“El vertido de aguas ácidas con elevada concentración de metales procedentes de la corta de La Zarza provoca un daño sustancial en la calidad del agua del arroyo innominado, el Barranco Mojafre, el río Rivera del Olivargas y el rio Odiel hasta la altura de Gibraleón, en un recorrido total de alrededor de 50 Kms , y supone un riego grave para el equilibrio de los sistemas naturales, pudiendo suponer un riesgo para la salud de las personasdependiendo de los usos del agua superficiales y subterráneas”.
Esta es la principal conclusión a la que han llegado en un informe pericial complementario científicos y expertos del Instituto de Toxicología y Ciencias Forenses de Sevilla, después de analizar las pruebas aportadas por la Guardia Civil tras el vertido en la corta de la mina de La Zarza hace algo más de un año.
Este informe, que consta de 18 páginas, ha tenido entrada el pasado 17 de mayo en el Juzgado de Instrucción Nº 1 de Valverde del Camino (Huelva) donde se tramita una causa sobre este accidente, en el que aparecen denunciados las mercantiles Nueva Tharsis S.A.L. y Ormonde España S.A.
El 23 de marzo pasado fue formalizada una denuncia judicial a propósito del accidente medioambiental ocurrido en el término municipal de Calañas, Huelva.
Según la denuncia, presentada por la asociación Amayt y apoyada por activistas de la zona, “el pasado 18 de mayo se produjo un vertido de aguas ácidas de mina, con un color rojo intenso y un pH de 1,5, causado por la salida inusualmente violenta e incontrolada de un volumen entre 350.000 y 500.000 metros cúbicos, cargado de metales pesados propios de ese tipo de residuo minero”.
Según relatan en su denuncia, presentada ante la Guardia Civil de la Palma de Condado, la causa aparente de este vertido fue “consecuencia de la rotura de una válvula de retención situada en la Planta Tercera de la mina subterránea, en conexión directa con la antigua explotación a cielo abierto (Corta Minera) existente, ya colmatada en gran medida por aguas acidas de mina, y con conexión directa con el cauce fluvial del Arroyo Mojafre, conectado a su vez con la Ribera Olivergas, afluente directo del Rio Odiel”.
Dichos residuos líquidos han transitado “de forma rápida e incontrolada por el rio Odiel, en conexión directa con el Océano Atlántico, a través del estuario de Huelva en el que está ubicado el Paraje Natural Marismas del Odiel”.
Se afirma en la denuncia, firmada por el presidente de Amayt (Asociación Mediterránea Anticorrupción y por la Transparencia), el abogado Francisco José Sánchez Ramón y por el Dr. en Geología, investigador, científico y activista medioambiental José Manuel Cantó Romera, que el tránsito fluvial y marítimo de residuos líquidos, cargado de metales pesados y una gran acidez “ha contaminado gravemente a la cuenca del Odiel, al Paraje Natural Marismas del Odiel y al propio Atlántico, “siendo tan lamentable y grave acontecimiento- afirman- un atentado ambiental con consecuencias imprevisibles sobre el Medio Natural y contra la salud pública, que pueden ser constitutivos de ilícitos penales”.
De momento el informe sobre las aguas vertidas parece que viene a confirman esto último ya vaticinado en la denuncia.