Tu equipo ha vencido y pleno de felicidad subes el resultado, o cualquier otro tipo de mensaje manifestando alegría y, sin saber cómo, aparece un cansino a recordarte que no se tienen que celebrar los partidos ganados. Si tú eres del Atleti esto te ocurrirá en cada partido. Siempre está a la que salta ese cansino, ese Isidoro, ese tipejo que se harta a tamales en una aldea perdida de la amazonia colombiana, ese muchacho con problemas de relaciones sociales a decirte que no, que no debes celebrar nada y que él tiene 14.
¿Catorce qué?, se preguntarán ustedes. Pues 14 Champions. En realidad él no tiene nada. En muchas ocasiones no tiene ni para comer. Inteligencia ninguna. Pero cree tener 14 Champions. Son “los tontos las Champions”. Toda su vida gira alrededor de eso. Los tienen en la calle, en la empresa o en los medios de comunicación. Lo que se conoce como roncerismo inilustrado. Amargados de la vida que no saben disfrutar con el aleteo de un colibrí, con la mirada sorprendida de un niño, ni con una victoria de tu equipo de fútbol tras un gran esfuerzo. Si no hay Champions, no se puede celebrar…
…salvo el Real Madrid. Que puede celebrar todo lo que quiera porque lo dicen el Marca, el As, o los Teleñecos de la Noche. Los que han ganado todo pueden celebrar lo que sea. Un momento. ¿Todo? ¡Ejem! Parece que existe un pequeño error en eso. El FC Barcelona sí ha ganado todo pero el equipo blanco no. Tiene Ligas, Copas, Supercopas, Champions, Europa Leagues, Recopas… ¡Ah no! ¡Que Recopas no tiene ni una! El antiguo segundo máximo campeonato europeo no lo han conseguido nunca. Ni una vez. Nada. Cero. No saben lo que es.
Un trofeo que el Barça, el Bayern, el Chelsea, el City, el United, la Juve, el Atlético de Madrid, el Valencia, el Zaragoza y hasta el PSG sí tienen. Y no porque, como podría pasar con la Conference League, no lo hayan jugado. Lo han jugado y hasta han llegado a dos finales donde palmaron. Este trofeo no existe en su memoria porque ni lo han olido. No saben qué se siente al celebrar su consecución. Jamás han jugado la Supercopa por haberlo ganado. Por tanto, no han ganado todo.
Nada mejor que recordárselo de vez en cuando para que bajen de la nube. Siendo “los tontos las Champions” va a ser difícil, pero igual aprenden a no meterse donde nadie les ha llamado. Miles de millones de aficionados al fútbol celebran y disfrutan de sus equipos. Esos que no son el Real Madrid. Aunque sea inconcebible para sus cerebros monofásicos. A disfrutar de los 1.000 millones de más que os ha clavado Florentino Pérez por el Bernabéu. Si no fuera por la mala envidia de ver el Metropolitano, ni un euro hubiese gastado. Pero le puede la envidia. Le jode que todo el mundo no sea de su equipo y eso lo transmite a Isidoro, a Toñín y al rayas.