Está la afición atlética en un sinvivir todo el verano a cuenta de los fichajes y las temidas salidas del equipo. Un estado de tensión no tanto por las típicas jugadas de tahúr con cartas guardadas en el chaleco del jeque mochilo como por la falta de noticias en la prensa mayoritaria del Atlético de Madrid. Plantillas con cuatro o cinco periodistas para cubrir la información del conjunto rojiblanco y nada, que hay que enterarse de los movimientos del mercado de fichajes en la prensa extranjera.
Da igual si es el Corriere dello sport, el Manchester Evening News –por cierto, ayer destacaban que el ManU desistía en el fichaje de Trippier-, el Liverpool Echo, L’Equipe o cualquier otro medio con cierta solvencia futbolística, en todos ellos han buceado los aficionados buscando algún tipo de información sobre las entradas y salidas de jugadores. Tecleando en el traductor o haciendo memoria de lenguas, en algunos casos sin uso en un tiempo, los aficionado rojiblancos se han enterado del fichaje de De Paul o el posible fichaje Vlahovic/Cunha… mientras en España As y Marca, en menor medida Mundo Deportivo (ahí estuvo Javier Gómara con la exclusiva del posible intercambio Griezmann/Saúl que otro elevaron a la categoría de hecho con seguridad), a verlas venir.
A verlas venir o a traducir lo que decían en otros medios, en algún caso sin hacer referencia o incluir enlace en la edición digital, cuando ya se habían enterado los aficionados compartiendo las noticias en redes sociales. Habrá venido bien a los que no sepan idiomas o no estén habituados a cierta jerga que se usa en otros países, pero noticia de primera mano, nada de nada. Para la salida de Saúl o el acuerdo, que se rompió, con Rafa Mir tampoco había que estar muy pendiente de fuentes porque se han filtrado masivamente (no se dirá quienes porque es uso periodístico), pues han llegado hasta este escribidor que no se dedica al deporte en concreto (aunque escriba mucho sobre el Atleti). Moretto o DiMarzio han informado mucho más a miles de kilómetros.
¿Por qué se produce esto? Lo primero que hay que destacar es que, desde la llegada del Cholo Simeone, se ha impuesto un silencio institucional enorme a fin de no descentrar a la plantilla con rumores infundados. Eso es cierto, pero el trabajo de un periodista es investigar todas las vías posibles para sacar la información. Segundo a destacar es que existen muchos periodistas, los que no escriben en los periódicos del régimen, que están de una u otra manera “excluidos” de cualquier acceso a información relevante del Atlético de Madrid y eso impide, en cierto sentido, que la rumorología se active. Una tercera posibilidad es que, y esto no es más que una mera suposición personal, Andrea Berta filtre a sus allegados italianos. Pero eso no es demérito de aquellos sino de éstos que no han sabido ganarse al director deportivo.
El caso es que la información, salvo excepciones, es muy limitada hacia la parroquia rojiblanca en comparación con la cantidad de recursos utilizados. Tampoco es que las entrevistas sean algo común y corriente. Un algo que llevarse a la boca. El jefe de prensa puede poner las cosas duras, pero solamente hay que sacar dos o tres artículos tipo “Gil cabrón” para que se avengan a razones. Esto no es nuevo, lo hacen un montón de periódicos cuando se acerca la época de subvenciones/publicidad institucional. Se atiza al gobierno de turno y nivel y a poner el cazo. En el caso del fútbol, pues a pedir que la actitud sea más laxa respecto a entrevistas. Porque esos artículos tan modernistas sobre los entrenamientos y las posibles alineaciones, siendo necesarios, los puede hacer cualquier becario.
Seguramente sean más los motivos institucionales que los personales (los periodistas) los que provocan esta carencia de información. Pero en un mundo tan competitivo como la información digital al minuto, igual hablar sobre los sobacos afeitados de Giménez o lo maravilloso que es Gil gestionando no es lo que esperan los aficionados. Al final se cansan y se van con Ibai Llanos o con otro tipo de medios, aunque tengan que ejercitar lenguas desconocidas y usar el traductor digital. Entre los vetados, los minoritarios y los institucionales, al final la afición del Atlético de Madrid es la peor informada. ¿Se ha completado la ampliación de capital que venció la semana pasada? Ni un solo artículo sobre el tema. Sólo de los artículos que son copiar los vídeos de la SAD no se vive. No hay duda que son profesionales y deberían aplicarse el cuento porque como bajen las visitas, el camino hacia la cola del SEPE es más que probable.