Como cada semana santa les ofrecemos a nuestros lectores los premios acordes a este tiempo. Una valoración de lo realizado en el último año por algunos de los políticos españoles desde la ironía.
El premio José de Arimatea por poner los medios y acabar hundido es para Alberto Garzón. Un premio que le gustará mucho por su tendencia cristiana y que ha conseguido por entregar una tumba (IU) al mesías para que pueda resucitar. El problema es que igual este mesías no resucita y se habrá quedado con la tumba y la historia. También, como José, es un defensor del mesías en el sanedrín mediático. Sigue a pies juntillas todo lo que le dicen que debe defender sin importar el legado y tradición que lleva a sus espaldas. Es todo corazón…