El senador valenciano Ferran Martínez, portavoz de Unidos Podemos en la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta, ha registrado una moción para modificar el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, de modo que se fije un tipo mínimo en todas las comunidades autónomas. La iniciativa del senador de la formación morada pretende también la actualización de los tipos de gravamen, mejorando su progresividad. Algo que se viene reclamando desde la sociedad civil pues, en la actualidad, cada Comunidad tiene la capacidad de modificar la normativa estatal, generándose de esta forma un dumping fiscal entre unas regiones u otras.
Durante los últimos años Ciudadanos ha impulsado su eliminación en Andalucía y en Murcia, fomentando la competencia fiscal a la baja entre territorios, como ya ocurría en el caso de la Comunidad de Madrid. Cuando una determinada Comunidad Autónoma decide rebajar este impuesto, obliga a las demás a hacer lo mismo o a asumir pérdidas en la recaudación, dado que las grandes fortunas pueden cambiar su domicilio fiscal para eludir el pago. En opinión del senador Martínez, “Ciudadanos pretende aprovechar los defectos en el diseño del Impuesto de Sucesiones y Donaciones para eliminarlo, a pesar de que todos los expertos en fiscalidad coinciden en su mantenimiento por motivos de equidad”.
En Ciudadanos no recuerdan, por mucho que digan, a los clásicos del liberalismo que abogaban por eliminar las herencias como fórmula de equiparación de los hombres (en aquella época las mujeres aún no contaban), ya que la cultura recibida sería suficiente para que prosperasen y se elevasen por encima de los demás por su propia personalidad y capacidad. La verdadera igualdad de oportunidades, como proponía John Stuart Mill en sus Principios de Economía Política, debía basarse en que nadie recibiese más herencia que aquella que le permitiese vivir con “moderada” independencia. Pero no ellos son neoliberales y sólo apuestan por apoyar la acumulación de capital de quienes ya tienen la mayor parte de la riqueza, el establishment.
Así pues, Podemos propone conservar el actual Impuesto de Sucesiones, y Donaciones, tal como ocurre en la mayor parte de países de nuestro entorno como Francia, Gran Bretaña, Holanda, Alemania o Italia. La iniciativa del senador Martínez se basa en la necesidad de armonizar los tipos exentos y los tipos impositivos entre Comunidades Autónomas, garantizando así la igualdad y evitando una competencia a la baja entre territorios. Según el senador Martínez “mientras Ciudadanos habla de cohesionar España, por la puerta de atrás promueve leyes que ponen a competir a la Comunidades Autónomas y erosionan la sostenibilidad de la educación y la sanidad públicas”.
El Impuesto de Sucesiones y Donaciones, dejan claro en la formación de izquierdas, contribuye por un lado al sostenimiento de los servicios públicos fundamentales como la educación, la sanidad o el cuidado de las personas mayores. Por otro lado es una herramienta fundamental para contener el aumento de las desigualdades entre ciudadanos que han ido aumentando abruptamente durante los últimos años. En ese sentido Martínez ha remarcado que “Ciudadanos coge el recetario de FAES y de su padrino José María Aznar para seguir mejorando la situación de quienes más tienen a costa de aumentar brutalmente la brecha con el resto de la sociedad”.