Comienza la campaña electoral como le gusta al PSOE de Andalucía, con los medios públicos a su servicio. Acostumbrados como está la ciudadanía andaluza a soportar, cada vez menos, Canal Sur, ayer se consumó el pacto Sánchez-Díaz y en el programa Los desayunos de La 1 se trabajó en favor de la candidata socialdemócrata. La entrevista, por cierto en estancia de la presidencia, a Susana Díaz fue blandita, con mucha vaselina y con cabida para la demagogia y el populismo de andar por casa que suele utilizar la presidenta. A Teresa Rodríguez, sin embargo, la han masacrado cuando ya no se podía defender. Y como era de esperar se ha quejado del trato recibido.
En su cuenta de Twitter, nada más terminar la entrevista o dúplex, ha querido dejar patente su enfado en lo que es toda una manipulación. “Decir que planteamos disparates justo después de salir del directo está un poco feo porque no me dejan responder. En Cádiz no gobernamos con el PSOE como ha dicho un tertuliano o es por la lejanía, por el desconocimiento o por las ganas de confundir” ha expresado con malestar la candidata de Adelante Andalucía. Y con razón porque no han hecho lo mismo con la presidenta. Pero no se ha quedado aquí la cosa, han declarado que el “Patio Andaluz” en el que han participado miles de personas conformando un programa construido desde abajo es no tener programa. Perdón, lo del patio no lo han dicho porque ni sabían qué es eso. “Preguntar solo si vamos a votar a Susana o no para luego decir que no tenemos políticas en el programa justo cuando me sacan del directo, también está un poco feo” ha exclamado Rodríguez.
Decir que planteamos disparates justo después de salir del directo está un poco feo porque no me dejan responder. En Cádiz no gobernamos con el PSOE como ha dicho un tertuliano o es por la lejanía, por el desconocimiento o por las ganas de confundir.@Desayunos_tve
— Teresa Rodríguez (@TeresaRodr_) October 9, 2018
“Y confundir el nombre de la propia candidatura Adelante Andalucía, que es algo perdonable porque somos nuev@s, vale, pero denota cierta falta de interés, lo que sumado a lo demás ha convertido esta entrevista en un intercambio algo desagradable. Seguro que tendremos mejores ocasiones” ha querido zanjar la candidata. Una forma afable de quejarse por estar en período electoral, pero que esconde algo que sufre la ciudadanía, la existencia de doxósofos y opinadores profesionales. Gentes que van de plató en plató y que opinan de todo sin saber de nada. Mira que no conocer el nombre de la confluencia o insistir en “Unidos Podemos”, cuando eso no ha existido en sí en Andalucía. Y todo ello porque se acudía a adorar a la presidenta de la Junta y a las derechas azul y naranja. En cuanto las encuestas han subido en favor de Adelante Andalucía ha llegado la manipulación hasta Madrid. Lo mismo ha ocurrido con Antonio Maíllo, a quien también han entrevistado, y al cual el presentador no sabía casi cómo presentarle porque eso de Adelante Andalucía le costaba.
Una carencia profesional que se observa en muchos platós de televisión y que desconocen la idiosincrasia andaluza y el porqué de querer hablar durante la campaña en andaluz. Algo que no quieren en el establishment pues pretenden, como ya venden en los medios de su factoría del poder, que las andaluzas sean una batalla previa a las generales. Por eso el desprecio del desconocimiento con Adelante Andalucía y sus dos portavoces. Pareciera que Andalucía, como se denuncia una y otra vez, fuese ese territorio de allí abajo que sirve para tener obra de mano barata (el ejército de reserva español), que sirve para vender folclorismo, pero que no se quiere modernizar del todo. Justo lo contrario que proponen en Adelante Andalucía que es una Andalucía fuerte, con sus peculiaridades y al nivel de otras regiones.
Hasta en la forma de realizar los dúplex (entrevistas) se nota la manipulación. Mientras que a Rodríguez y Maíllo los han entrevistado de pie y en plena calle, a Susana Díaz la han preguntado cómoda, sentada en un sillón (haciendo uso partidista de lo público). Se preguntarán ustedes que, salvo por la comodidad de estar sentada, dónde puede estar la manipulación. De pie tienes tendencia a moverte más y si piensas en estarte dentro de plano al final hablas incómodo. El cuerpo está más tensionado y tu perspectiva visual puede hacerte perder la cámara por algo que pase en la calle. Además, el ruido callejero impide escuchar por los cascos el sonido del estudio, lo que unido a los posibles ecos del retorno, perjudican la forma de expresarse. Díaz no sufre esos inconvenientes que no son baladíes. Normal que se queje Teresa Rodríguez. Bastante se ha contenido.
Post Scriptum. Si no se creen lo del establishment y la manipulación, pueden observar esta imagen de la carta de vídeos del propio programa tomada ayer por la noche y donde no se incluía los cortes de Maíllo o Rodríguez y sí los de Juan Manuel Moreno Bonilla (PP) y Juan Marín (Ciudadanos).