La chuscada del título viene derivada de otra chuscada del pater Zorzales —a él las culpas por el titular, a quien esto escribe por el desarrollo— pues preguntaba si quienes se debían manifestar el 8 de junio en Madrid eran de la mafia o de la democracia ya que el cartel —que no cártel, que se les ve venir— anunciador del PP no deja clara la dicotomía. Más teniendo la historia que tiene el PP a sus espaldas, como ahora verán. Resulta que ante los numerosos casos de corrupción y utilización de lo público en beneficio de la familia del presidente Pedro Sánchez, el saqueo de las arcas públicas de sus más cercanos secuaces y haber colocado a los más incompetentes, pero colegas, en todas las empresas públicas —¿saben que el antiguo chófer de Sánchez está de jefazo en la SEPI?—, lo mejor es hacer una «manifa».
Alberto Núñez Feijoo debe haber sido uno de esos hippies universitarios que todo lo resolvían con concentraciones y manifestaciones en los años 1990s, porque si no es poco comprensible la querencia a manifestarse y no hacer nada que tiene. Bueno sí, a veces pide comisiones en congreso o senado. ¡La maravilla de las soluciones! No tiene ni la valentía, ni la capacidad de presentar una moción de censura. Sí, no la ganará pero cuando menos denuncia ante todos los españoles la situación y presenta una alternativa… si es que la tiene. Y ahí vienen los temores en las plantas nobles del PP, que no hay alternativa real, ni por demócratas, ni por mafiosos. Usted que mira hacia la puerta del Sol de Madrid pregúntese ¿qué ha hecho Isabel Díaz Ayuso distinto a lo que haría Sánchez? Nada o destrozar la educación y la sanidad pública por no financiarlas adecuadamente mientras riega de millones a grupos mediáticos claramente fascistas y antidemócratas vinculados al narco en algún caso.
Aquí ya no sirve las manifestaciones, o se planta cara y se ofrece una alternativa sólida o se dimite y que pase el siguiente. Porque «esloganear» cosas sobre mafia o democracia ¿a qué viene? Igual es un homenaje a M. Rajoy y María Dolores de Cospedal y sus cloacas. O igual un homenaje a sus amigos de hace años que tenían yates. O un recuerdo a esos presidente que están comiendo chirlas mientras mueren sus ciudadanos y luego mafiosean con los medios para que la culpa sea de cualquier otro. O un homenaje a la reina de las ranas, Esperanza Aguirre, bajo cuyo mandato se saquearon las cuentas de la Comunidad de Madrid en cuatro o cinco casos de corrupción, pero se silenció todo en Telemadrid bajo pena de despido. Algo que existe, por cierto, en la televisión controlada por Ayuso con programas tan edificantes, plurales y democráticos como el de Antonio Naranjo.
O igual es un homenaje a Gabriel Amat y los jueces que no pueden concluir las pesquisas porque lo impidieron desde Moncloa o ahora desde San Telmo. O a todos esos mangutas valencianos, salvo los fallecidos en extrañas circunstancias, que se han ido salvando por milagrosos defectos de forma. O de la financiación del partido con DNIs de vagabundos. O en recuerdo de todos esos alcaldes de pequeñas localidades que «pasaban» la hucha, y no la del Domund, para financiar un partido en el que se cobra poco (20€), tarde o nunca a los miles de afiliados. O a los demócratas fundadores del partido que no apoyaron la Constitución que hoy abrazan con más ánimo publicitario que espíritu demócrata. Al final Sánchez no es más que el reflejo de la política madrileña… del PP. Sánchez es más hijo del PP que del PSOE felipista, con la mala baba de José Luis Rodríguez, alias el negocios chinos y petrolíferos.
Es por ello que es más posible que la manifestación reúna a más mafiosos que demócratas. Porque en el PP cariño por la democracia, casi que no han tenido salvo excepciones.
Algunos en la derecha ya han salido a decir que manifestarse es una estupidez, que si Felipe González no dimitió con todo lo que tenía este menos porque es menos grave… El GAL parece ser que apareció solo y se mantuvo por la voluntad de González, claro. Manuel Fraga jamás se reunió, junto a Jorge Verstrynge, y otros dirigentes políticos para continuar con lo del Batallón Vasco Español y todas esas organizaciones paraestatales que existieron y actuaron justo antes. Y toda la corrupción que había ¿qué?, dirán ustedes. ¿Cuántos fueron condenados? Porque lo cojonudo es que al final condenados, lo que se dice condenados, el calzoncillos y poco más. Eso sí, a diferencia de hoy, en aquellos años existió La conspiración organizada por los principales jefazos de la prensa en comunión con José María Aznar para desbancar a González de cualquier manera. Los demócratas del PP conspirando, ¡no se lo van a creer! De hecho a esto se agarran Sánchez y los sanchistas para decir que existe una conspiración en su contra.
Sánchez no va a dimitir porque es un ególatra que está en política para hacer fortuna, él y todos los que le rodean, y no monetaria solamente. Y ese ansia le puede, le inunda el alma. Es un tipo que debe haber tenido graves problemas afectivos durante su adolescencia y primera madurez, de ahí que copiase su tesis doctoral —como ha hecho un expresidente valenciano, que quiere volver, con Arend Liphart y nadie ha dicho nada—, y necesita la aprobación constante de las masas y los que le rodean. Dinero y fama, el grave pecado del capitalismo actual. Es como los youtuberos y demás tolilis de Tik Tok, Instragam y demás redes sociales. En frente tiene a Feijoo que es… el no ser. Pues ¡hala! a manifestarse los mafiosos en favor de la democracia ¿no? Mientras tanto los españoles de bien jodidos, con salarios que no llegan, con viviendas imposibles, con unas ciudades invadidas y una sensación completa de desprotección. De hunos y hotros, que diría Unamuno.
