La presidenta de la Junta, Susana Díaz, ha anunciado que «de manera urgente e inmediata» reunirá a sindicatos, al Consejo Andaluz de Participación de las Mujeres y a las convocantes de las movilizaciones de este 8 de marzo en Andalucía para acelerar las medidas a emprender en materia de igualdad. Para Díaz, es necesario que tras la «jornada histórica de ayer» se pase a los hechos con el objetivo de lograr «un país que merezca la pena vivirlo».
Durante la visita a la exposición fotográfica Periodistas. Femenino Plural, ha explicado que esta ronda de contactos permitirá analizar «cómo podemos de manera urgente seguir acelerando medidas» y canalizar otras que, pese a no ser de competencia autonómica, se puedan impulsar a nivel nacional. Entre estas últimas ha citado expresamente la necesidad de un pacto con iniciativas para acabar con la brecha salarial y la discriminación en materia de promoción profesional. Algo que, según fuente internas, ya están hablando con la Ejecutiva de Ferraz para avanzar en el tema.
La presidenta se ha mostrado emocionada con la respuesta unánime obtenida ayer por el 8M y ha insistido en que las manifestaciones repetidas por toda la geografía nacional no son el final sino el principio de un cambio. «Lo más importante es que quienes estamos al frente de una responsabilidad pública tomemos nota de que millones de personas salen a la calle y nos dicen con claridad qué país quieren, un país donde todos unidos trabajamos por la igualdad real, efectiva, igualdad salarial y ante la vida», ha abogado.
«Había quien no creía en este movimiento, que ha desbordado las previsiones de las que éramos más optimistas» y ha puesto sobre la mesa que «este país necesita repensar muchas cosas de manera urgente», ha insistido. Para Díaz, manifestaciones como las de ayer o las de principios de mes de los pensionistas, suponen un grito de la ciudadanía al Gobierno «porque no están dispuestos a que una vez que ha pasado la crisis económica, que ha sido brutal, las secuelas, las heridas y las cicatrices se sigan repartiendo por quienes peor están».
En la visita, también ha tenido un recuerdo para el Gobierno de M. Rajoy y sus negociaciones con las fuerzas sindicales. Así, ha querido recordar que la puesta en marcha de las 35 horas semanales laborales en la administración andaluza, que el Gobierno central denunció ante el Tribunal Constitucional y que ahora negocia con los funcionarios del Estado, es síntoma de la recuperación y ampliación de derechos, la cual debería que llegar a la sociedad. Además, ha pedido al ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, que se disculpe con los empleados públicos andaluces «por lo que les dijo y cómo se les ridiculizó», con una medida que había permitido reforzar hospitales, centros de salud y colegios, «que en ese momento no le gustaba porque la había puesto en marcha la Junta de Andalucía y ahora es él el que la negocia».