En el PP están haciendo todo lo posible por perder las elecciones, así se observa a día de hoy en algunas encuestas, pero en el PSOE no se quedan atrás con sus meteduras de pata. Pedro Sánchez está recorriéndose todas las televisiones, radios y periódicos “amigos” (porque a otros no les concede entrevistas) para intentar vencer en las elecciones, o cuando menos que le den los números para repetir un gobierno Frankenstein. Sus edecanes de las listas, sin embargo, están haciendo el tolili perjudicando los posibles beneficios de la gira mediática se ven dilapidados por sus candidatos en las redes sociales.
Es el caso de Rafael Simancas, quien ayer mismo metió la pata hasta el corvejón en la red social Twitter. Miles de ciudadanos y usuarios le señalaron como un incompetente, como un tiralevitas o como alguien que, con esas carencias intelectuales, no se entiende que haya estado viviendo del momio tanto tiempo. Ya comenzó José Félix Tezanos, por cierto, colega y amigo en las huestes del pensamiento inilustrado del PSOE, que las encuestas suyas eran las mejores porque no hacía brujería. Hoy, el niño bonito del guerrismo de entreguerras (cuando se pasó del felipismo al zapaterismo) ha ido a dar con la misma piedra contra la que chocan cada vez que hay elecciones.
Presentó el diputado por Madrid (¿saldrá en esta ocasión o estará rezando para que se retiren unos cuantos pues ponerse a trabajar con cierta edad es difícil?) una tabla donde creía demostrar que con el mismo porcentaje de votos (28%) la encuesta de GAD3 otorgaba menos escaños al PSOE. Los votos eran de las elecciones de 2019, donde el PSOE venció y estuvo por delante del PP en muchas circunscripciones, y la encuesta es para estas elecciones donde el PSOE es segundo en casi toda España. Cualquier politólogo, incluyendo a cualquiera que haya pasado por la Facultad y no se haya enterado de mucho, sabe, así, de primeras, que quedar primero o segundo es decisivo para obtener más o menos diputados. Sin mirar los datos ya hay algo que no cuadra en la argumentación de Simancas. Mejor explicarlo para los no conocedores del tema.
En las elecciones de 2019 el PP obtuvo el 20,8%, Vox el 15,1% y UP el 12,9%. El PSOE (28%), por tanto, era primero y sacaba bastantes puntos porcentuales. El segundo se veía “perjudicado” porque al tener pocos votos tenía que repartir con los demás partidos (recuérdese que Ciudadanos todavía sacó 10 diputados) en todas las circunscripciones de más de tres diputados. Si a estos se añaden las circunscripciones donde hay partidos regionalistas, es obvio que el PSOE sacaba la prima de ser el primero.
La encuesta de GAD3 otorga al PP un 36,6% de los votos y al PSOE un 28%, los mismos ocho puntos de distancia pero con el añadido de sobrepasar el 35%. Vox obtendría un 11,6% y Sumar un 12%. Esto deja las circunscripciones de más de tres diputados en una disputa entre dos o tres partidos. Puede suponer que el PP obtenga 3 y el PSOE 1 por esa diferencia de voto y el menor porcentaje de Vox y Sumar. En las anteriores elecciones el PSOE se llevaba 2, PP 1 y otro 1. Pero no sólo en esas circunscripciones sino que en las más grandes el PP se va a llevar la prima de ser el primero y el PSOE verá como el último o penúltimo lo pierde frente al PP o cualquiera de los otros partidos.
Simancas dice que es politólogo (y lo es, pero de Administración Pública) pero no recuerda a Arendt Lijphart, famosísimo politólogo neerlandés conocido por sus análisis de los sistemas electorales. Esto es básico para cualquiera que sea licenciado en esa carrera. Lo sabe hasta el que iba poco a clase. El primero siempre va a obtener más escaños y el segundo menos, incluso si tiene un porcentaje de votos similar en sistemas proporcionales. Lo que te permitió obtener más la otra vez, en esta ocasión te perjudica. De primero de Ciencias Políticas. Es básico. Es normal. No hay manipulación salvo en la mente de quien, en realidad, demuestra que no tiene ni idea de lo que habla.
Cabe recordar que en 2011, el PSOE de Alfredo Pérez Rubalcaba obtuvo un 28,7% de los votos y 110 escaños. Cuantos más participantes menos escaños para el segundo en el reparto de los restos. Cuanta más distancia entre primero y segundo, mayor probabilidad de que el primero acabe rebañando diputados en los restos al segundo. Sumando el hecho de que en GAD3 habrán hecho un reparto por provincias y ahí saben dónde el PP le quitará más o dónde menos. Cualquier politólogo, al menos de la especialidad de Ciencia Política o Análisis Político, sabe esto. También cualquier sociólogo electoral. Incluso cualquiera que le preste un poco de atención a los sistemas electorales. No hay manipulación de GAD3 (al menos no en estos datos) y sí un ridículo tremendo de Simancas que, pese a que él no lo crea, acaba perjudicando al PSOE. ¿Cómo votar a un partido que presenta a un tipo que no conoce ni algo básico de su propia profesión?