sábado, 23 agosto, 2025

Novedades literarias: pequeñas y medianas editoriales (16 mayo)

Les presentamos las novedades de las pequeñas y medianas editoriales. Como siempre, se hará un corta y pega de las notas de presentación de las obras tal y como llegan u ofrecen las editoriales sin ningún tipo de apreciación sobre ellas, salvo la elección de unos u otros títulos. La fecha que aparece entre paréntesis en algunos libros es la fecha de publicación.

Novela

Julieta Pinto, El despertar de Lázaro, Firmamento, 15€

La obra narrativa de Julieta Pinto, una de las autoras mayores de las letras hispanoamericanas, abunda libro a libro en la denuncia cívica de una sociedad en crisis. En ‘El despertar de Lázaro’, reescribe uno de los mitos fundadores de la cristiandad para brindarnos una historia memorable sobre el aniquilamiento del ser humano y el desgarro de la separación. Tomando como motivo la resurrección de Lázaro de Betania, Pinto nos sitúa ante la vertiente más humana del personaje bíblico, prescindiendo de consideraciones teológicas para hurgar con honestidad en su conciencia e iluminar así los intersticios que se solapan entre la vida y la muerte. Alternando pasado y presente en un relato dinámico que, no obstante, apenas si se desvía de los escritos bíblicos y que atrae desde el inicio la atención del lector, Lázaro, convertido en cronista involuntario de la persecución que Pilato ha orquestado contra Jesús, reprochará a su maestro que le haya resucitado y dará testimonio -un testimonio crítico y escéptico, construido en los márgenes- de sus últimos días antes de caer en el hondo vacío existencial en que le sume su inesperado regreso. Con sencilla elegancia y un lenguaje cargado de tensión poética, Pinto firma en ‘El despertar de Lázaro’, Premio Aquileo J. Echeverría 1994 (máximo galardón literario del país centroamericano otorgado a una obra), una de sus novelas más personales y conmovedoras, nunca hasta ahora aparecida en España. Con su publicación, Firmamento pretende rubricar la vigencia y el valor de una autora capaz de ahondar en los estratos más profundos de la psique humana.

Lev Tolstoi, La mañana de un terrateniente, Acantilado, 11€

El príncipe Nejliúdov está decidido a mejorar las vidas de los campesinos que trabajan las tierras de su familia. Convencido del éxito de su misión, el joven aristócrata desoye las voces de sus familiares que pretenden disuadirlo y, sin concluir sus estudios, regresa a la finca familiar para poner remedio a las dificultades de los campesinos. Este relato de trasfondo indudablemente autobiográfico publicado originalmente en 1856—en la misma época en que Tolstoi sentaba las bases de su singular concepción de las relaciones entre el campesinado y la aristocracia rural constituye un testimonio del empeño del escritor por contribuir a la renovación de la Rusia rural, entendida como un regreso a una vida más sencilla y fiel a los preceptos cristianos, y a un estado más bondadoso de la humanidad.

Blas Matamoro, Las tres carabelas, Blatt & Ríos, 16,90€

Dos novelas componen este volumen. La primera, ‘Las tres carabelas’, es una novela de formación. Desde el exilio en Madrid, el narrador rememora su infancia, adolescencia y juventud y todo lo que contienen y las excede: la amistad con el chico más guapo de la escuela; el primer amor y las primeras lecturas; la música; las discusiones filosóficas y políticas; las borracheras, el sexo, la ciudad. En ‘La canción del pobre Juan’, un prestigioso escritor argentino conoce en los entretelones de un programa de televisión a Daniel Dávila, joven estrella del ballet nacional. Desde esa noche, el destino de ambos quedará para siempre trágicamente enlazado. La experiencia de uno y el ingobernable talento del otro los llevarán a recorrer los bordes de la locura y de la memoria, que son, acaso, la misma melodía de dos canciones distintas.

Iván Ledesma, Negorith, El transbordador, 22€

Gris tiene una vida normal y corriente hasta que se ve envuelta en un incidente con un demonio que la lleva al borde de la muerte.

Con sus extraños poderes recién descubiertos entrará en un mundo secreto de guerras antiguas, entidades invisibles, ángeles y demonios, seres contenidos en frascos y puertas a otros universos.

Pronto comprenderá que nuestra realidad está comprometida por una amenaza que escapa a los límites de la razón.

Wilkie Collins, Armadale, Alba, 38€

Allan Armadale confiesa por escrito en su lecho de muerte un horrible secreto que solo debe conocer su hijo cuando cumpla la mayoría de edad. Veinte años después, este hijo se hace llamar Ozias Midwinter y, después de una vida atribulada y sin afecto, ha encontrado por fin un amigo en un joven impulsivo y cordial, amante del mar y libre de preocupaciones, que hereda una gran fortuna.

Chris Lloyd, Los olvidados, Principal de libros, 19,90€

París, 14 de junio de 1940. El detective de la policía francesa Eddie Giral, superviviente de la Primera Guerra Mundial, observa impotente cómo su mundo cambia para siempre. Pero aún hay algo sobre lo que sí tiene control: quiere encontrar al culpable de la muerte de cuatro refugiados.

Jacinta Cremades, Regreso a París, Duomo, 19,90€

El destino de tres mujeres, la oportunidad de volver a empezar.

Corre la década de los sesenta y Maite, una joven de la aristocracia barcelonesa, decide romper con las convenciones de la época y empieza una nueva vida en París. Huye de un pasado turbulento y de un destino que la persigue.

Años después, Teresa, su hija, regresa a París, su ciudad natal, acompañada de la pequeña Lucía, una niña de especial sensibilidad. Allí trata de poner palabras a los silencios y secretos de una familia que siempre permaneció en las sombras.

Regreso a París se adentra en los destinos entrelazados de tres mujeres de una misma familia, con un pasado común de hijas únicas, padres ausentes, huidas forzosas y búsqueda de la libertad.

Jacobo Bergareche, Los días perfectos, Libros del Asteroide, 18,95€

Luis, un periodista cansado de su trabajo y su matrimonio, planea asistir a un congreso en Austin, Texas. El viaje es una mera coartada para encontrarse brevemente con Camila, quien se ha convertido en el único aliciente en su vida. Pero cuando está a punto de partir, recibe un mensaje suyo: «Dejémoslo aquí, quedémonos el recuerdo». Desconsolado y sin saber qué hacer en Austin, se refugia en la biblioteca de la universidad, donde se topa casualmente con unas cartas de William Faulkner a su amante Meta Carpenter. La lectura de esta larga correspondencia lo ayuda a reconstruir el recuerdo de su aventura amorosa y a reflexionar sobre su situación matrimonial.

Con altas dosis de verdad y humor y una enorme fuerza narrativa, Jacobo Bergareche arrastra al lector en esta singular y cautivadora novela que explora de forma universal la fiebre del enamoramiento y la inevitable rutina de las relaciones de largo recorrido. Un libro cuya excepcional solidez y originalidad revela la madurez literaria del autor.

Ali Smith, Primavera, Traducción: Magdalena Palmer, Nórdica, 19,50€

¿Qué une a Katherine Mansfield, Charlie Chaplin, Shakespeare, Rilke, Beethoven, el Brexit, el presente, el pasado, el norte, el sur, el este, el oeste, un hombre de luto por tiempos perdidos, una mujer atrapada en los tiempos modernos?

Con la mirada puesta en la migración de la historia a lo largo del tiempo Ali Smith cuenta la historia imposible de una época imposible. En una época de muros y encierros, Smith abre la puerta.

La época en la que vivimos está cambiando la naturaleza. ¿Cambiará la naturaleza de la historia?

La esperanza es eterna.

Maria Judite de Carvalho, Tanta gente, Mariana, Traducción: Regina López, Errata Naturae, 18€

Escritora secreta de una gran literatura secreta —la portuguesa—, Maria Judite de Carvalho ha sido calificada de «fiebre lúcida» y de «flor discreta». Observadora experta de la vida cotidiana, que relata principalmente a través de la desesperación y la soledad femeninas, es autora de una de las obras literarias más complejas y estimulantes de la segunda mitad del siglo XX. La publicación de este libro en 1959 causó sensación. Los relatos que lo componen pertenecen a un país y a una época, pero los trascienden; su escritura es atemporal, magistral, y exhibe un sentido del humor sublime que narra el amor, el desamor, el deseo, la espera y la ruina sumergiéndose en las profundidades de sus protagonistas, personajes a la deriva en el día a día de la ciudad (de sus ciudades: Lisboa o París).

Rosa Arciniega, Vidas de celuloide, Espuela de plata, 21,90€

En Vidas de celuloide. La novela de Hollywood (1934), Rosa Arciniega, bajo su característica mirada crítica y base ideológica de atención a lo social, pone luz sobre las sombras que se ocultan detrás de la brillantez de los focos de los míticos estudios hollywoodienses, mostrando, a través del vibrante relato de la historia de Eric Freyer, el coste personal y vital que se cobra la fama. Eric Freyer es un artista alemán de music hall que había logrado montar un espectáculo de cierto éxito junto a la bailarina Henriette, alcanzando con ella, tras superar un sinfín de penalidades, la felicidad a nivel personal. Sin embargo, al recibir la invitación para una prueba en Hollywood, no podrá resistirse al sueño de triunfar en la meca del cine. La fama, y también la gran diva Olga D’anti, darán un vuelco a su vida sin ser capaz de vislumbrar hacia donde lo encaminarán sus actos. A través de diversos flashbacks, cambios de escenario entre Los Ángeles y Berlín, y con el estilo vanguardista tan personal de esta autora, que combina la acción, el diálogo ágil y la reflexión, se va desarrollando la trama sobre una enérgica base crítica hacia ese mundo efímero, impostado y de escaparate que es la meca del cine.

Pedro Lemebel, Tengo miedo torero, Las Afueras, 17,95€

En el Santiago fantasmal y urgente de los años ochenta, entre cargas policiales y concentraciones por los desaparecidos, un joven militante que participa en un atentado contra Augusto Pinochet vive una relación con la Loca del Frente, un homosexual que lo ayuda en su acción contra el dictador.

Valiéndose de una prosa brillante y colorida, entremezclando acontecimientos íntimos y colectivos, Pedro Lemebel reconstruye, envolviéndola en oropeles y lentejuelas, al ritmo de boleros y canciones pasadas de moda, la realidad amarga y sórdida de la dictadura, abriendo fisuras en la narrativa sobre el pasado reciente de su país.

