apertura del proceso que llevará al 40° Congreso del partido. Y lo que puede ser una pijotería sobre el cargo, no lo es tanto. Estando en medio de un proceso congresual, ya que es de suponer que querrás revalidar la secretaría general, lo ético es no mandar cartas a la militancia. Un mínimo respeto, por si hubiese otros compañeros o compañeras que quisiesen presentarse, es tradición en el PSOE. Total, lo que nos has contado en la carta, es lo mismo que dices en los medios de comunicación, por lo que podrías haberla evitado por ética cuando menos. Ya que no lo has hecho permíteme unos apuntes.
En primer lugar, el lenguaje es importante y hablar a las compañeras y compañeros sin ningún tipo de distinción respecto al resto de la ciudadanía supone un grave error. Como militantes estamos al día de lo que sucede en España, no somos entes aislados, bien al contrario somos personas con un alto interés por la actualidad y por la defensa del socialismo en todos aquellos sitios donde debe pelearse. Por tanto hay que esmerarse más y ofrecer un contenido más ideológico, más de partido. Salvo que se piense que somos una masa de paga-cuotas, el nivel debe ser otro. Menos eslóganes y más discurso.
En segundo lugar, y relacionado con lo primero, es obvio que la defensa de ciertos valores en inherente a cualquier socialista, pero principalmente de la clase trabajadora, a la cual no se hace referencia en toda la carta. Los ERTEs no han sido salvación sino preocupación para muchísimos trabajadores que han pasado meses sin un ingreso en sus cuentas corrientes. Una chapuza por la que no se ha pedido perdón, sino que se relativiza con el término “complejidad”. Todo es complejo y por eso si se perjudica a alguien durante un tiempo ha de ser comprensivo a causa de la complejidad. Para salvar a un financiero o una empresa de aviación casi inexistente, sin embargo, no hay complejidad y sí agilidad.
En tercer lugar, me gustaría que no me intentases engañar. Ni el gobierno es joven (alguien con cuarenta y tantos años es cuando menos una persona adulta), ni actuar es un mérito en sí mismo (porque se puede hacer mal), ni la agenda “que mejor atiende las necesidades y los derechos que definen a la sociedad española” son elementos que sirvan para que los jóvenes y los mayores de 50 años tengan accesos a empleos. Sin duda la ley de eutanasia o la ley Rhodes son avances sociales, aunque no propiamente socialistas. Lo que me molesta es que intentes colarnos como avance una ley transgenero cuando las compañeras del partido se han opuesto por activa y pasiva a ella desde hace años. El IMV no llega a todas las personas necesitadas y la ley de educación conculca los principios socialistas de esfuerzo y mérito (¿cómo que se puede pasar de curso sin aprobar?) que llevan acompañándonos desde hace 120 años.
En cuarto lugar, me parece muy bien que España vaya a ser más verde, aunque luego se sigan haciendo trasvases en vez de potenciar las desaladoras en las que se invirtió tanto dinero o se permita la destrucción del Mar Menor con los residuos de huertos en sitios donde no tienen sentido. Tampoco me parece bien que, en ese camino hacia lo sostenible, quienes tengan que pagar el precio sea la clase trabajadora. Fuera de las grandes ciudades no queda otra que moverse en vehículo y el combustible no hace más que subir y cargarse de impuestos. ¿Qué quieren, que vayan en burro? Porque permitirse, lo que se dice permitirse un coche híbrido no lo puede hacer un trabajador o trabajadora. Ecología sí, pero mirando la realidad tal y como es. Y sobre la solución de la digitalización, lo mismo. Para estar al día hay que gastar mucho dinero en equipos o ¿es que van a regalar teléfonos de última generación en los que quepan todas las Apps que quieren las distintas administraciones que llevemos (más todas las empresas de servicios)?
Y, en quinto lugar, por no extenderme mucho más, ¿crees que España está más cohesionada territorial y socialmente? Los datos del INE no dicen eso, ni tampoco compañeros que dirigen comunidades autónomas. Los acuerdos con los independentistas no han sentado bien dentro de la militancia, otra cosa es que se aguanten con disciplina de partido. Ni otras cuestiones que no son más que palabrería de presidente pero no deben estar en una carta a la militancia. Si es que has escrito tú la carta, que esa es otra, y no ha sido un encargo para que los medios de comunicación la distribuyan y que la lean los militantes es secundario. Menos derechos subjetivos y más acabar con las colas del hambre, con el paro juvenil, con la ley mordaza y derogar, como prometiste en primarias, la ley laboral del PP. Por desgracia esto no se podrá oír en el próximo Congreso del partido pues se está limitando la democracia y ahora se exigen avales para lo que antes era libre.
Saludos fraternales