Un estudio del Hospital Clínico de València, liderado por Servicio de Cardiología y el grupo de investigación en Cardiología del Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, concluye que los niveles de potasio se asocian a un riesgo de mortalidad en pacientes con insuficiencia cardiaca.
Tal y como ha demostrado la investigación se sigue un patrón de riesgo con forma de ‘U’, es decir, con mayor riesgo a ambos extremos de su distribución (hipo e hiperpotasemia). Los resultados de la investigación han sido publicados este octubre en la prestigiosa revista internacional Circulation.
La investigación se ha desarrollado en colaboración con el Hospital Universitari Germans Trias i Pujol de Barcelona, la Clínica del Corazón de la Universidad de Múnich (Alemania) y en el Centro de Investigación Clínica Pluritemática de la Universidad de Lorraine (Francia). En el estudio han participado 2.164 pacientes con insuficiencia cardiaca, analizándose más de 16.000 determinaciones evolutivas de potasio en muestras de sangre.
«El potasio es un tipo de electrólito o mineral del cuerpo que tiene una carga eléctrica y que nos ayuda a controlar los niveles de actividad de los músculos y los nervios, el metabolismo, la digestión y el equilibrio de los procesos químicos y eléctricos de nuestro cuerpo. Nuestro cuerpo necesita potasio para que nuestro corazón y otros músculos funcionen correctamente, pero al mismo tiempo la alteración en su concentración a nivel del medio interno se asocia a efectos perjudiciales», ha explicado Julio Núñez, cardiólogo del Hospital Clínico y uno de los autores del estudio.
«Estudios anteriores ya habían demostrado que el potasio presenta implicaciones a nivel pronóstico, pero añadimos que los cambios evolutivos del potasio se asocian sustancialmente a cambios en el riesgo de muerte de los pacientes tras un episodio de insuficiencia cardiaca», ha añadido. Según ha resaltado el especialista en cardiología, «este trabajo aporta bases sólidas sobre la importancia del potasio en la monitorización de los pacientes con insuficiencia cardiaca».
El estudio ha concluido que la normopotasemia (nivel normal de potasio en sangre) se asocia a una reducción sustancial de riesgo de muerte en estos pacientes. Así pues, en los enfermos en los que tras tener los niveles de potasio en sangre muy elevados o muy bajos pasan a tener unos niveles normales, se asoció a una reducción sustancial del riesgo de muerte.
«Tenemos que medir periódicamente los niveles de potasio de nuestros pacientes y controlarlos para que evolucionen correctamente. Además, el estudio abre las puestas a considerar el potasio sérico como una potencial diana terapéutica», ha concluido Núñez.