Edogawa Rampo, Crímenes selectos, Traducción: Daniel Aguilar, Satori, 18€

Un comerciante que presume del realista maniquí sospechosamente humano que decora el escaparate de su tienda; la obsesión por suplantar a nuestro doble y convertirnos en «otro»; una joven y célebre escritora que recibe la inquietante carta de un perturbado y desconocido admirador; la aberrante pretensión de poseer al ser amado más allá de los límites de la muerte y de la cordura; el descubrimiento atroz de la maldad de una esposa idealizada e insaciablemente cruel; o la pulsión irresistible de imitar nuestro reflejo en el espejo aun a costa de nuestra propia vida… Mentes enfermas, obsesiones morbosas, deseos absurdos y crímenes perfectos: bienvenidos al mundo de Edogawa Rampo, en una nueva selección de relatos que han inspirado películas y mangas, convirtiendo a su autor en cumbre del universo perverso del ero-guro.

Fiona Valpy, El regalo de la modista, Traducción: Rosa Fragua, Libros de seda, 18,95€

París, 1940. Con la ciudad ocupada por los nazis, tres jóvenes costureras tratan de salir adelante lo mejor que pueden. Sin embargo, las tres ocultan secretos. Mireille lucha con la Resistencia; a Claire la ha seducido un oficial alemán; y Vivienne ni siquiera puede compartir con sus amigas lo que hace, porque eso la condenaría.

Dos generaciones después, la nieta inglesa de Claire, Harriet, llega a París. Desarraigada y a la deriva, desesperada por encontrar información sobre su pasado, se establece en el mismo edificio de la rue Cardinale, donde también trabaja, y descubre la verdad sobre su abuela, y sobre sí misma, lo que la llevará a desentrañar una historia familiar más oscura y dolorosa de lo que podía imaginar. En tiempos de guerra, ¿podrán sobrevivir sin acabar destrozadas?

Bonnie Jo Campbell, Madres, avisad a vuestras hijas, Dirty Works, 23,40€

Los relatos de este libro están poblados de madres e hijas que se aman, se honran y se traicionan. Novias afligidas, embarazos prematuros, esposas maltratadas y vengativas. Mujeres que aparcan sus sueños y su sensualidad para criar a sus hijos y alimentar a sus maridos, trabajando como mulas en empleos mal remunerados, sin quejarse ni manifestar sus anhelos más profundos, haciendo mil y un equilibrios, porque al fin y al cabo sus maridos andan metiéndose en silos inflamables y bajando a minas homicidas. Todo un crisol de vidas marcadas por el abuso, el maltrato, el abandono, la enfermedad y las metanfetaminas.

Dezsö Kosztolányi, Anna la dulce, Traducción: Judit Xantus, Xórdica, 21,95€

Publicada por primera vez en 1926 y recibida con entusiasmo por los intelectuales de los cafés literarios de la época, es un hábil retrato de la crueldad y el vacío de la vida burguesa. La novela fue reconocida por autores de la talla de Thomas Mann como modelo de lenguaje -elegante y preciso- y forma, y convirtió Dezsö Kosztolányi en uno de los escritores más significativos de la literatura de Europa del Este. La joven Anna es la heroína trabajadora y abnegada, la criada infeliz sometida por sus despiadados patronos. La trágica relación que mantiene con ellos se enmarca dentro del turbulento clima político de Budapest tras la Primera Guerra Mundial y donde, al mismo tiempo, su resistencia y su impactante acto final se describen con una acertada visión psicológica e histórica.

Ricardo Montesinos, Sabio idiota, Insólita editorial, 15,95€

Oldeburg se halla en plena Revolución Industrial. Los cambios de gobierno, las revueltas colectivistas y la amenaza de guerra entre la Compañía y el Imperio han sumido la ciudad en el caos y el miedo. Atrás queda su glorioso pasado académico y de progreso científico, que abrió las puertas a una era de maravillas mecánicas y de miseria.

August Meindl, «el asombroso Calculista Relámpago», se enfrenta a un problema matemático cuya resolución se resiste incluso a los más avanzados motores analíticos de la Compañía, y que podría decidir el resultado de la lucha por el control de la realidad. Adele Ascherlicht, una de las mentes más brillantes de Oldeburg y del Orbe entero, ha dedicado su vida entera a defender los ideales de su padre. Karl Ackermann, inspector de la Policía Metropolitana, solo pretende hacer cumplir la ley y mantenerse al margen de las luchas de poder que tensionan la ciudad.

Sabio idiota explora, a través de cuatro historias independientes, las consecuencias que tendrá para los ciudadanos de Oldeburg la invención de unas particulares máquinas calculadoras capaces de liberarlos del yugo de la Compañía o de esclavizarlos para siempre.

Adolfo Gilaberte, Coleman, Mármara ediciones, 17€

Coleman es la historia de un asesino a sueldo que, de un día para otro, se ve en la obligación de cuidar de su madre anciana, a la que hace muchos años que no ve y con quien nunca ha tenido una auténtica relación afectiva. Es una novela negra que no lo es, si sólo atendemos a los cánones clásicos del género. Porque nace del deseo de explorar los lazos familiares entre madre e hijo cuando apenas han existido lazos familiares y las heridas siguen abiertas o incluso hemos olvidado ya que llevamos dentro esas heridas. Y en cuyas vidas, además, hace tiempo que la redención no es posible. Así pues, en estas páginas, Coleman se verá inmerso en una trama de asesinatos, muerte y venganza en la que será al mismo tiempo cazador, presa, e hijo de nuevo.

Novela ilustrada

Alfonso Mateo-Sagasta y José María Gallego, Ladrones de tinta, Reino de Cordelia, 32,95€

Diez años después de que el impresor Francisco Robles editara El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, un tal Avellaneda saca una segunda parte sin pedir permiso a dios ni al diablo. Celoso de su negocio, Robles encarga a uno de sus empleados, Isidoro de Montemayor, que averigüe quién es ese tal Avellaneda para ajustarle las cuentas. Habitual parroquiano de tugurios de turbio pelaje, así como de cenobios literarios de abolengo, Montemayor no tarda en descubrir que Avellaneda no es más que un pseudónimo tras el que se oculta alguien que se siente ofendido por Cervantes, a quien tacha de cornudo y homosexual. Deberá para ello adentrarse en las páginas del Quijote y en la vida de su autor con el fin de conocer qué personaje se ha propuesto ensuciar su nombre y hasta enviarlo a la hoguera. José María Gallego pone ahora imágenes a este apasionante trhiller ambientado en el siglo de Oro, con el que Alfonso Mateo-Sagasta se consolidó como uno de los novelistas más brillantes y amenos de la literatura española.

Poesía

Adrienne Rich, Sumergirse en el naufragio, Traducción: Patricia Gonzalo, Sexto Piso, 20€

Sumergirse en el naufragio es el libro de poemas más celebrado de Adrienne Rich. Puede leerse como una respuesta a la tradición en que se inscriben La tierra baldía de T. S. Eliot o los Cantos de Ezra Pound. La poeta se sumerge en las profundidades de un océano de mitos para explorar los restos de un naufragio. Ese naufragio es nuestra civilización, toda su podredumbre y toda su belleza. Poco a poco se va desprendiendo de todas las historias que rodean al naufragio, hasta quedarse solo con lo esencial. También se despoja de su cuerpo de mujer, hasta quedarse con un cuerpo primigenio: un cuerpo andrógino, mitad sirena, mitad tritón. Y con él recorre los restos de lo que fuimos. Pero, sobre todo, rescata lo que aún queda intacto y que podrá ayudarnos a reconstruir una nueva civilización, donde la mujer sea un hombre y el hombre, una mujer. Un nuevo comienzo despojado de historias y de mitos, centrado en la presencia. Un comienzo no de igualdad, sino de identificación, de reconocimiento mutuo de nuestra fragilidad, de nuestra fortaleza, solos frente a la desnudez de nuestros cuerpos.

Teatro

Dario Fo, Muerte accidental de un anarquista, Pepitas de Calabaza, 15,20€

En mayo de 1920 un emigrante italiano llamado Salsedo sale «volando» por una ventana del edificio del FBI en Nueva York: este es el episodio que Dario Fo utiliza como pretexto para escribir Muerte accidental de un anarquista, una de sus obras de teatro de mayor éxito. La «muerte accidental» a la que alude irónicamente el título es en realidad la del anarquista Giuseppe Pinelli, que el 15 de diciembre de 1969 «cayó» desde la ventana del cuarto piso de la jefatura de Policía de Milán, tras ser sometido a un interrogatorio de varios días en relación a los célebres atentados de Piazza Fontana. Las circunstancias de la muerte, poco claras al inicio, posteriormente fueron atribuidas a un «brote» sufrido por Pinelli, y el caso se archivó. Estrenada el 10 de diciembre de 1970 en una antigua fábrica en Milán, la obra retrata a un «loco cuerdo» que casualmente se encuentra en la jefatura de Policía por impostor y que, con su capacidad de fabulación y lucidez en la tradición de los bufones de la corte o del fool de Shakespeare, acaba por desmontar el falso relato policial del suicidio.

Curiosidades

Todd Strasser, La ola, Blackie Books, 17,90€

En 1969, en un instituto de California, un profesor puso en marcha el experimento educativo más controvertido de la Historia: creó un movimiento entre sus alumnos, al que bautizó La Ola, para ilustrar el auge del nazismo en Alemania y los terribles acontecimientos que este trajo consigo. Creía tenerlo bajo control, pero se equivocaba. Las consecuencias de dicho experimento se recogen en este libro escalofriante.

Clarice Lispector, Todas las crónicas, Siruela, 34,95€

Las crónicas de Lispector para el «Jornal do Brasil» fueron escritas «a vuela pluma» entre 1967 y 1973. Este volumen, que incluye textos inéditos publicados en otros diarios y revistas, nos da por fin una panorámica completa. La Lispector que encontramos aquí es el ama de casa que se enfrenta a los problemas domésticos: el presupuesto familiar, la sopera que hay que devolver, la educación de los hijos.

Novedades: Ensayos, Historia y otras lecturas (16 mayo)

Les presentamos las novedades de ensayos, historia y otro tipo de lecturas (que pueden ser interesantes) que se publican en España. Se incluyen grandes, medianas y pequeñas editoriales. Como es usual, la presentación de las obras se hace mediante un corta y pega de las notas de presentación de las obras tal y como llegan u ofrecen las editoriales sin ningún tipo de apreciación sobre ellas, salvo la elección de unos u otros títulos.

