Los clanes que controlan el narcotráfico en la zona del Campo de Gibraltar han visto un buen negocio en la inmigración clandestina. Según fuentes de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) el pasado 10 de septiembre se detectó un vídeo en el que supuestos contrabandistas de droga trasladaban a varias personas que habían recogido en Marruecos para hacerlas saltar al agua cerca de la playa de los Lances, en Tarifa. Durante esta operación fueron interceptados seis inmigrantes, mientras que los traficantes lograron huir.
El narcotráfico ha sobrepasado ya el ámbito de la delincuencia común para convertirse en un problema de mucha más envergadura, y expertos policiales consultados por Diario16 hablan ya de auténticos cárteles de la droga asentados en las costas andaluzas y formados por grandes bandas dotadas de medios e infraestructuras, “cada vez más inabordables para los policías y guardias civiles”.
Las fuentes policiales consideran que nos encontramos ante una peligrosa coincidencia de actividades delictivas: la del tráfico de estupefacientes y la de las mafias que se lucran con la desesperación de las personas que tratan de acceder irregularmente a territorio español. Esta conjunción incrementa “exponencialmente” el riesgo que afrontan los agentes de fronteras en su trabajo y dificulta enormemente su eficacia.
“Desde AUGC venimos reclamando desde hace tiempo la puesta en marcha de un plan integral contra estas bandas, que conjugue el trabajo policial con el institucional y que pase, en primer lugar, por el refuerzo de medios y personal en la zona”, asegura la asociación que defiende los intereses de los agentes de la Benemérita.
Según AUGC nos encontramos ante delincuentes que, además de contar con grandes medios y apoyos en la zona, recurren a la violencia cada vez con mayor frecuencia, de ahí el riesgo de que el Campo de Gibraltar termine convirtiéndose en territorio narco donde las bandas campan a sus anchas, tal como informó Diario16 en un reciente reportaje. La entrada de estos clanes mafiosos en el negocio de la inmigración irregular (uno de los más lucrativos junto al contrabando de drogas y la prostitución) no hace sino demostrar la “envergadura y el potencial de estas bandas, así como la cada vez más perentoria necesidad de hacerles frente con todos los medios al alcance de nuestro Estado de Derecho y nuestras fuerzas de seguridad”, insisten las fuentes de AUGC, que viene alertando de la grave situación que se vive en las costas andaluzas sin que ningún gobierno tome la decisión de destinar presupuestos a un gran plan integral de seguridad para la frontera sur española.
Desde hace años, AUGC reclama un aumento de 300 agentes uniformados en Algeciras y unos 100 para los equipos de investigación
El mayor problema en el Estrecho es el incesante y diario trasiego de hachís entre la costa marroquí y la española. Ahora los clanes de la droga han caído en la cuenta de que embarcando a varios inmigrantes en las narcolanchas, junto a los fardos de droga, los beneficios se incrementan de forma considerable. Cada lancha puede llegar a transportar hasta 2.500 kilos de hachís. Unos cinco millones de euros por viaje. De 5.000 a 7.000 millones al año, que es lo que se supone mueve el tráfico de estupefacientes a gran escala en la zona. Si a esa cifra se suma que cada inmigrante puede llegar a pagar a las mafias entre 1.000 y 2.000 euros por pasar al otro lado, esto da una idea del volumen del negocio y la magnitud del problema. En ocasiones los traficantes cobran al migrante el doble del precio estipulado, bajo el argumento de que el viaje es más rápido y seguro en una narcolancha que en una patera destartalada.
Desde hace años, AUGC reclama el aumento de unos 300 agentes uniformados para esta Comandancia y unos 100 para los equipos de investigación con el fin de poder combatir el narcotráfico de una forma “eficaz y efectiva”, sin que el servicio de Seguridad Ciudadana se vea mermado, como está ocurriendo en la actualidad, “ya que con las avalanchas de migrantes se han tenido que dedicar la mayoría de los recursos policiales a atender estas incidencias”, explican las fuentes de la asociación.