¡Por fin comienzan las vacaciones para muchos tragaldabas públicos! En el caso del Gobierno habrá que esperar un par de días, pero ya no les tendremos que aguantar (esperemos) hasta finales de agosto. Que se vayan los del gobierno y los de la oposición, los directores de medios de comunicación, los palmeros, los diputados y algunos aficionados del Atlético de Madrid. Les hace mucha falta descansar y pensar si lo que están haciendo se corresponde con una persona adulta, racional y en su sano juicio.
El primero que debe descansar es el presidente del Gobierno, Pedro “el corbatas” Sánchez. En su retiro, ya que se lo pagamos todos (como al resto de presidentes), puede reflexionar sobre la capacidad de los españoles. Analizar si somos tan idiotas como él piensa (y sus asesores le ratifican) o tenemos bastante más cabeza. Porque así se evitará hablar como si los españoles fuesen gilipollas y no tuviesen ni idea de lo que dice. No se han invertido tantos millones de euros a lo largo de los años para formar a varias generaciones de españoles y luego mirarlos como si fuesen estultos e incapaces. Que son muchos millones de universitarios que no tuvieron necesidad de irse a una privada para aprobar o sacarse un doctorado de aquella manera.
También que reflexione Yolanda “desbrozadora” Díaz. Como pasa con el presidente, debería analizar su forma de hablar a los españoles. No sólo es que los tome por gilipollas sino que, encima, les quiere convencer de que con abrazos se resuelven los problemas. Y mejor que todo lo que haya aprendido en su viaje a EEUU (en el del Vaticano ya sabemos que no aprendió nada) lo olvide cuanto antes. Si es que piensa en algo de izquierdas, claro. Si lo que quiere es colocarse en un lobby de Soros… Irene Montero e Ione Belarra si se van y no vuelven mejor porque están hundiendo el feminismo y la segunda no paga lo que debe a las Comunidades en dependencia.
Alberto “barcos de nieve” Núñez Feijóo lleva de vacaciones desde que le hicieron presidente del PP. Entre el rajoyismo inilustrado y su carencia de preparación para el nivel nacional (en Galicia con los medios comprados es más sencillo) tiene mucho trabajo. Así que nada de vacaciones y a trabajar, que igual con los medios lamiéndole el culo no basta. Y de paso que ponga a trabajar a la mayoría de diputados y dirigentes peperos que dan vergüenza ajena por preparación, mente infantil e incapacidad comunicativa. Otros que piensan que los españoles son gilipollas.
Por supuesto, todos los palmeros de todos los partidos (incluyendo diputados) que se vayan a descansar y dejen las redes sociales. No sólo es que den vergüenza, es que ya dan lástima por el nivel de peloteo. Ni una babosa se arrastra tanto. Los palmeros no se sabe bien por qué –algún tipo de sublimación inconsciente-, los diputados porque se les nota que no tienen dónde caerse muertos.
Los directores de medios de comunicación que descansen y reflexionen, pero mucho. No es que la prensa mundial esté en su mejor momento pero en España da mucho asco. Y no es sólo Eduardo Inda (que ese venía así de amarillo de serie, de cuando era “Eduardo el de los cafés”) es que son todos. Da igual el medio, ni uno es capaz de ofrecer noticias sin tirar para una posición ideológica y sin contar la noticia tal y como es. En los de derechas la mentira es lo habitual en muchas ocasiones, mientras lamen el culo “a los suyos” pese a que cometan barbaridades; en los de “izquierdas” se perpetra el continuado intento de colar toda la agenda globalista, mintiendo o haciendo de un caso algo general. Y lo peor es que hay gente que los cree sin pestañear, a unos y otros, que luego se las dan de independientes mentalmente.
También se podían ir de vacaciones, especialmente en redes sociales, todos esos aficionados del Atlético de Madrid que no les gusta el equipo, ni el entrenador, ni el estadio, ni el Atleti. Están muy pesados este verano. Evidentemente se puede discrepar futbolísticamente, pero es que ya cansan con tanta negatividad.
Y lo mejor de todo es que usted y yo vamos a poder descansar de todos los anteriormente citados. Casi un mes sin cansinos egocéntricos que creen tener la fórmula mágica para arreglar el mundo o el fútbol. Personas incapaces de dialogar con educación, con profundidad, con nobleza y altura de miras. En realidad sí dialogan cuando es para sacar beneficio privado con lo público. Descansar de toda esta gente es algo que sólo ocurre dos veces al año. Si la política fuese normal, pasaríamos la mayor parte del año tranquilamente y no aguantaríamos a José Manuel Soto. Pero entre falsas guerras culturales, falsos fascistas, falsos izquierdistas, falsos socialistas, falsos liberales, falsos católicos y falsos periodistas no dejan un momento de respiro. Si es que hasta en cosas musicales hay falsos conciertos sin músicos. Venga todos a descansar.