Andrés Pedreño, diputado regional, le ha dicho al consejero Javier Celdrán que para tener “una ligera idea” de lo que están pasando los vecinos de estos pueblos, “bien podría poner un pie en alguna de las localidades de la Sierra Minera y comprobar in situ cómo las aguas rojas, llenas de partículas tóxicas y contaminantes, llegan a escuelas, casas, parques, etc. Sin hablar de que también estos residuos invaden los acuíferos que luego los regantes usan para sus cultivos o su más que comprobada llegada al Mar Menor”.
Pedreño ha resaltado durante su intervención en el Pleno que a pesar de que la restauración, descontaminación y la impermeabilización de la balsa minera Jenny lleva “14 años dando vueltas y seis millones de euros de inversión, hay que empezar desde cero porque el PP ha hecho una auténtica chapuza. Nos dieron gato por liebre”.
🗣️@andrespe2008 defiende la moción de @podemosmurcia en la que se exige la reparación, bien hecha, de balsa Jenny. La pasada semana estuvimos con los y las vecinas del Llano del Beal, que siguen sufriendo problemas de salud a causa de la contaminación.#PlenoAsamblea pic.twitter.com/Md8NXowWoD
— Podemos Región de Murcia (@podemosmurcia) September 20, 2018
Es “surrealista y representa el modus operandi del PP” ha dicho el diputado de Podemos, que el gobierno encargase estos trabajos a Portmán Golf, la empresa culpable de esta situación. Ahora nos topamos “con la misma historia de siempre. El PP ha puesto al zorro a cuidar de las gallinas y nos encontramos con que los mismos depredadores de dinero público y de nuestro medio ambiente son los responsables de restaurar la zona. Un disparate”.
Por eso, Andrés Pedreño ha invitado a Celdrán a ver cómo cuando llueve, las aguas rojas cargadas con metales pesados “bajan por estos pueblos sin ningún control. Y todo, porque el gobierno el PP se toma a broma lo que está pasando con la gente de estos pueblos”.
Pedreño ha incidido en que “Jenny sigue existiendo y además se ha dispersado hasta en tres ubicaciones. A pesar de los 6 millones de euros invertidos no se descontaminó el subsuelo. Solamente se le echó una capa de tierra encima en vez de haber sido sellados e impermeabilizados. Lo único a lo que se ha procedido es a plantar unos cuantos árboles, que además la mayor parte se han secado.”.
Por último, Pedreño ha destacado que cuando la corta de Los Bancos I se colmató, todavía “quedaban estériles y residuos de Jenny sin trasladar. Portman Golf, se los llevó ilegalmente a otra corta minera, a la cantera Emilia, aprovechando un vertedero de residuos inertes de la construcción. Este nuevo emplazamiento irregular de Jenny dista a tan sólo 800 m del núcleo urbano del Llano del Beal”.