El gobierno del presidente Luis Abinader reconoce el valor que tiene Bahía de las Águilas. Por ello, antes de presentar todos los proyectos en la Feria Internacional de Turismo (Fitur-23) consideró oportuno dejar muy claro que dicha bahía es intocable, por eso no está dentro, ni influye para nada, en ninguno de los proyectos que han sido presentados como desarrollo turístico y económico del país.
Desde la Presidencia del Gobierno, Abinader manifestó: “Para evitar tergiversaciones, queremos aclarar que Bahía de las Águilas no forma parte del Proyecto de Desarrollo Turístico de Pedernales-Cabo Rojo, tampoco del Fideicomiso Pro-Pedernales. Nuestro Gobierno siempre ha garantizado y seguirá garantizando que Bahía de las Águilas permanezca como área protegida”.
Bahía de las Águilas, es una playa de arenas blancas y finas, que permanece en estado virgen, por lo cual, en este lugar, se puede gozar de una naturaleza pura, en donde abundan la fauna marina y una costa adornada de hermosura natural. Tanto estas como otras razones son por lo que Bahía de las Águilas es considerada como área protegida, situación que garantiza la administración Abinader, debido a su compromiso con la verdad en su estilo de gobernar, dejando muy claro la línea bien trazada entre el desarrollo del país y la preservación del medio ambiente.
El Plan de Desarrollo Turístico de Pedernales-Cabo Rojo, es un proyecto que vislumbra oportunidades de crecimiento para la región sur del país, área con gran potencial turístico, pero a la vez muy poco desarrollada. No obstante, esta obra inicia una nueva historia para cada ciudadano que vive en esta región, pero más aún es otra vía que inyectará ingreso al Producto Interior Bruto de la República Dominicana.
La construcción de “Port Cabo Rojo” es una de las obras fundamentales de este Plan. Por consiguiente, es una generadora de empleo, algo que está dentro del plan de desarrollo del Presidente Abinader: «Nosotros no contemplamos ninguna acción de gobierno si no podemos transformarla en bienestar y empleo para nuestra gente. Ese es nuestro sueño y nuestro compromiso más firme. Los miles de empleos que se crearán serán miles de vidas transformadas«, afirmó el presidente cuando se iniciaba la ejecución de obras del Plan.
No obstante, la importancia del proyecto, el avance que la gobernanza de Abinader persigue lograr en Pedernales, está igualmente basado en el respeto al patrimonio medioambiental del país caribeño.
En República Dominicana se ha marcado el inicio de un nuevo tiempo político, ético, social, económico y humanista; un tiempo de igualdad, respeto, Derechos Humanos y de respeto al medioambiente, conciencia social y democracia real constitucional; un tiempo de desafío y reto con el que hacer frente a la crisis global y a los populismos fundamentados en comportamientos terriblemente humanos.
El objetivo del presidente Abinader, con su nuevo estilo de gobernar, es conservar la República Dominicana potenciando su esplendor, su cultura y su identidad, para y solo el pueblo dominicano.
La vida vivida en lealtad con la conciencia no se puede perder.