Fuente: PSOE

Otra cosa no, pero suerte tiene toda la que ustedes quieran. Hoy, mientras le insultan (deshonrando los símbolos patrios) en la celebración de la Fiesta Nacional, Pedro Sánchez estará tan pancho porque le ha venido a ver otra vez la Fortuna. Esa de la que hablaba Maquiavelo y que era necesaria a cualquier príncipe para triunfar. Un pétalo más de esa flor en el culo que tiene. No es una rosa porque esa la ha marchitado en pos de su persona, como bien contó en su momento el director de Diario 16+, José Antonio Gómez, será una rafflesia porque no se puede tener tanta suerte.

Llegó pro primera vez a la secretaria general del PSOE porque, pese a haber sido un groupie de los renovadores por la base de José Luis Balbás y niño bonito de José Blanco (lo más oscuro del PSOE), a la baronesa del sur le parecía mejor que Eduardo Madina. Cuando menos, le parecía que podría dejarle hueco para cuando ella, ¡hay que ser ingenua!, diese el paso de hacerse con todo el poder. Y mira por donde se puso a hacer lo que le daba la gana sin hacer caso a nadie salvo a la persona que veía todas las mañanas al mirarse en el espejo.

Una vez ahí, pese a salir por peteneras (