Verán, desde hace como quince años estoy vinculado al Partido Pirata. Esto es así porque cuando llevé la defensa de Padawan SL contra la SGAE y las otras entidades de gestión. Inicialmente sólo dos asociaciones (Internautas y Usuarios de Internet), cuatro juristas con dos dedos de frente y los «frikis» del teclado me apoyaron. Los demás, o se escondían o estaban a favor del poder constituido, que en ese momento era Tedy Bautista, presidente de SGAE y Enrique Cerezo, su homónimo de EGEDA.

Cuando esos ciudadanos con teclado se constituyeron como Partido en Catalunya, eso de la independencia quedaba lejos. Pirates.cat, siempre se movió entre las posturas federales y las confederales. Pero eso sí con una idea muy clara: La democracia se basa en el voto de todos los que vivimos en una zona determinada, y una vez votado, el resultado te compromete y debe respetarse.

En otro artículo publicado también en Diario16, expliqué que la estructura social de la sociedad catalana es absolutamente diferente de la española; la jerarquía política, pero sobretodo la jerarquía ideológica, no va de arriba a abajo, sino al revés.

Lo primero que debe entender el lector es que la decisión inicial de “volem votar”, se tomó desde la base social. Los políticos, fueron sobrepasados desde el minuto 1; sólo pudieron correr para ponerse delante de la manifestación. Y he dicho bien, “volem votar” no era exigir la independencia, sino decidir cuál era el sentimiento mayoritario. Así de simple.

Lo segundo es que digan lo que digan los que han retorcido el derecho y la realidad, la sociedad necesitó a los políticos para bien poco. Se auto organizó al margen de ellos. Y fruto de esa auto organzación, aparecieron las urnas y las papeletas en el día y momento indicados. Ni el CNI, ni la Guardia Civil, ni la Policía Nacional, ni todos los funcionarios y delatores, encontraron NI UNA. La conjura social fue absoluta y sin fisuras. Para pensárselo.

En ter