Dos que se acuestan juntos acaban volviéndose de la misma condición dicen que dice el dicho. Algo así le debe estar pasando a Florentino Pérez que cada día que pasa se va pareciendo a los Gil, tanto al padre como a Miguel Ángel. Del padre está cogiendo las bravuconadas contra el estamento arbitral y contra los medios de comunicación; del hijo, sin lugar a duda, el vender humo con los fichajes cuando las posibilidades de caja son las que son. Miguel Ángel Gil ha difundido, entre los periodistas de cámara, un sinfín de fichajes que se sabía jamás se llevarían a cabo por no haber dinero o para despistar mientras se fichaba Tilico o Musampa. También ha filtrado nombres para acabar con la carrera de algún periodista crítico. Su florentineza está jugando a eso desde hace unos años sabiendo que los tiempos de los galácticos y demás fichajes tirando de créditos de Cajamadrid o la banca privada ya no volverán.
Tras el gran timo de Eden Hazard, en el que el Chelsea estuvo listo en vendérselo por cerca de 145 millones de euros (aunque la prensa nacionalmadridista lo rebaje siempre a cien), no quiere arriesgar un céntimo más. Bastante tiene con Bale y Hazard para que ahora le cuelen otra milonga de esas que los todólogos del fútbol internacional venden como lo más maravilloso del mundo. En cuanto ven dos taconcitos o algún control estético ya venden al jugador como lo más impresionante que se puede ver, olvidando aquello que dijo el gran Luis Aragonés (que por algo le llamaban el Sabio), que las filigranas muy bonitas pero que si no valían para nada al equipo eran una mierda. Con la mosca tras la oreja sólo quiere fichar gente que ya esté consagrada o se haya comprobado que sí es buen jugador. El problema es que eso lo filtra a los amigos de la prensa, todos esos periodistas que se sabe “trabajan” para el viudo con gafas, para que rellenen programas de radio y televisión y páginas de prensa escrita, para tapar las vergüenzas actuales.
A más, a más, sabe perfectamente Florentino que no hay dinero en caja por mucho que hayan vendido humo durante las dos últimas temporadas. Justo antes de la pandemia, por estas fechas, personajes como Roncero, Pedrerol y el Marca en general hablaban que el Real Madrid estaba ahorrando dinero para fichar a Kylian Mbappé este mismo verano. Ahora, un año después, dicen que no se había ahorrado y que con la crisis por la pandemia va a ser que no, que mejor esperar a que llegue gratis dentro de un año y mientras tanto ya se fichará a otro de los buenos. Eso lo cuelan por lo bajini, por aquello de decir que ya lo habían advertido, a la vez que siguen alentando el sueño imposible con afirmaciones de que los goles del francés son de un madridista, que si ya es el mejor jugador del mundo y que su destino es el blanco. ¿Con qué dinero? Desde luego con el que hay en caja no.
Mientras se espera a Mbappé, ahora cuentan que quien sí vendrá es Erling Haaland, el cual, como hacen con todas la historias que se montan en sus cabezas, está deseando venir, va a presionar al Dortmund para que le deje salir, que si tiene una cláusula liberatoria sólo para el Real Madrid… así para entretener a la parroquia de las pipas. Mbappé este año no, porque cobra mucho, pero sí Haaland que debe ser que vendrá sin cobrar desoyendo ofertas de Liverpool, City u otros equipos que le ponen muchos millones de sueldo a los que renunciará porque es madridista desde pequeño y su ilusión es estrenar la caja de herramientas moderna que va a ser el nuevo Bernabéu. Lo dicen así y lo gracioso es que se lo creen y todo. Para esto Jesús Gil era un maestro del que ha debido aprender Florentino ya que era capaz de vender, mientras había postura egipcia, a Tilico como el nuevo Mauro Silva. Ahora venden a Vinicius como el Garrincha del futuro y a Rodrygo como Pelé en construcción… y ¡se lo creen!
Tiene Florentino tal control de los medios de comunicación que es capaz de colarles lo que sea a los madridistas y hacerles ilusionarse. Tras venderles la moto de Mbappé ahora les baja a Haaland (que por menos de 80 millones no vendrá) y siguen tan alegres. Es como esos cambalaches que hacen de comprar a Pau Torres por Isco y 15 millones que suelen inventarse. Luego llega el Villarreal y dice que los billetes uno encima de otro y la prensa a decir que si el jugador es medio cojo o algo así. De hecho a primeros de enero Alaba estaba fichado ya y hoy parece que le quieren pagar con pisos de Gilmar o por el estilo y a lo mejó no viene y sí se va Ramos. Vende humo el viudo con gafas por encima de sus posibilidades porque está empeñado en su sueño faraónico, toda vez que ha usurpado la presidencia del equipo con unos estatutos para superricos. Así empezaron los Gil que se quedaron con el Atleti sin poner un euro y llevándose el de los accionistas minoritarios. Cada vez más se va pareciendo a los Gil, salvo que tiene comprada a la mayoría de la prensa y se callan.
Para disfrute del madridismo una linda canción les dejamos para que sueñen con Mbappé, Haaland, Alaba y la vuelta de Cristiano…