La sensibilización sobre la importancia de una buena gestión de residuos sólidos urbanos para la salvaguarda del medio ambiente y la salud de las personas es un aspecto sobre el que el Gobierno de República Dominicana y Luis Abinader tienen las cosas cristalinamente claras en torno a qué es lo mejor para las dominicanas y los dominicanos, los beneficiarios finales de las actuaciones emprendidas por la Administración.
Sirva como ejemplo que, en el marco de los planes de regularización de sitios de disposición final de residuos sólidos urbanos o vertederos, a lo largo de 2022, el Estado emitió 11 resoluciones de cierre en varias provincias, como San Francisco de Macorís, Santo Domingo, Santiago, Puerto Plata, Moca, La Altagracia, Dajabón y Baní, según un informe del Gobierno. Por otro lado, se autorizaron dos sitios de disposición final que cumplen con los requerimientos de la Ley 225-20 de Gestión Integral y Coprocesamiento de Residuos Sólidos.
En este sentido también se ha determinado el formato del formulario que será aplicado para el registro de generadores de residuos de manejo especial o peligroso.
De la mano del Proyecto de Fortalecimiento de la Capacidad Institucional para la Gestión Integral de los Residuos Sólidos (FOCIGIRS) se desarrollan dos proyectos piloto de sitios de disposición final, uno en San Juan de la Maguana y otro en San José de Ocoa, con el apoyo del Gobierno de Japón.
Esto en lo que se refiere a la gestión de residuos. Pero si echamos un vistazo a las cifras, solo durante 2022 el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales emitió un total de 713 autorizaciones ambientales, representando una inversión total de unos RD 160,670 millones en fondos tanto del sector público como privado, para un aumento del 44% con respecto al año anterior.
Un hecho que repercute positivamente en el crecimiento de los principales sectores económicos del país.
Un informe anual recoge que 502 empresas han sido controladas en materia de calidad ambiental a través de la verificación del cumplimiento de los Planes de Manejo y Adecuación Ambiental, con el aumento del número de establecimientos que se integraron a la plataforma de monitoreo de dicha gestión.
Respecto al consumo de sustancias controladas por sus efectos destructivos sobre la capa de ozono, este se redujo en un 17,1 % en términos relativos (equivalente a 441.5 TM), respecto al consumo anual establecido en el cronograma de eliminación de Sustancias que Agotan la Capa de Ozono SAO (533.0 TM). Esto fue verificado a través de 161 inspecciones y verificaciones en puertos de entrada y salida de sustancias reguladas por el Protocolo de Montreal y sus enmiendas. En ese sentido, la entidad proyectó que el consumo de SAO se reduzca en un 15,1 % adicional en el 2023.
En el marco del saneamiento de aguas, un acuerdo de cooperación entre el Ministerio y la Armada de la República Dominicana permitirá reflotar, reciclar y trasladar embarcaciones hundidas y abandonadas en la margen del río Ozama.
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales se comprometió a continuar trabajando para la conservación y aprovechamiento sostenible de los ecosistemas y su biodiversidad, la prevención y control de la contaminación y la gestión integral de los recursos hídricos, así como el combate al cambio climático.
Y los compromisos se cumplen. Esa es una de las máximas de Luis Abinader y su forma de gobernanza con el pueblo y para el pueblo, también en las cuestiones que tienen que ver con la preservación de la salud del planeta y de la ciudadanía.
