El secretario general y portavoz parlamentario de Podemos Región de Murcia, Óscar Urralburu, ha señalado que “pronto” empieza la consejera de Educación a “mentir de forma descarada y la lista es larga. No es verdad que haya más dinero para la pública y más profesores, ni hay menos niños y niñas por aula. Tenemos los mismos problemas estructurales después de diez años de recortes sostenidos y de tener una Consejería que discrimina y humilla a la pública mientras potencia y promociona la educación privado concertada”.
Óscar Urralburu ha asegurado que con el PP en el gobierno es “imposible que salgan bien las cosas para la escuela pública. No una hay planificación sensata y seria de las plazas escolares, lo que provoca que en esta Región no esté garantizada una plaza pública por cada niño y niña”. Por eso, ha dicho Urralburu, nos encontramos “ejemplos sangrantes, como el colegio San Cristóbal de Cartagena, donde hay pequeños y pequeñas de tres años en barracones que no tienen asegurado ni el aire acondicionado en verano ni la calefacción en invierno”.
De ahí que el portavoz de Podemos le haya pedido a la consejera de Educación, a Adela Martínez Cachá que de ejemplo y traslade su despacho a uno de estos barracones y sepa “lo que es trabajar con mucho calor en los meses cálidos y con frío y humedad el resto del año.Que conozca de primera mano las condiciones lamentables en las que están miles de alumnos de la Región. Sabemos que no lo va a hacer. Martínez Cachá prefiere seguir beneficiando a la privada concertada a costa de la pública y enriquecer a estas empresas que se lucran con la educación sin ningún tipo de control”.
Pilar Marcos, secretaria general de Podemos Cartagena y portavoz en el Ayuntamiento de Cartagena Sí Se Puede ha recordado que en la ciudad portuaria hay seis centros públicos y un instituto con barracones. Marcos ha cifrado en más de un millón de euros la cantidad que se gasta el gobierno regional en mantener estos barracones, un dinero “con el que se podría hacer frente a las justas demandas de los padres y madres que día tras día tienen que dejar a sus hijos en estas precarias aulas”.
Por su parte, el diputado regional, Miguel García Quesada, quien ha dado clases en barracones, ha contado que la mayoría de estas instalaciones son “inestables, se mueven cuando los niños y niñas corren. No hay sitio para que puedan estar cómodamente y sin apretaduras. Los materiales didácticos no se pueden colgar de sus paredes y la pizarra es muy precaria, por no hablar de los baños y la ventilación que son impropios de sitios donde nuestros hijos pasan una parte muy importante del día”.