Las relaciones internacionales de Venezuela con la mayor parte de los países se van deteriorando por momentos, desde que el Ejecutivo de Maduro anunciara su triunfo en las elecciones para la aprobación de la Asamblea Constituyente.
Así, Smartmatic, la empresa encargada del voto electrónico en Venezuela, denuncia la manipulación de los resultados de las elecciones celebradas el pasado domingo. El consejero delegado de la compañía, Antonio Múgica, aseguró desde Londres que entre el recuento anunciado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el que registró el sistema (en Venezuela todo el voto es electrónico) hay una diferencia de «al menos un millón de votos». «Hubo manipulación de los datos en la elección de la Asamblea Constituyente».
La oposición denuncia que no hubo auditores propios en los comicios del domingo, ya que ellos mismos anunciaron que se negarían a participar en el proceso elector
Smartmatic, empresa de origen venezolano y siempre cuestionada por haber crecido bajo el manto del chavismo, denunciaba así que el CNE se inventó la cifra de 8.089.320 electores. Es probable que quisiera superar los 7,68 millones de votantes que la oposición aseguró haber movilizado en su referéndum contra la Constituyente de dos semanas antes.
Por otra parte, La Unión Europea y sus 28 países miembros, se han posicionado en contra de la Asamblea Constituyente de Nicolás Maduro, al que han pedido “medidas urgentes” para modificar el rumbo del país.
Federica Mogherini, alta representante de la UE para la Política Exterior, expresó a la prensa, el rechazo a la Asamblea Constituyente elegida el pasado domingo. Desde esta instancia pide al gobierno presidido por Nicolás Maduro, que se recupere el status quo, sino el organismo intensificará su respuesta si se siguen socavando los principios democráticos.
La UE lamenta en la nota de prensa emitida, que los poderes venezolanos continúen adelante con los resultados emitidos en los comicios. Desde la propia organización europea se señala que: “Las circunstancias en las que se celebraron generan dudas sobre la capacidad de la Asamblea Constituyente”, alegando por este motivo, que esta no representa a todos los ciudadanos de Venezuela.
En la línea de la incredulidad y solicitando un cambio drástico, se mueve EE.UU. Por medio de su secretario de estado, Rex Tillerson, el gobierno norteamericano ha transmitido que están evaluando todas las acciones políticas, “para crear un cambio de condiciones (en Venezuela) donde o bien Maduro decida que no tiene futuro, y quiera marcharse por su propia voluntad o nosotros hacemos que el Gobierno vuelva a la Constitución”
A las dudas de la Comisión Europea sobre la Constituyente, se suman las palabras expuestas por Antonio Múgica, consejero delegado de Smartmatic, empresa encargada del conteo de los votos del pasado domingo. Desde la compañía se denuncia que los datos de participación expuestos por el gobierno, no encajan con la realidad.
La empresa fundada en el año 2000, en el condado de Palm Beach, Florida, ha realizado a lo largo de sus 17 años “más de 3700 millones de votos, en unas 3500 elecciones en todo el mundo”, según informan ellos mismos en su propia web. Smartmatic encargada del voto electrónico, llevaría desde 2004 colaborando con Venezuela, abalando todos los resultados acaecidos en todas las elecciones subsiguientes, a excepción del proceso del pasado domingo.
Al albur de las declaraciones realizadas por la empresa encargada del voto electrónico, donde se solicitaba indispensable la participación de todas las fuerzas políticas en el recuento de votos, la oposición denuncia tal situación de falta de pluralidad, aunque lo cierto es que ellos mismos anunciaron que se negarían a participar en el proceso.
Por su parte el MUD (alianza opositora), sigue alentado a la desobediencia civil, con la que espera desarbolar la deriva que plantea el proceso constituyente.