Ensayos

Juan Carlos Pérez Jiménez, Ultrasaturados, Plaza y Valdés, 16€

Hoy más que nunca, «ser es ser visto» y nuestras pantallas nos han dado entrada a un grandioso baile de máscaras, una feria de las vanidades en la que perfiles y semblantes mejorados se rigen por los estatutos del avatar y el reinado del Photoshop. El héroe de la iconografía moderna tiene el aire autosuficiente y despectivo de los modelos que, aparentes poseedores de la divina belleza, se colocan por encima de los mortales para bastarse en la república independiente de su cuerpo. Pero la mirada permanente e inquisitiva del otro genera una masa de angustia que impregna la comunicación en las redes, ignorando que el océano del sujeto es mucho más profundo de lo que se aprecia navegando por ellas.

Prólogo de Iñaki Gabilondo.

Entregados a la cultura de las pantallas, no sospechábamos que la mayoría de nosotros querríamos alienarnos todo el tiempo posible, saltando de un dispositivo a otro, intentando no pisar tierra. Esta compulsión electrónica se manifiesta como una forma de habitar un limbo que nos extirpa del presente para transportarnos a ese no lugar donde todo es posible, pero nada es del todo real. Y le pedimos demasiado: que nos rescate de nuestra infelicidad a cambio de tener conexión de alta velocidad.

Ulrich Brand y Markus Wissen, Modo de vida imperial, Tinta y Limón, (PVP consultar librero)

Una palta en la mesa del desayuno, el combustible en el tanque del auto o la batería de la computadora parecen haber llegado al mundo para estar en el exacto lugar que les toca, indiferentes a la sequía de los campos chilenos, a la contaminación de la tierra o a la sobreexplotación del trabajo temporario. Del Norte al Sur global, para satisfacer las más ordinarias necesidades de un habitante cualquiera se pone en funcionamiento una intrincada maquinaria que articula mercados nacionales e internacionales, logística y legislaciones locales y fuerzas represivas en zonas remotas. El modo de vida imperial anuda el orden geopolítico a los hábitos más arraigados de la vida diaria y los expone en sus contradicciones. Desde una perspectiva crítica e internacionalista, Brand y Wissen relevan los tibios diagnósticos que las elites globales hacen de la crisis ecosocial en curso, cuestionan al capitalismo verde y ensayan una propuesta conceptual radical centrada en la transformación de las formas de acumulación y de los modos de vida.

Klaus Doods, Geopolítica, Antoni Bosch editor, 13,50€

Con un estilo accesible pero incisivo, describe desde los orígenes intelectuales de la geopolítica hasta el modo en que todos interaccionamos hoy con asuntos globales en nuestra vida diaria. Analiza temas como el reciente ascenso del populismo y del nacionalismo económico y dedica un espacio a las múltiples formas, en que países, personas y empresas gestionan en la actualidad los relatos políticos.

Antonio Aguilera, Paisajes benjaminianos, Subsuelo ediciones, 20€

En un pueblo de Girona aparece la falsa tumba de Benjamin, con su nombre y sin sus restos, al lado del impresionante monumento en Portbou, aparece como una alegoría inquietante que da una pista sobre cómo persona y obra han sido utilizados, y no precisamente para comprender su pensamiento. A. Aguilera, uno de los mayores expertos en la obra de W. Benjamin, actualiza la filosofía de este pensador.

William Deresiewicz, La muerte del artista, Traducción: Mercedes Vaquero, Capitán Swing, 22€

Una advertencia sobre cómo la economía digital amenaza la vida y el trabajo de los artistas: la música, la escritura y las artes visuales que sustentan nuestras almas y sociedades. Hay dos historias que escuchas sobre ganarse la vida como artista en la era digital. Una surge de Silicon Valley: «Nunca ha habido un mejor momento para ser artista. Si tienes una computadora portátil, tienes un estudio de grabación. Si tienes un iPhone, tienes una cámara de cine. Y si la producción es barata, la distribución es gratuita: se llama Internet. Todo el mundo es un artista; simplemente explote su creatividad y publique sus cosas». La otra proviene de los propios artistas: «Claro, puedes poner tus cosas ahí, pero ¿quién te va a pagar por ellas? No todo el mundo es un artista. Hacer arte requiere años de dedicación y eso requiere medios de apoyo. Si las cosas no cambian, mucho arte dejará de ser sostenible». Entonces, ¿qué relato es verdadero? ¿Cómo se las arreglan los artistas para ganarse la vida hoy en día? Deresiewicz, un destacado crítico de arte y de la cultura contemporánea, se propuso responder a esas preguntas. Sostiene que estamos en medio de una transformación de época. Si los artistas fueron artesanos en el Renacimiento, bohemios en el siglo XIX y profesionales en el XX, está surgiendo un nuevo paradigma en la era digital.

Arthur Lochmann, La vida sólida, Traducción: Cristina Cosmed, Catarata, 16€

“Somos cada vez más, a lo largo de nuestras vidas modernas, los que cambiamos de manera radical de trayectoria. Muy a menudo es para entrar en un oficio artesanal”. ¿Qué es lo que lleva a un estudiante de filosofía y derecho a formarse y trabajar como carpintero? Impulsado inicialmente por la búsqueda de un medio con el que ganarse la vida, Arthur Lochmann pronto descubrió en la carpintería de armar una ética del buen hacer que le permitió orientarse en una época frenética. Su aprendizaje y práctica, como el de otras artesanías y trabajos manuales, aportan un conjunto de experiencias, métodos y valores que interpelan a los desafíos individuales y colectivos de la modernidad. Supone la transmisión e interiorización, sostenida en el tiempo y en la repetición, de unos gestos, de una lengua particular, de una relación productiva con la materia –en este caso, la madera, con sus inagotables cualidades constructivas y aplicaciones arquitectónicas–, de unos métodos y unas exigencias, en los que conviven los saberes tradicionales con las técnicas más modernas. Esta es la indagación que emprende este original e inspirador ensayo, un relato de aprendizaje que combina los testimonios de su propia experiencia con reflexiones en clave ética y política, y que nos muestra qué nos puede aportar la cultura técnica y material de los oficios artesanales y saberes prácticos: una vida sólida con la que vincularse y orientarse en este mundo.

Arthur Lochmann estudió Filosofía y Derecho en la Universidad París I Panthéon-Sorbonne y se formó como carpintero en Francia, trabajando en distintas obras y talleres durante diez años. Es traductor literario de inglés y alemán. La vida sólida es su primer libro publicado, por el que ha recibido el Premio de la Academia Francesa Maurice Genevoix (2020).

Tobies Grimaltos y Sergi Rosell, Mentiras y engaños, Cátedra, 15€

La mentira es seguramente tan antigua como la humanidad. Como fenómeno social, parece que tiene una presencia ubicua. Una parte de este libro se ocupa de precisar el concepto mismo de mentira y sus vínculos con otros conceptos cercanos, como el engaño, la verdad y la falsedad, la sinceridad, la creencia y los diferentes actos de habla.

En el libro se abordan las cuestiones de si la mentira es siempre peor que otras formas de engaño y si es intrínsecamente mala o solo lo es si lo son su motivación y propósito.

Cierra el volumen un análisis del fenómeno del «bullshit», de su naturaleza, causas y consecuencias, en una época como la nuestra, que ha sido denominada «era de la posverdad», se impone la necesidad de un examen detenido de las distintas formas de usos engañosos del discurso, de sus diversas manifestaciones y de su influencia en la confiabilidad del testimonio, tan relevante para el conocimiento y la conducta humana.

Mariana Mazzucato, Misión economía, Taurus, 19,90€

Llegar a la Luna fue un extraordinario logro que requirió nuevas formas de colaboración entre los sectores público y privado, un altísimo nivel de compromiso y coordinación y la aceptación de riesgos y gastos muy elevados para alcanzar una meta a largo plazo. Inspirándose en las misiones del programa lunar, Mazzucato propone que se aplique ese mismo nivel de innovación a una serie de objetivos sociales, económicos y políticos clave con el fin de salir de nuestro estancamiento rumbo a un futuro más optimista.

El capitalismo lleva tiempo paralizado y no ofrece respuestas a nuestros mayores problemas, como las epidemias, la desigualdad y la crisis ambiental. Se impone la necesidad de repensar el papel de los Estados en la economía y la sociedad, de orientar los presupuestos al largo plazo y de recuperar el sentido del interés público.

Misión economía, cuyas ideas ya se están adoptando en todo el mundo, propone fijarse unos objetivos inspiradores e ilusionantes, entre los que se incluyen una prosperidad ampliamente compartida, unos servicios públicos de calidad para todos y una solución a la crisis climática. Según Mazzucato, los Estados pueden afrontar grandes desafíos y misiones ambiciosas, y su visión ofrece una salida a nuestro inmovilismo hacia un futuro más optimista.

Historia

Daisy Dunn, Bajo la sombra del Vesubio, Siruela, 23,95€

Un fascinante viaje al imperio romano del siglo I d. C. La historia de dos de las mentes más brillantes de la Antigüedad clásica. «La sutileza de su estructura consigue en todo momento animar lo que de otra manera podría parecernos remoto. El resultado es un magistral retrato de una época, tan vívido como los escalofríos que provocó en su día el despertar del volcán».

José Antonio Castellanos López (ed.), Facetas políticas, ideológicas y culturales de las crisis en España (1898-2008), Sílex, 24€

Este libro tiene como meta primordial el participar de nuevas aproximaciones al examen de las crisis como componentes esenciales del mecanismo de modernización del largo Siglo xx español, ese periodo de tiempo que discurre desde el desastre colonial que cerró el siglo xix, a la depresión que arranca pocos años después de inaugurado el xxi, extendiéndose hasta nuestros días. Considerar los temas y comportamientos de estos mecanismos históricos ayuda a revelar las problemáticas que se enlazan en las transformaciones y luchas que ha debido enfrentar España. Las aportaciones que forman esta obra componen una colección de sugerentes estudios que contribuirán a un mejor conocimiento de unos episodios que resultan de capital trascendencia en nuestro devenir social.

John Julius Norwich, El Mediterráneo, Ático de los libros, 23,90€

Esta historia del Mediterráneo nos guía por la riquísima y turbulenta historia de este mar y sus civilizaciones, desde los fenicios al Tratado de Versalles, pasando por la conquista árabe de Siria y el norte de África, el Sacro Imperio y las Cruzadas, los Reyes Católicos y la Santa Inquisición, los asedios de Rodas y Malta por Solimán el Magnífico, los piratas berberiscos y la batalla de Lepanto entre otras.

