No es la primera vez que la Justicia deja en libertad a Nervis Villalobos, uno de los principales socios de la trama corrupta creada por Rafael Ramírez, ex ministro de Energía y ex presidente de la petrolera PDVSA, junto a otros como Diego Salazar Carreño, Baldo Sansó, Luis Alfonso Oberto, Franscisco J. D´Agostino, Carmelo de Grazia, Javier Alvarado, Jorge Neri y S.E. Todos ellos tienen abiertas investigaciones por blanqueo de dinero, administración desleal, delitos fiscales y corrupción internacional en distintos países del mundo, incluida España, Estados Unidos y la propia Venezuela.
En el caso de Villalobos, su nombre ya apareció en el caso del Banco Madrid por blanqueo de capitales a través de la entidad portuguesa Espirito Santo que terminaba en la banca andorrana. Además, está reclamado por tribunales de los Estados Unidos que le acusan de blanqueo de capitales. Villalobos aceptó su extradición al país norteamericano, hecho que no se ejecutará mientras siga teniendo causas pendientes en España. Venezuela también reclamó la extradición del ex viceministro por blanqueo y evasión de capitales.
En España, sin embargo, Villalobos cuenta con cierta protección política, pero, sobre todo, empresarial a través de los corruptos venezolanos que han convertido a nuestro país en el centro de operaciones de la red de Ramírez. Muchos de los socios del ex presidente de PDVSA se han convertido en empresarios y realizan fuertes inversiones en España. Dinero tienen de sobra puesto que, según cifras de la Asamblea Nacional de Venezuela, se calcula que la organización de Ramírez sacó de la República Bolivariana más de 11.000 millones de dólares. Multitud de estos empresarios «bolichicos» están siendo investigados por las fuerzas de seguridad y por la Justicia por las querellas interpuestas por empresarios y ciudadanos españoles por, entre otros presuntos delitos, estafa, administración desleal, corrupción empresarial o blanqueo de capitales.
A pesar de sus conexiones presuntamente delictivas, del tráfico de dinero que llega desde países como Luxemburgo, Islas Vírgenes, Hong Kong, Gibraltar, Rusia o Portugal, estos «boliburgueses» han logrado crearse una red de relaciones con los distintos poderes (político, abogacía, judicatura, fiscalía, financiero o empresarial) que les da impunidad. Algunos de estos corruptos venezolanos siguen en libertad, viviendo en La Moraleja, La Finca, La Florida o Montepríncipe, con un elevado tren de vida, y haciendo elevadas inversiones inmobiliarias en los barrios más exclusivos de Madrid o en zonas de costa como Marbella. Sin embargo, ya son varios los que tendrán que lidiar con la justicia española, como hemos afirmado anteriormente. Es curioso cómo estos venezolanos han logrado a ganarse la amistad de algunos de los jóvenes nuevos líderes de la derecha española a los que les esculpen los músculos en locales cercanos al Parque del Retiro. Por otro lado, hubo intentos de colocar 12 millones de dólares procedentes de la red de sociedades fantasmas en el Banco Popular, operación que esta entidad se negó a aceptar. Presuntamente ese dinero se quedó en Luxemburgo.
La puesta en libertad de Nervis Villalobos es una prueba más de ello. Tal y como publicamos en Diario16, fue excarcelado en el mes de septiembre, pero volvió a entrar en prisión ante las nuevas pruebas de blanqueo de capitales presentadas por la Fiscalía.
En ese tiempo Villalobos, entre otras actividades, realizó gestiones para que Rafael Ramírez tuviera la misma impunidad en España de la que disponen el resto de miembros de su red, ya que su visado en el Principado de Mónaco expira en pocos días y no va a ser renovado. Para ello, según fuentes consultadas por Diario16, el entorno de Ramírez se habría puesto en contacto con el ex juez Baltasar Garzón para que intentara llegar a un acuerdo con la Justicia española. Según las mismas fuentes, la influencia y la experiencia del ahora abogado en asesoramiento de importantes personalidades latinoamericanas relacionadas con tramas corruptas fue un argumento que el entorno de Ramírez tuvo muy en cuenta. El acuerdo que se estaría negociando en la actualidad pasaría por la entrega del ex presidente de PDVSA a las autoridades españolas, aceptar un año de cárcel y luego la libertad disfrutando de la totalidad de la fortuna que amasó a costa del pueblo venezolano.
Sin embargo, a pesar de las evidencias, la Audiencia Provincial de Madrid, en una decisión sin precedentes si no se tuviera en cuenta la protección de la que disponen estos corruptos venezolanos, ha entendido que los nuevos indicios de blanqueo de capitales presentados por la Fiscalía no son suficientes para que permanezca en la cárcel.
¿Por qué se le pone en libertad? ¿Qué intereses hay en que Villalobos esté en la calle? En Diario16 ya informamos del acuerdo al que había llegado con la Fiscalía debido a la situación en que se encontraba en prisión. Desde esa publicación, varios corruptos venezolanos fueron detenidos. Sin embargo, Villalobos trabajó como una especie de «agente doble» y el flujo de información podría ir en contra de quienes protegen desde el poder a todos los «bolichicos» que expoliaron al pueblo venezolano.
La Justicia no puede estar sometida a presiones externas ni entregarse a los intereses particulares y espurios de nadie, sobre todo de personas que están siendo investigadas por los tribunales de medio mundo.