Una vez más Juan Carlos Girauta interpretando a la perfección su papel, el que le ha tocado en la política espectacular, de agitador de la turbamulta. El gracioso de Ciudadanos que suelta el cubata para enfrentarse a los “rojos”, a los marxistas, a los comunistas, a los demás que no piensan como él. En esta ocasión ha querido retar a un duelo intelectual a la portavoz socialista Adriana Lastra a cuenta del escritor español Antonio Machado. Gracias a ello hemos conocido que el portavoz parlamentario de Ciudadanos acude cinco veces al año a Colliure para visitar la tumba del escritor. Cinco, no una o dos, sino cinco veces al año, como dice él mismo, sin exagerar. De esta forma, como pueden ver en el tuit que ha escrito el graznador profesional del frente naranja, ha acudido más de 200 veces en su vida. Si tiene 57 años y hasta los 18 no habrá podido salir de España así como así (eran los tiempos de la dictadura), hagan el cálculo. Cinco veces al año salen.

Tras esta exageración, propia de una mente delirante por momentos, lo que queda detrás es que Girauta se ha lanzado contra el PSOE porque, desde la sede de Ferraz, han afeado a Albert Rivera haber puesto un tuit en recuerdo del escritor sevillano (No, no nació en Soria como dijo hace tres años Pedro Sánchez). Y, por una vez, hay que darle la razón mínimamente. ¿Qué estará pasando con los comunicólogos de Ferraz esta semana que van de metedura de pata tras metedura de pata (copiar un eslogan de Vox fue la primera)? Antonio Machado no es patrimonio de ningún partido y todas las personas con algo de cultura saben perfectamente lo que sucedió con su vida. Como saben lo que pasó con García Lorca. “Los mismos que pactan con Vox y que se niegan a la exhumación de Franco reivindican ahora el legado de un poeta que sufrió al dictador hasta su muerte, Qué falta de respeto a la víctimas de la dictadura y qué poca vergüenza tenéis Pablo Casado y Albert Rivera” han escrito desde el PSOE. Y se equivocan en Ferraz. Siendo rigurosos en términos históricos, Machado no sufrió al dictador porque no lo era en el momento de su exilio. No es una víctima en sí de la dictadura sino del golpe de Estado. Siendo rigurosos, ahora bien si nos inventamos las cosas, Rivera nació como poco en Sodoma.

La chulería de Girauta está, en parte y sólo en parte, justificada. Machado es patrimonio histórico de España, no de alguna de las dos Españas que “te helarán el corazón”. Esto es lo mínimo si se quiere avanzar por un camino distinto al de los fascistas. Una vez dicho esto, seguramente ni Rivera, ni Casado sabrán mucho de Machado, como la mayoría de españoles. De hecho, igual Casado se ha equivocado de hermano y quería hablar de Manuel Machado, al que los fascistas llamaban el bueno. Habiendo hecho bien Girauta en reclamar para todos los españoles el significado universal de Antonio Machado, el resto le sobra porque insinúa que la portavoz del PSOE, Adriana Lastra es estúpida. No es que sea una lumbreras, pero no tiene porqué conocer la vida y obra del escritor. Algo que parece sí conoce Girauta, que irá más allá de las canciones de Serrat esperamos. Además para algo va a su tumba todos los años cinco veces.

No sabemos que vertiente hedónica encontrará Girauta yendo a un cementerio a ver una tumba cinco veces al año, pero como esas extrañas filias no son parte del análisis que están leyendo las dejaremos de lado. Pero sí señalaremos que el portavoz de Ciudadanos se pone gallito e intenta ridiculizar a Lastra. Intenta dejar un halo de estupidez en la portavoz socialdemócrata. Y eso que la asturiana se abstuvo para que gobernase Rajoy. ¡Estos de derechas no respetan nada! ¿Por qué no pide medirse, tan sobrado que parece que va con el senador Miguel Ángel Vázquez? Es susanista, así que no le pegará el sanchismo ese al que parecen tener miedo los naranjas, no vaya a ser que tomen conciencia de la realidad. Vázquez es un hombre docto que igual le enseña a Girauta aspectos para él desconocidos de la poesía machadiana. Y si tiene verdaderamente arrestos, que se enfrente a Alfonso Guerra, que tuvo hasta una librería que se llamaba como el escritor. Si se eligiese a cualquiera de estos dos, no diría tan alegremente cualquier político socialista.

Eso sí, a otros nos gustaría debatir con Girauta, aunque suele ponerse a graznar cuando se ve derrotado, sobre las masacres de los israelitas en Palestina, ya que se declara sionista. O que explique si le parece normal apresar a una niña y tenerla tres meses en una prisión por dar un tortazo a un soldado que estaba invadiendo su casa. ¿No es un defensor de la propiedad privada? También nos gustaría que nos contase lo de los peones negros del 11-M como buen defensor de la teoría conspiranoica de ETA y de Rubalcaba por detrás moviendo hilos para hacer caer al gobierno del PP (sin ser Rubalcaba ni ministro, ni nada en 8 años de gobierno de Aznar). O que nos cuente qué es ser liberal, porque cada vez que habla no se entiende qué es. Parece una cotorra mandada por las huestes imperiales para soltar el decálogo estadounidense de buen demócrata. Si llegó a decir que el marxismo es asesino. ¡El Marxismo que es un método de análisis! Es lo que pasa cuando vas de intelectual por la vida y resulta que tu filósofo de cabecera es Federico Jiménez Losantos. Si mal estuvo el PSOE intentando patrimonializar a Machado, pero lo de Girauta dando a entender que Lastra es inculta. Es una muestra más del elitismo y la prepotencia de clase frente a alguien sin estudios, pero que igual tiene más integridad que él. Girauta es un claro representante del clasismo aspiracional, ahora ya se ve como parte de la élite española, eso sí, con bandera de 2,50 euros.

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