Gutmaro Gómez Bravo, Hombres sin nombre. La reconstrucción del socialismo en la clandestinidad (1939-1970), Cátedra, 16€

Esta es la historia de la clandestinidad socialista durante el franquismo. La historia de gente corriente que llevaba una doble vida, hombres y mujeres, asalariados, trabajadores manuales, maestras depuradas, que se jugaron la vida y siguen siendo hoy prácticamente desconocidos. Desde la cárcel consiguieron conectar con antiguos militantes y organizarse por gremios, ramas, sectores y barrios. Un modelo que, en algunas áreas montañosas, convivió con la guerrilla, y que subsistió a duras penas. En 1954, tras la muerte de Tomás Centeno en los calabozos de la DGS, sus ejecutivas pasaron a Francia, pero la actividad no desapareció del interior. Cambió de geografía y fue adaptándose a nuevos actores y formas de protesta, que pronto evidenciaron la tensión entre el exilio y el interior. Este libro trata de rescatar el rostro anónimo de las personas que llevaron a cabo esta reconstrucción, a través de la documentación que generaron e intercambiaron dentro y fuera de España, la mayor parte incautada por la policía, razón por la que esta historia se ha mantenido inédita hasta el momento.

Ricardo Miralles, Indalecio Prieto y el movimiento socialista, Tecnos, 22€

Indalecio Prieto Tuero (Oviedo, 1883-México, 1962) fue uno de los más importantes políticos socialistas de la llamada «segunda generación», la que sucedió al fundador del PSOE, Pablo Iglesias.

Prieto encarnó los valores del socialismo democrático como pocos socialistas españoles de la primera mitad del siglo XX. El suyo fue un proyecto político -de afirmación democrática, defensa del pluralismo y reforma social- íntimamente ligado a la idea de un régimen republicano. La reforma del Estado y la mejora social mediante el establecimiento de una verdadera democracia republicana: ese fue el objetivo político de Prieto a lo largo de su vida. Pero su etiqueta reformista no le impidió lanzarse a la revolución, en octubre de 1934, dejando maltrecho al Partido Socialista y a la República misma.

Prieto sustituyó insensatamente -lo dijo él mismo- la política reformista por la revolución de sentido socialista, reconociendo años más tarde su culpa y la del Partido Socialista, por haber abandonado y combatido a la República, por muy justificado que hubiera podido estar el temor a la CEDA. Si se hubieran «mantenido por medio del sufragio las anteriores posiciones políticas y parlamentarias» del Partido Socialista -proclamó ya en el exilio-, y si se hubiera hecho política, pleiteando parlamentariamente, no habrían nacido «los daños» de la guerra civil, ni los padecimientos del exilio.

Javier Jara Herrero, Las guerras médicas, Esfera de los libros, 22,90€

Javier Jara, uno de los historiadores más destacados del periodo, analiza en detalle desde una novedosa perspectiva —la de los nuevos estudios de la guerra— la contienda que legó episodios tan decisivos como la resistencia de los hoplitas del rey espartano Leónidas en las Termópilas o la batalla naval de Salamina, que afianzó el progreso del sistema democrático en Atenas y la evolución de la cultura clásica helénica.

Otras lecturas

Courtland Lewis, Futurama y la filosofía, Blackie Books, 14,90€

¿Afirmaría Rousseau que, a pesar de la adicción de Fry al Slurm o la de Bender a enchufarse, son sujetos libres? ¿Cuando Zoidberg se come la bandera de la Tierra y ofende a tantos extraterrestres está ejerciendo su legítimo derecho a la libertad de expresión? ¿Son los robots como Bender, Pinzas o Calculón tan responsables de sus actos como los humanos? ¿Es amor verdadero el que de repente siente Leela por Fry, cuando el cuerpo de este es invadido por lombrices que modifican su comportamiento? Cuando creó ‘Futurama’, Matt Groening solo pretendía satirizar las convenciones de la ciencia ficción. Pero sus aventuras siderales y metafísicas de humanos, robots, especies que existían antes del tiempo y lagartos humanoides nos brindan la posibilidad de entender nuestro mundo. Y otros mundos. Incluso el universo. La serie, como este libro, es una divertidísima invitación a debatir cuestiones filosóficas actuales y universales.

Giles Deleuze, Proust y los signos, Anagrama, 17,90€

En esta magistral indagación en las leyes estructurales de su obra, Deleuze demuestra de forma inapelable cómo la experiencia de la escritura de «En busca del tiempo perdido», además de movilizar lo involuntario y lo inconsciente, produce sus propios procedimientos de sentido. Así, Proust logra una maquinaria que funciona con eficacia invisible, capturando al lector.

Donald Mitchell, El lenguaje de la música moderna, Acantilado, 18€

En este extraordinario ensayo publicado originalmente en 1963, Donald Mitchell examina con gran perspicacia y sensibilidad los valores filosóficos y estéticos que determinaron el lenguaje de la música del siglo XX. Para ello se centra en las figuras de Schoenberg y Stravinski, representantes de dos estilos genuinamente modernos y de una nueva sensibilidad.

Lloyd Jones, El libro de la fama, Gallonero, 18€

Lloyd Jones narra con un estilo medido y conmovedor, entre las notas de viaje y la poesía, entre la épica y la historia cotidiana, la mítica gira que dio a conocer al mundo entero un deporte y un equipo inigualable: los chicos vestidos de negro, que entusiasmaban a las multitudes con su juego y con su misteriosa danza maorí, cosecharon en esta gira ochocientos treinta puntos y solo concedieron treinta y nueve en contra.

Victoria Cirlot, Ariadna abandonada, Alpha Decay, 23,90€

El mito clásico de la princesa cretense abandonada por Teseo en la playa de Naxos aparece trabajado en los cuadernos preparatorios de Así habló Zaratustra y también en la obra publicada. En el ditirambo de Dioniso «El lamento de Ariadna», Nietzsche realiza la mayor transformación del mito para introducir nuevos significados. El tema del abandono cruza todo este libro en el que se busca establecer conexiones diversas entre textos e imágenes con la intención de contribuir a una lectura renovada de la obra de Nietzsche.

Jacques Derrida, Fueros. La melancolía de Abraham, Katz, 17€

La deconstrucción es un pensamiento que nunca está solo, sino siempre en diálogo y en discusión; y uno de los principales “otros” de estos dos textos –presentados aquí por primera vez en español– es el psicoanálisis. La cuestión de la incorporación, que Fueros retoma de los psicoanalistas Nicolas Abraham y Maria Torok, aparece como una tesis central para pensar problemas cruciales como la producción de la experiencia, la configuración del sí mismo y la relación con los otros. Estos se entrecruzan con otras preguntas trasversales al pensamiento derridiano, relacionadas con la justicia, el derecho, la lengua, la muerte, el espectro, el secreto, el nombre propio, la firma.

Pensar deconstructivamente y a fondo la incorporación, como lo hace este volumen, tal vez permita pensar nuevas lógicas, incluso nuevas ontologías de la relación en general y, con ello, otras formas, también, de la comunidad y de la política.

Miguel Álvarez-Fernández, La radio ante el micrófono, Consonni, 18,90€

Estas páginas trazan una peculiar historia de la radio. Un relato que discurre paralelo a la evolución de la sociedad de masas —es decir, la nuestra—. Mediante el análisis de una serie de obras artísticas creadas expresamente para el medio radiofónico, Miguel Álvarez-Fernández plantea como hipótesis el parentesco entre esa temprana tecnología global y ciertos elementos discursivos propios del fascismo. Los mecanismos de seducción con los que la radio nos continúa atrapando, el erotismo propio de sus voces acusmáticas, el halo de nostalgia que siempre ha acompañado sus transmisiones… Todo ello configura un tipo especial de relación con el oyente que aquí se denomina intimidad radiofónica, y cuyo estudio se canaliza a través de una metáfora: la palpitante membrana del micrófono.

Richard Shepherd, Causa de la muerte, Traducción: Ana Camallonga, Península, 21,90€

Unas memorias que nos sumergen de lleno en el insólito mundo de la medicina forense.

El subgénero de la literatura médica tiene en su haber una larga lista de autores que han sabido abordar con pulso narrativo y sentido del humor la dualidad entre la rutina del día a día y la tensión de trabajar con pacientes cuya vida pende de un hilo. Aunque Causa de la muerte tiene paralelismos evidentes con las obras de Samuel Shem, Oliver Sacks o Henry Marsh, aquí el protagonista, el forense Richard Shepherd, nada puede hacer por salvar la vida de quienes yacen ante él.

Precedido de un gran éxito en Reino Unido, este libro nos adentra en los misterios de algunos de los casos más fascinantes que Shepherd ha investigado a lo largo de su carrera profesional. Desde la repentina muerte de bebés falsamente atribuida a sus madres hasta atentados como el del 11S, pasando por asesinos en serie, masacres o la cuestionada investigación de la muerte de Lady Di.

Con agudeza e inteligencia, Causa de la muerte cuenta la historia, no sólo de los casos y cuerpos que más han perseguido al autor a lo largo de su carrera, sino también de cómo vivir una vida plena con la muerte siempre de frente.

Roland Barthes, El discurso amoroso, Traducción: Alicia Martorell, Paidós, 42€

El discurso amoroso, un texto apasionante y una de las obras indispensables de Roland Barthes, reúne los documentos preparatorios e inéditos de su conocidísimo Fragmentos de un discurso amoroso.

Cuando Barthes emprendió este proyecto el amor no estaba de moda, lo amoroso resultaba vergonzoso y el discurso sobre ello estaba condenado, si no al silencio, sí al murmullo. Barthes quiso recuperar aquello de lo que no se podía hablar; y el éxito espectacular que obtuvieron sus Fragmentos constituyó uno de sus logros magistrales.

El discurso amoroso se elaboró en el transcurso del Seminario que Barthes impartió durante dos años en la École des hautes études en sciences sociales, de París. Estos textos son las notas preparatorias redactadas por Barthes para dar sus clases e incorporan los pasajes suprimidos (e inéditos hasta ahora) de los Fragmentos.

Esta obra es el fruto de una intensa investigación y de un cuidado proceso de escritura, pacientemente destilado. Su combinación de teoría y dolorosa experiencia del amor conmueve por su sinceridad y brillantez.

Novedades Literarias: grandes editoriales (15 mayo)

Les ofrecemos las novedades literarias (novelas, poesía, teatro, curiosidades) de las grandes compañías del sector. Como es habitual, se hace un corta y pega de las notas de presentación de las obras tal y como llegan u ofrecen las editoriales sin ningún tipo de apreciación sobre ellas, salvo la elección de unos u otros títulos.

Novela

Men Marías, La última paloma, Planeta, 20,90€

Frente a la base naval de Rota, tras el cordón policial que acordona la brutal escena, un grupo de vecinos clama que se haga justicia: el cuerpo de la joven Diana Buffet yace salvajemente mutilado y con unas enormes alas cosidas a su espalda.

Ni las cámaras ni el helicóptero de vigilancia de la base han captado una sola imagen que pueda servir a la investigación; algo incomprensible.

La sargento Patria Santiago sabe que el asesino va a volver a matar, pero nadie la cree, ni siquiera el cabo Sacha Santos -a quien le gustaría ser algo más que su compañero-, porque al igual que piensa el resto de Rota, Patria ha convivido con el dolor demasiado tiempo como para ser de fiar.

Una sola pista, la investigación que Diana estaba haciendo sobre la base, y su relación con la desaparición de una joven hace sesenta años, cuando los americanos llegaron a Rota, parecen ser los únicos hilos de los que tirar.

J. Á. González Sainz, La vida pequeña, Anagrama, 17,90€

Tras un cataclismo de colosales dimensiones provocado por algo minúsculo que lo contagia todo, una voz reflexiona, urde, recuerda o recita, tal reza. Percibe que, bajo la crisis mundial desatada por la pandemia, se esconde en el fondo otra enfermedad epidémica más local pero de análogas dimensiones, o quizá hasta de mayor gravedad: la de nuestros modos de vida, la de nuestra relación con la realidad y con las palabras. La voz, un puro ejercicio de razón, va desgranando temas y variaciones en una melodía moral que a veces se modula narrativamente y otras como un monólogo teatral o una indagación poética o filosófica, y donde todos los registros, desde el más grave hasta el humorístico, se van trenzando en una suerte de arte de la fuga conceptual y musical a la par.

Bajo el título genérico de La vida pequeña, J. Á. González Sainz emprende una suerte de dietario, de cuaderno de bitácora, compuesto por breves textos íntimos en busca de un nuevo modo de mirar y vivir. Es como una caja de píldoras meditativas, o un collar de cuentas que se pueden leer hiladas desde el principio o incluso sueltas, al azar. El proyecto está planteado como una trilogía: El arte de la fuga es la primera entrega, a la que seguirán El arte del lugar y El arte del instante.

Este es un libro contra la aceleración, contra la pérdida de realidad y la banalidad, contra la desatención y la mentira y contra las muchedumbres. Frente a las colosales dimensiones de todo ello en nuestras vidas, «la vida pequeña que no sé si propongo o me propongo o más bien busco o imagino o qué sé yo qué», dice el texto, «guarda relación con una nueva heroicidad que tal vez podría llamarse alegría, la heroicidad de gustar alegrías más altas». Aún faltan esos héroes, escribió Hölderlin, de cuya mano (igual que de la de Machado, Montaigne y Handke, Séneca o Camus o Rilke, con quien a Stefan Zweig le encantaba pasear porque reparaba en cualquier pequeñez), el autor, o más bien «el atento, el aproximado», emprende su denodada búsqueda literaria y filosófica. Otros muchos autores le acompañan, por ejemplo Thoreau o Stevenson, de quien una cita sirve de pórtico y declaración de intenciones: «Tenemos tanta prisa por hacer, por escribir, por adquirir velocidad, por hacer nuestra voz audible un momento en el desdeñoso silencio de la eternidad, que nos olvidamos de una cosa, de la que esas otras solo forman parte, es decir, de vivir.»

Pablo Rivero, Las niñas que soñaban con ser vistas, Suma, 19,90€

Laura García Hernández, una niña de catorce años, ha desaparecido. La última vez que se la vio fue entrando en un conocido centro comercial, cuando acudía a una misteriosa cita. A los pocos días aparece descuartizada en el aparcamiento de la planta baja. El cuerpo presenta mordeduras de animal, pero su hermano Jaime insiste en que fueron causadas por un ser humano. Todo se complica cuando Pablo, un publicista que trabaja en la agencia más prestigiosa del país, sospecha que el asesinato puede estar relacionado con la muerte de algunas famosas influencers.

Pablo Rivero vuelve con su historia más terrorífica. Las niñas que soñaban con ser vistas nos adentra en el mundo de la publicidad y los peligros de la sobreexposición en las redes sociales cuando se unen la perversión moral y las ganas de ser visto. Con una trama bien estructurada, inquietante y escabrosa, te seducirá por sus personajes enigmáticos, sus giros sorprendentes y su impactante final.

Paloma Sánchez-Garnica, El alma de las piedras, Planeta, 21,50€

Corre el año 824 d. C. El ermitaño Paio, el obispo Teodomiro y su ayudante Martín de Bilibio hallan una tumba cuyos restos, aseguran, pertenecen a Santiago Apóstol. Crean así, cerca de la tierra del fin del mundo, el Lugar Santo Jacobeo para atraer a la cristiandad. Dos siglos después, una joven noble, Mabilia, junto con el cantero Arno comienzan la búsqueda de La Inventio, en donde se relata la verdad del «milagroso» hallazgo y cuyo paradero se encuentra oculto tras unas marcas talladas en la piedra.

El alma de las piedras es una intensa aventura con grandes dosis de acción en un mundo medieval plagado de misterios y peligros que cautivará a los lectores más curiosos e inquietos.

Marta Sanz, Parte de mí, Anagrama, 17,90€

El lector tiene en sus manos el diario de una escritora durante el primer año de la pandemia. Un diario peculiar, ya que lo escribió en sucesivas entradas de Instagram, bajo el hashtag #ParteDeMí. La primera entrada es del 17 de abril, un mes después de que se decretase el confinamiento, y la última, del 31 de diciembre. En cada entrada, una imagen: en la primera aparece la caja de los hilos de la abuela, una caja que forma «parte de mí», como el resto de las cosas que irán surgiendo. Así, se suceden la gata, los libros de la biblioteca, viejas fotografías familiares; imágenes del padre y sus pinturas; la sobrina enfermera; la dama que se esconde al otro lado de ciertas instantáneas; la escalera que se abre al mundo exterior y el sol en el balconcillo durante el encierro; un plato de macarrones; la portada de una novela de Agatha Christie en una antigua edición de Molino; las fotos de la bisabuela, de la abuela roja, del día de la boda; postales de Cyd Charisse, Vivien Leigh y Catherine Deneuve… La casa y sus rincones se transforman en aventura y objeto de investigación: el cuerpo, extraño y vulnerable, habita un espacio extrañado dentro de una realidad extraña. Los patos pasean a sus anchas por las calles de Madrid y se escucha el silencio previo al tsunami. Más adelante, imágenes de la recuperación de la «nueva normalidad»: un desplazamiento en tren para acudir a un compromiso profesional; la presentación de un libro en una de las librerías que luchan por sobrevivir a la crisis; la participación en una manifestación por la sanidad pública…

Y cada imagen va acompañada de un texto. Al principio son breves, casi fugaces, y progresivamente van ganando volumen y dando entrada a la reflexión. La escritora va apropiándose irónicamente del medio mientras el medio la vampiriza. Glotona, adicta y caníbal, presenta cultura y vida, fuera y dentro, como alimentos y hormonas que activan su metabolismo. Escritura cuerpo. El paso tímido, cauto, de las palabras se atreve con la carrera vertiginosa. El hilo del costurero de la abuela se tiende hacia el encuentro con los demás para salvar la incertidumbre.

Parte de mí constituye, además, una original campaña publicitaria: pequeñas mujeres rojas, la última novela de Marta Sanz, salió a la venta diez días antes del confinamiento y sufrió su hechizo. Este volumen es la expresión del miedo de una escritora. Del trabajo, la imaginación y la voluntad que pone para que las amapolas de una portada no se marchiten. Es la búsqueda, cómica y desesperada, del aire y del hilo para salir del laberinto. De la felicidad irrenunciable incluso en tiempos de peste. Este es un texto hecho de retazos de vida, objetos, personas, recuerdos, sensaciones, instantes. Es el diario de la cotidianeidad que siguió fluyendo cuando en nuestras vidas se instaló lo extraordinario. Este testimonio, íntimo y común, de un año imprevisible demuestra el talento de Marta Sanz para crear una pequeña joya literaria a partir de lo aparentemente nimio.

Edoardo Albinati, Un adulterio, Lumen, 16,90€

Tras un flechazo virtual, Erri y Clementina huyen de sus respectivas y tediosas vidas de casados para pasar un fin de semana juntos en una isla. Corren un riesgo enorme, pero la pasión que los mueve es incontrolable, y la felicidad que parece estar al alcance de la mano, irrenunciable. Un adulterio nos deja entrever la historia completa de esta aventura fugaz en este extraordinario estudio del deseo.

Un relato vibrante, sensual y brutalmente sincero que, construido sobre una mentira, nos interpela a todos: quienes han vivido una relación clandestina, quienes la han rechazado y quienes la han anhelado en lo más íntimo.

Susana Martín Gijón, Progenie, Alfaguara, 19,90€

Sevilla, ola de calor. Todo el que puede huye a la playa. No así Camino Vargas, jefa accidental del Grupo de Homicidios desde el tiroteo que dejó en coma al inspector Arenas. Alguien ha atropellado salvajemente a una mujer y se ha dado a la fuga. Este asesinato se va a transformar en el foco de atención mediática cuando se filtre un dato aún más perturbador: el homicida introdujo un chupete en la boca de la víctima antes de desaparecer de la escena del crimen. Todos los indicios apuntan a la expareja, un maltratador psicológico, y las estadísticas no están de su lado. Sin embargo, cuando la autopsia desvele que la víctima estaba embarazada y los asesinatos comiencen a sucederse, Camino comprenderá que se halla ante el caso más duro de su carrera.

Ilaria Tuti, La virgen negra, Alfaguara, 20,90€

La comisaria Teresa Battaglia duda si seguir ocultando a su equipo la enfermedad que se ceba con su memoria, cuando recibe una llamada desde una galería de arte: ha sido hallado un retrato de enorme valor atribuido a un pintor de culto, Alessio Andrian, cuya undécima y última obra se creía perdida. El cuadro, sin embargo, posee un detalle que ensombrece el descubrimiento: la pintura roja que dibuja el rostro de una joven es en realidad sangre humana y, según el análisis cromático, el pincel del artista se empapó en un corazón que aún latía. Teresa y su equipo tienen que averiguar qué sucedió en 1945, año en que se pintó el cuadro, cuando el autor se encontraba escondido en los bosques cercanos a la frontera entre Italia y Yugoslavia huyendo de los nazis. Battaglia, con una salud cada día más frágil, debe confiar en la ayuda de su colaborador Massimo Marini, pero pronto se dará cuenta de que ella no es la única que oculta un secreto inconfesable.

Novela gráfica

Alberto Montt, Sólo necesito un gato, Temas de hoy, 15,90€

Todos sabemos que los gatos dominan a la raza humana. El dibujante Alberto Montt te explica cómo.

Estrella chilena del dibujo y la viñeta, Alberto Montt sufre de gatofilia aguda: lleva décadas enfermamente fascinado por este animal. De hecho, fue lo primero que dibujó cuando era niño. Por eso ha decidido (ahora que dibuja un poco mejor) dedicarles este libro, especialmente pensado para aquellos que sufren su misma dolencia. Aunque también puede servirte si quien la sufre es alguien cercano.

De paso, Alberto usa estas páginas para contar la historia ultrasecreta de la invasión de la Tierra por parte de los gatos y nos revela los trucos que usan para dominar a la especie humana y obligarla a comprar libros de humor sobre ellos. En grandes cantidades.

Poesía

María Leach, La vida rima, Espasa, 12,90€

La vida rima nos lleva de la mano por un recorrido de vivencias con las que todos nos sentiremos identificados: los poemas surgen de la reflexión sobre los hechos cotidianos de la vida, la maternidad, la relación con un hijo, la vuelta a las emociones a través de la seducción y el enamoramiento, la madurez que lleva a reconocerse a sí misma.

Sebastián Taberna, Causa errante, Pre-Textos, 13€

Luz de la mañana del sábado,

ten piedad, no te vayas,

quédate con nosotros.

Entra en nuestro sueño,

danos tu calor,

y aleja aquellas nubes

ahora que la vida acaba de empezar.

Luz de la mañana del sábado,

ruega por nosotros.

«Plegaria»

Sebastián Taberna (Pamplona, 1971). Periodista y editor. Sus relatos y poemas están publicados en diferentes medios y revistas.

Curiosidades

Félix J. Palma, Escribir es de locos, Destino, 18,90€

Como un mago que regresa al camerino tras su actuación y empieza a sacarse los artilugios escondidos de los bolsillos, Félix J. Palma nos revela en este manual de escritura sus trucos de magia.

A medio camino entre un diario de escritor y un manual de escritura, Escribir es de locos introduce al lector en el arte de escribir ficción. Durante los más de diez años en los que ha trabajado como profesor de escritura, Félix J. Palma ha comprobado que los manuales al uso o los libros demasiado técnicos no ayudan a los escritores noveles, ya que el exceso de teoría los bloquea o intimida, al presentar el oficio de escritor como algo demasiado complejo e inalcanzable.

Con este libro, Félix J. Palma pretende convertir la escritura en un juego al que todos podamos jugar, desacralizando el acto de escribir y la propia figura del escritor, y nos da las claves para comprender el proceso creativo de cualquier autor. A través de numerosos ejemplos de novelas, series y películas de autores clásicos y contemporáneos, este libro nos desvela cómo un oriundo de un pequeño pueblo andaluz logró ser bestseller de The New York Times.

¿Piensa ganar Espadas cobrando peaje en autopistas a los andaluces?

Las mentes preclaras que habitan en Moncloa parecen no conocer la historia. A lo largo del tiempo ha habido gobiernos que han caído por medidas que parecían estúpidas a sus ojos pero que eran consideradas por el pueblo como una verdadera afrenta. Cobrar peaje por el uso de autovías y autopistas con la excusa del mantenimiento de las mismas (por cierto, no saben ni qué cuestan mantenerlas a la vista de las cifras que aportan cada día) podría ser esa típica política que sin quererlo hace caer un gobierno. Por muy buenos datos económicos y todo lo que quieran, al final una cuestión que se podrían ahorrar en realidad –si hiciesen unos presupuestos más racionalizados, seguro que encuentran el dinero- acabará con el gobierno.

De momento la reacción es latente, la gente está acumulando mala leche en dosis industriales, pero que estén seguro en Moncloa que las manifestaciones será cruentas. Entre otras cosas porque en la España periférica no hay forma de moverse y vivir sin ese tipo de carreteras que buenamente han construido poco a poco. Aumentar en 150 euros los costes de ir a trabajar para personas que igual ganan mil o mil y poco euros no es de izquierdas. Por eso Susana Díaz, que es muy cuca para estas cosas, dijo el otro día que de peajes nada. Como si le preguntan a Ximo Puig, a Emiliano García-Page o a cualquier otro presidente autonómico. Construyendo buenas autovías se dejaron y eliminaron en muchas ocasiones las redes secundarias que tantas vidas habían segado. Por lo que la alternativa de no pago es inexistente. Eso lo conocen bien los que están a pie de obra en la gestión del día a día. Y el ministro José Luis Ábalos, por muchos informes que saque del pasado en referencia a posiciones del PP, debería ser consciente que desde la derecha y la izquierda se la van a montar. Y con razón.

Si en una visión general el tema de los peajes se sabe que va a provocar una fuerte reacción –se verá cortar carreteras con seguridad-, cuando alguien está en mitad de unas primarias que, además, van a servir para potenciar la imagen propia a nivel andaluz para disputar a Bonilla la presidencia de la Junta ¿a qué viene posicionarse tan rotundamente en favor del cobro del peaje en autopistas y autovías? En Andalucía, ese tipo de vías son fundamentales para moverse dentro de las provincias y entre provincias. Hay muchísimos puestos de trabajo que dependen del movimiento entre provincias por este tipo de carreteras –y no son sólo transportistas-, a lo que hay que sumar la propia rapidez de los desplazamientos por decisión propia –sean sevillanos hacia la playa, sean cordobeses o granadinos- evitando aquellas infernales carreteras.

Juan Espadas se presenta para candidato del PSOE no para Vox o para Ciudadanos y por tanto se debe a la clase trabajadora, a las clases populares, o lo que es lo mismo a las clases que se verían perjudicadas en mayor medida con la implantación de los peajes. Espadas se presenta no para gobernar Sevilla sino para intentar gobernar una amplia región donde las autovías han sido infraestructuras fundamentales para que esa España periférica no languidezca más. Imagine Jaén sin buenas carreteras. O Córdoba. O la sierra granadina. O Almería… Esa visión centralista andaluza, o visión sevillana, seguramente le impida ver que Andalucía es mucho más que la calle Sierpes y las capillitas y por eso comete un error flagrante. Si ya comienza con tan poca valentía…

Bonilla tiene fácil argumento en su contra a la hora de disputarle la presidencia. Con salir en Canal Sur diciendo que Espadas es el señor que va sacar los euros de los bolsillos de los andaluces que utilizan las carreteras para ir a trabajar, ya tiene hecha la campaña electoral. “Con Bonilla ahorras calderilla” sería un eslogan que dejaría al PSOE andaluz en peores condiciones que el de Madrid. Está bien que el alcalde sevillano quiera congratularse con el aparato de Ferraz –ese mismo que dice que no le apoya-, pero pisar a las clase populares de la forma en la que lo está haciendo con los peajes igual no es el camino. Porque puede vencer a Díaz en las primarias internas, debido a circunstancias propias del partido, pero si piensa ir por la vida defendiendo causas perdidas y contrarias a cualquier lógica socialdemócrata, al cualquier sentido de la equidad, hasta le quitará diputados Teresa Rodríguez. Quien le esté asesorando que lo piense mejor si es que quiere hacerle presidente de la Junta, porque de momento mal va. Eso sí, Florentino Pérez le invitará a palco del Bernabéu por defender sus intereses de esa forma tan radical.

Casado, el “niño Pandemias” al que buscan sustituto

Pablo Casado es muy de lindes y de modas. Esto es cuando elige una moda la sigue y la sigue hasta que se acaba la linde pero que él. Sí, como un tonto. Ahora le ha dado por querer que el gobierno proponga legislar sobre cuestiones que son inconstitucionales. Tanto defender el constitucionalismo y resulta que desconoce la jerarquía de las leyes. El “niño Pandemias”, como se le comienza a conocer en las redes sociales, quiere establecer por ley que se vulneren derechos fundamentales de los ciudadanos sin que concurra sentencia judicial. Porque es evidente que a un asesino se le puede privar de libertad si es condenado, pero a un Perico el de los palotes no.

Esto que entiende cualquiera sin haber estudiado derecho no entra dentro de las cosas comprensibles en el cerebro del presidente del PP. Se puede crear una ley de pandemias pero los derechos fundamentales no se pueden vulnerar salvo por sentencia judicial o mediante un riguroso estado de excepción. Que en estas cosas ya se sabe que una ley de pandemias puede acabar siendo utilizada por cualquier boñigas para impedir protestas sindicales u otros colectivos sociales. Si se quiere realizar algún tipo de limitación de derechos fundamentales que las comunidades autónomas pasen por el trago de actuar y de solicitar a jueces esa vulneración temporal, si es que entiende que se puede hacer. Una vez más se demuestra que Casado no es que intente proponer algo para el bien común, sino que toda su política se reduce a tocar las gónadas al gobierno, incluso yendo contra la libertad que supuestamente dice defender.

El problema no es solamente de carencia de inteligencia por parte de Casado. Ni que sea una mala persona. Realmente, su problema, por el que los españoles no deben pagar el pato, es que está en busca y captura por parte de sus propios conmilitones de partido y la clase dominante. Como le ha dicho, con toda la mala hostia del mundo Pedro Sánchez, se le está poniendo cara de Albert Rivera. Y no porque acierte más o menos, ni porque se enfrente a los que le han puesto ahí (es demasiado pusilánime) desde los aparatos ideológicos –como le pasó al otro-, sino porque hace tiempo que perdió la confianza de los poderosos y de sus compañeros de partido. Tras fracasar en Euskadi y en Cataluña, la vida política de Casado estaba sentenciada. Ahora se agarra al triunfo, sin duda especial y distinto, de Madrid para intentar sobrevivir de cara a sus gentes. Pero ni por esas lo logra. Cada día de sesión en el Congreso de los diputados es un suplicio para sus huestes. Si alguien con tan poca capacidad dialéctica como Sánchez le desmonta día tras día es un claro indicativo de su incapacidad manifiesta.

Si tienen la paciencia suficiente de revisar los medios de derechas (que son la gran mayoría), en pocos o muy pocos verán que Casado sea la figura destacada de los ataques al gobierno. Utilizan antes a un agricultor de la Castilla profunda que a Casado. Porque saben, más allá de las obligadas entrevistas que le hacen para que no parezca que no existe, que ni vende visitas, ni su mensaje cala entre la población española. De hecho en las dos elecciones donde los dirigentes regionales le han escondido (Galicia y Madrid) es donde mejores resultados han logrado. Es de suponer que Juan Manuel Moreno Bonilla habrá puesto a agentes especiales de la Junta para que no cruce Despeñaperros, ni se intente colar por Huelva. Al igual que hay asesores que tienen fama de gafes (probado además), Casado se está ganando la fama de llevar la mufa encima. Y no es el único en el PP.

Izquierda Socialista pide a Sánchez normalizar relaciones

500 militantes del PSOE han enviado una carta al Secretario General, Pedro Sánchez, pidiendo la normalización de las relaciones de la Comisión Ejecutiva Federal con la corriente de opinión Izquierda Socialista (IS-PSOE) y solicitando a tal fin una entrevista con los actuales portavoces de IS.

En ella explican cómo la Secretaría de Organización no les reconoce como Izquierda Socialista, a pesar de las múltiples entrevistas que han celebrado con sus titulares, y que ese no reconocimiento está impidiendo la acción política normalizada de la corriente “como expresión democrática del pluralismo del Partido”. Todo lo contrario de lo que ha sido la constante, de las sucesivas direcciones del Partido que siempre reconocieron a IS y permitieron su acción política interna, desde hace 40 años cuando se constituyó la corriente de opinión dentro del PSOE encabezada entonces, entre otros, por Luis Gómez Llorente, Pablo Castellanos y Paco Bustelo.

Le recuerdan como en 2014, Izquierda Socialista presentó a las primarias para Secretario General a José Antonio Pérez Tapias, entonces uno de los portavoces de IS, obteniendo cerca de 20.000 votos, y cómo en la posterior campaña de Pedro Sánchez a la Secretaria General, en mayo de 2017, Izquierda Socialista con Pérez Tapias al frente le apoyó públicamente. Lo mismo que en el 39 Congreso Federal, celebrado hace cuatro años.

Esta anómala situación surge con la división producida en octubre de 2014 y junio de 2015, en las asambleas de Izquierda Socialista. En esta última fecha, una parte de la corriente eligió un portavoz y una Coordinadora de siete miembros, y de los ocho únicamente quedan tres por sucesivas dimisiones del resto, sin haber celebrado desde hace seis años ninguna asamblea ni renovado la elección de nuevos portavoces, sin legitimidad actual alguna, siguiendo aferrados muy minoritariamente a una situación que únicamente reconoce la Secretaría de Organización Federal.

Por ello, hace algunos años, se inició un movimiento de articulación de IS desde todos los territorios, recomponiendo democrática y mayoritariamente la corriente en toda España, con la celebración de varias Asambleas Federales y la elección de una Comisión Coordinadora Federal. Este proceso ha permitido la interlocución de la corriente con las direcciones del Partido en los territorios, – muy recientemente en Sevilla se ha producido una reunión entre representantes de la comisión coordinadora de IS Andalucía y Juan Espadas, para instar el apoyo de IS a su candidatura -, pero no ha conseguido todavía la normalización de las relaciones con la dirección federal del PSOE.

Así pues, y hasta ahora, Pedro Sánchez es el primer Secretario General del PSOE que no se ha reunido con IS a pesar de haber contado con su apoyo los últimos cuatro años. Urge la normalización de las relaciones solicitada dada la convocatoria formal del 40 Congreso Federal para el mes de octubre y la voluntad de IS de celebrar el 40 aniversario de la constitución de la corriente de izquierdas en el seno del PSOE.

La carta a Pedro Sánchez está firmada por los actuales portavoces de IS Carmen Castiñeira de Cádiz, Vicent Garcés de Valencia, uno de los fundadores de la corriente y ex-europarlamentario y Jorge Parada, presidente del Comité de Ética del Galicia; y junto a ellos centenares de cuadros y militantes, entre los cuales

  • Fundadores de IS como los que fueron portavoces de la corriente durante muchos años y diputados Manuel de la Rocha Rubí, Antonio García Santesmases y Juan Antonio Barrio; además de Antonio Chazarra, exdiputado autonómico de Madrid; José Ignacio Cifrián de La Rioja, José Miguel Sánchez Estévez, ex-parlamentario de Castilla León, Antonio Aguado de Canarias o Antonio Ruiz, miembro del Consell Nacional del PSC de Barcelona, entre otros.
  • Senadores y miembros del Comité Federal del PSOE, entre ellos Pedro Anatael Meneses de Canarias, Manuel Mata, Vicesecretario General del PSPV y Michel Montaner, alcalde de Xirivella/Valencia y diputado autonómico.
  • Decenas de miembros de comités locales, comarcales, insulares, provinciales o autonómicos de diferentes organizaciones territoriales del PSOE.
  • Decenas de alcaldes, concejales, diputados provinciales y diputados autonómicos, en el ejercicio de sus cargos o ya en otras situaciones.
  • Militantes que son actualmente o han sido dirigentes de la UGT a nivel confederal y de distintas Federaciones o territorios; y centenares de militantes y afiliados al PSOE, hasta 500.

El nacionalmadridismo enloquece

La que se ha montado por una jugada que, a juicio de la mayoría de árbitros, está bien pitada y corregida. Si hubiese sido un error clamoroso, la revolución de 1917 se hubiese quedado en una bronca de bebés con la que habrían montado en el nacionalmadridismo. Se han visto paseando por la avenida de la Castellana furgonetas con guillotinas, eso sí, sin un camino fijo. Tan sólo para amedrentar o preparándose para futuros usos. Si hasta la fecha un personaje como Tomás Roncero suponía asistir a la extravagancia y el espectáculo mal entendido, en esta ocasión quedan retratados hasta los que se vienen vendiendo como serios.

El nacionalmadridismo ha entrado en un estado de locura tal que son capaces de retorcer la realidad de tal forma que El mundo today parece un serio medio de comunicación. De los “delincuentes de las columnas” habituales hasta catedráticos de derecho Constitucional han salido en tromba a mostrar que nunca han tenido la cabeza en buen sitio. Es tal el fanatismo demostrado que los yihadistas están tomando nota para utilizar ese tipo de comunicación enfermiza para sus próximas actuaciones publicitarias. El califato del Bernabéu es ya una realidad que amenaza con conquistar toda La liga para los próximos trescientos años. Incluso no extrañaría la inmolación en la ciudad deportiva de Valdebebas del viudo con gafas.

Al resto de equipos no les han corregido jugadas (de forma correcta); a los demás no les han pitado fueras de juego por medio pie, de hecho hace una semana a Luis Suárez le anularon uno por mucho menos, pero no era medio pie y no cuenta, algo que en palabras de Santiago Segurola (¿este ser no era del Athletic?) es el antifútbol; a los demás no les han dejado jugadas sin arbitrar y que pueden ser decisivas para el triunfo final en La liga –que alguien agarre a Oblak en el área contraria no es arbitrable por el VAR porque la norma es, según la yihad madridista, aplicable a los que a ellos les parezca en ese momento-; a los demás no les ha pasado nada, y si les ha pasado es porque algo habrán hecho, y al Real Madrid todo lo malo.

Enloquecidos (como pueden ver en las portadas que ilustran el artículo) hasta tal punto que Diego López Garrido –ese que pasó del PCE a Nueva Izquierda y de ahí al PSOE- ha sacado un artículo, alentado por el director del As evidentemente, donde defiende la anticonstitucionalidad de la revisión de la jugada por el VAR. ¡Con dos cojones! En realidad el califato nacionalmadridista lo lee y se lo cree, el resto de españoles lo leen y se mueren de la risa, no sólo por la estupidez expresada, sino porque demuestra lo tontos que llegan a ser algunos. Como los que utilizan eslóganes del Atlético de Madrid para hacer sus portadas…

Nadie dentro del madridismo ve estas cosas y siente vergüenza. Es tal la asunción de que cualquier árbitro debe pitar a favor de su equipo que ante estas situaciones circenses salen en tromba, cual marabunta de hormigas, a apoyar lo absurdo si hace falta. Gustave Le Bon ya advirtió de los peligros de las masas con ideas fijas a finales del siglo XIX, pero si hubiese visto y leído al nacionalmadridismo habría cambiado su perspectiva analítica incluyendo un caso excepcional: el homo madridistus. Es para imaginar a un aficionado del Granada, equipo contra el que suelen mostrar “valentía” los árbitros, leyendo estas cosas y dejando la Alhambra a medio beber por culpa de un ictus. Porque quejarse de un error tiene toda la lógica del mundo, pero hacerlo de aciertos (¿han visto el vídeo de Gol donde han aparecido uno tras otro aciertos arbitrales pero decían que era motivo de queja?).

¿No sienten vergüenza los periodistas que escriben esas cosas, los directores que hacen esas portadas en la intimidad de sus casas? Seguramente no. Porque todo el mundo sabe que para poder comer los periodistas deportivos tragan mucho, pero en la mayoría de los casos se muestran en redes sociales más enloquecidos. En esta ocasión con el añadido de que no ha hecho falta llamada del viudo con gafas a sus edecanes en los medios. Ha surgido de forma espontánea y voluntaria desde la yihad madridista –aprobado por el califa del Bernabéu, claro- contradiciendo, aunque parezca mentira, las clasificaciones alternativas de errores/aciertos arbitrales que hacen –seguirían en la misma posición-. Lo peor de todo es que si el vencedor final fuese el Atlético de Madrid, todos estos juntaletras habrían manchado con sospechas un triunfo logrado en buena lid. Si es que hay que estar enfermo para pensar que al equipo rojiblanco le pueden ayudar tras las “hazañas” de Álvarez Margüenda, Ramos Marcos, Urizar Azpitarte, Andújar Oliver (pitándole un penalti de espaldas), Kuipers, Clattenburg y tantos otros.

Escribir a favor/contra Pedro Sánchez

En el mundo de la prensa española, más desde su digitalización, se viene produciendo un hecho que en el mundo empresarial “normal” es habitual desde hace tiempo: la búsqueda de nichos de mercado. O lo que es lo mismo, escribir artículo de opinión o análisis a favor de la persona que está en el poder o en su contra. Todo depende del nicho que se esté buscando para conseguir esa cantidad suficiente de lectores que proporcione unos mayores o menores ingresos publicitarios o por pagos por lectura.

En la prensa de derechas, da igual cual sea, están compitiendo por el mismo nicho “Todos contra Sánchez”. Los análisis o las opiniones de todos los columnistas se dirigen de forma constante contra el presidente del gobierno Pedro Sánchez. Da igual que haga esto o aquello, siempre lo hace mal. Esto supone que cuando el presidente hace algo que venían reclamando a voces desde esos medios se produzca una paradoja, acaban defendiendo lo contrario a lo que es su propio interés mediático o de clase. Así, todos los medios pedían, con insistencia casi diaria algunos leguleyos, que se acabase el estado de alarma porque existen mecanismos suficientes para canalizar a las masas (que son estúpidas en su opinión como demuestran las declaraciones de José Luis Martínez Almeida). Acaba, se confía en esos mecanismos y resulta que el gobierno debería haber legislado algo. Si no es posible constitucionalmente hacer una ley de pandemias, como el sinsorgo Pablo Casado afirma, con limitaciones de movimientos como han dicho ¿qué legislación quieren que no exista? Aquí inserten el silencio de la noche en el desierto.

Luego están aquellos columnistas y periódicos (menos) que sólo escriben para loar al gobierno –se han bajado algunos porque ya no está el mesías- y a su presidente Sánchez. Si desde el gobierno filtran que piensan imponer el peaje en todas las autopistas y autovías –más la subida de los impuestos al diésel-, una medida que afecta especialmente a las clases populares, especialmente las de la España periférica, salen artículos que justifican esa subida señalando como destructores del planeta a quienes osan utilizar el sentido de clase en el análisis. A eso súmenle los artículos de palmeros y correveidiles que buscan el nicho de los fanáticos de Sánchez solamente. No ya de militantes del PSOE sino “sanchistas” de todo tipo y condición. Todo lo que hace el presidente es perfecto, insuperable y algo nunca visto. No hay sentido común, racionalidad sino dogmatismo que anima a perseguir a los supuestos disidentes.

Así se va construyendo un periodismo de trinchera donde las doctrinas políticas –como mecanismos discursivos y de comprensión del mundo- quedan arribadas en favor de fulanismo, el agonismo y toda pérdida de realismo. Es complicado leer en España análisis en los medios que vayan más allá de la batalla entre el bien y el mal. Análisis o columnas donde existan críticas desde la materialidad/realidad de las cosas; donde se analice en base a una realidad filtrada por el posicionamiento particular de cada escritor; donde haya una muestra de pluralismo intergrupo sin persecuciones con la piedra en la mano; donde se haga análisis de verdad y no amarillismo de persona o partido. Se puede estar de acuerdo con una propuesta gubernamental y pensar que Sánchez es estúpido o un cacique. También se puede criticar al gobierno pero mirar el estado lamentable de la clase política de derechas. Se puede y, casi habría que decir, se debe escribir libremente y desde la racionalidad. Y no es por un prurito personal, que ya sería importante, sino porque una de las funciones de las columnas de opinión/análisis no es soltar lo primero que venga a la cabeza para hacer grupo y que le den palmaditas en la espalda al escritor, sino educar, enseñar, abrir nuevas vías a lo que ya hacen los partidos políticos en sí.

Ahora la moda es escribir a favor o en contra de Sánchez, lamerle el culo o apuñalarle, pero en los miles de artículos semanales que se publican en uno u otro sentido no encontrarán ni dos en los que partiendo de una alabanza o una crítica se haga pedagogía mostrando el acierto o el error según la posición doctrinal del escritor. Como mucho están aquellos que se sitúan más allá del bien y del mal hablando de unas cuestiones morales o metafísicas tan puras que son intocables. O son parte de un mecanismo de la ideología dominante para ir colando nuevos temas en los asuntos políticos, como puede ser la necesidad de cambiar el sistema político por uno que se acomode mejor a lo que demandan las élites globalistas (mucha dictadura de lo políticamente correcto, mucha libertad de mercado y mucha desregulación social). Quedan, en los pequeños intersticios de esa apabullante búsqueda de nichos de mercado, algunos análisis a izquierda y derecha que intentan otras cosas, abrir las mentes cuanto menos, pero hay un estado de fanatismo tal que sólo llegan con cuentagotas. Se buscan nichos de mercado pero también se configuran mentes dóciles y dogmáticas para que se retroalimente el sistema de buenos y malos que les permite salvar las cuentas de resultados a los medios… y a los partidos –que cada día son más totalitaristas-.

La prensa oculta el verdadero modelo de Casado para España

Para quienes no conozcan Colombia pensaran que lo que allí ocurre en estos últimos tiempos, donde la policía está asesinando a los ciudadanos por ejercitar su libre derecho a manifestarse contra una tremenda subida de impuestos a las clases populares (el 90% de la población colombiana), es producto de una sociedad del tercer mundo. También pensarán que el presidente Iván Duque es otro más de esos dictadores bananeros que las novelas y las películas han generado en el imaginario colectivo. Y no, no es así. Colombia, más allá de las drogas y los cárteles, ha sido de los pocos países que no han sufrido una larga dictadura militar en América Latina. Desde el bogotazo, que poco duró, no ha habido dictaduras y sí un sistema político curioso cuando menos.

Si la sociedad colombiana sale a la calle a protestar es porque algo muy gordo les anima a ello. Fíjense que ganase quien ganase las elecciones, ha sido tradición hasta hace menos de una década, que el gobierno estuviese integrado por gentes del partido del presidente vencedor y miembros de la oposición. Eso genera una desmovilización enorme en la población. Más si cabe con unas guerrillas que tenían tomado medio país y unos cárteles de la droga bastante violentos y terroristas. Salvo algún grupúsculo universitario, el colombiano de a pie se queja todos los días del gobierno pero se compra un petaco de cervezas mientras hace un asadito (a veces de chigüiro) y a otra cosa. Sólo sale a la calle a celebrar victorias de equipos de fútbol y poco más.

Que un gobierno liberal –aunque en realidad los liberales son el partido de izquierdas inscrito en la Internacional Socialista (para que vean el nivel de derechización política)-, apoyado por los EEUU y la Unión Europea mate vilmente a sus ciudadanos es claro indicativo de las pruebas que están haciendo allí. En Chile, país más civilizado en lo que respecta a las protestas, también se asesinaron a cientos de personas durante las últimas protestas y se ensayaron –y ensayan- todas las políticas ultraliberales que se importan luego a Europa. Ahora salen algunos diciendo que la narcoguerrilla está detrás de las protestas (quien eso dice no conoce Colombia, ni qué son/fueron las narcoguerrillas, porque no es una, ni que dejaron las armas en su gran mayoría), bien al contrario desde que Duque llegó al gobierno se vienen asesinando desde el aparato del Estado a sindicalistas, dirigentes de movimientos ecologistas o vecinales, o a líderes indígenas. Desde que el uribismo –ese que defiende José María Aznar cada vez que habla- se hizo con el poder allá por el final de la primera década del actual siglo, han muerto a manos de la policía o el ejército más de 10.000 sindicalistas, activistas o paperos. Eso en un país poco dado a manifestarse.

Pablo Casado siempre ha considerado la Colombia de Duque (como antes de Álvaro Uribe, la de Juan Manuel Santos no porque consiguió el acuerdo de paz para que la guerrilla cesase la guerra) un modelo de gestión liberal que debería ser puesto en marcha en España. Esto, evidentemente, lo dice desde el profundo desconocimiento de lo que pasa en Colombia, pero no duden que actuarían con la misma violencia que el gobierno ducal si hiciese falta. La ley mordaza, un atentado contra las libertades civiles, no es gratuita, como tampoco otros elementos represivos. La prensa de derechas –y El país- calla porque saben que después de elevar a las alturas a Duque hoy no saben dónde esconderse los que tienen algo de estómago democrático o porque perjudicaría al PP al estar tan vinculados el presidente colombiano y el pepero.

Bastante tienen con apoyar a un estólido como el actual dirigente del Partido Popular para, además tener que denunciar los crímenes contra los derechos humanos en uno de los dos países plenamente liberales del cono sur americano. Eso y ocultar que Casado sufre de mitomanía peligrosa. Una enfermedad que le hace culpar al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, de ser el culpable de las aglomeraciones que se han producido tras la finalización del estado de alarma. Sí, tiene la caradura de decir eso y dejarlo por escrito. Además demuestra que ese grado en derecho es realmente regalado pues, uno, desconoce la distribución de competencias en España; y dos, desconoce que una ley (por muy de pandemias que sea) no puede ir contra lo dispuesto en la Constitución –añadir que jamás ha propuesto una ley de pandemias, que eso es mentira.

Silencio con lo que sucede en Colombia porque interesa ocultar que “los liberales” del mundo no cometen crímenes desde el Estado. Silencio para que no se vea que el PP apoya ese tipo de actuaciones contra la población civil. Silencio para que no se observe que el mundo se desmorona ante los ojos de todos entre los liberales asalvajados y la izquierda postmoderna sin posibilidad de alternativa por uno u otro lado. Silencio porque hay que dejar que madure la fruta (Casado) hasta que se decida si se recoge o se deja pudrir. Silencio porque al fin y al cabo están dominados los medios por las élites globalistas que no quieren que eso se muestre. Muchos silencios… incluso en la izquierda.

Page se encomienda al papa

El presidente castellano-manchego ha aprovechado que ha decaído el estado de alarma para irse a Roma a una audiencia papal. El comunicado oficial que se ha pasado a la prensa dice que Emiliano García-Page ha reconocido el valor del papa Francisco I como garante de los derechos y la protección de los más débiles. Además ha destacado que el sucesor de Pedro es gran conocedor de los hitos religiosos de Toledo y de lo que acontece en la península ibérica.

La parte privada se desconoce, entre otras cuestiones porque es privada, pero es obvio que Page no sólo habrá departido sobre el Puy du Fou toledano, sobre los pecadillos inconfesables o las ganas que puede tener para el pontífice visite la capital (y buena parte de la región) castellano-manchega. También le habrá pedido que rece por él ya que en España bastante tiene que aguantar. En primer lugar, al ser que dirige el PP de la región y que es incapaz de hacer algo que sea comprensible, no ya para el gobierno, sino para los ciudadanos. Con eso de copiar la barba a Pablo Casado, con eso de copiar que le llamen Paco y no Francisco del presidente andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla (“¡Llámame Juanma!”), con eso de copiar a Isabel Díaz lo que ese mismo día diga, al final no sabe bien Page si está confrontando con un manchego o con todo el PP nacional.

También le habrá pedido protección de algunas personas de su propio partido. Que a día de hoy están tranquilas, pero cuando el diablo se aburre ya se sabe. El camarlengo monclovita –sí, le habrá explicado que en Moncloa también tienen camarlengo- o los muy inteligentes que dirigen organización en Ferraz igual tienen tentaciones de cambiarle o hacerle las listas (como los diputados castellano-manchegos no cobran sueldo igual no entran a colocar a amigos pues no hay de dónde rascar).

Habrá pedido también que en la prensa no sólo le destaquen las frases que parecen dirigidas contra Pedro Sánchez. El problema es que con una economía regional aumentando su PIB a la par que Madrid no le van a dar más espacio que el que le dan. No es cuestión de destacar a un barón no sanchista que hace las cosas mejor que en la región adorada por la prensa cavernaria. Destacar que “el otro PSOE” –como es conocido en los mundos subterráneos de la prensa- gestiona mejor que el modelo pepero es tirarse piedras contra el propio tejado. En realidad Page habrá pedido que le dejen tranquilo y no le hagan caso en los medios nacionales.