martes, 23 diciembre, 2025

El sanchismo la embarra con Ferrovial

En este caso la parte podemita del Gobierno no tiene nada que ver. Por elles nacionalizarían Ferrovial y todas las demás empresas, eso sí, que nadie les toque las dachas galapagareñas. No es en sí su batalla. Tampoco el PSOE como entidad más allá de su secretario general (si es que eso es posible en estos tiempos de populismo unipersonal) tiene una opinión similar al Gobierno. Entre otras cosas porque nadie les ha preguntado, ni les ha explicado qué coño pasa con Ferrovial. Es el sanchismo, esa pandemia de la socialdemocracia, el que la está embarrando pero bien con el tema de la constructora española.

Contexto

Contextualizando, Rafael del Pino, un señor de derechas de toda la vida y que nunca ha dejado de apoyar (incluso económicamente) a los partidos y medios de derechas, explicó que la matriz de Ferrovial sería subsumida por la filial sita en los Países Bajos. Esto es, la filial holandesa (sí, ya se sabe que no todos son holandeses, pero en España somos así) pasaría a ser la matriz de todo el grupo Ferrovial (que tiene filiales en numerosos países y continentes). No es que haya un traslado en sí de la sede social, como pasó después del golpe de Estado en Cataluña con empresas españolas, es que mediante ingeniería financiera la parte holandesa pasa a ser el todo. Evidentemente, la sede fiscal central se situará en los Países Bajos.

Del Pino explicó que no se debía a motivos políticos –recuérdese que el Gobierno (aquí las dos partes) haciendo uso de la demagogia y el populismo se lanzó a una campaña contra las grandes fortunas– sino a la mejor posibilidad de poder salir a bolsa en Nueva York. Algo que según los analistas financieros de la empresa era más sencillo desde Países Bajos, entre otras cuestiones, por la estabilidad jurídica del país centroeuropeo. Algo político sí cabe decir que existía, entonces, pero es que esa inseguridad jurídica no sólo afecta a las empresas y los ricos sino también a toda la población. Se establecen leyes que dejan vendidos a los ciudadanos frente a la Administración del Estado (por ejemplo con todo lo de la digitalización) y nadie parece levantar la voz… hasta que lo hace una empresa grande.

El contexto general les lleva a salir de España como residencia principal y también, por qué no decirlo, gracias a los mecanismos que permite la Unión Europea, el camino holandés-irlandés les permite ahorrarse unos buenos millones de euros. Nada nuevo y lo que es extraño es que otras grandes empresas (algo menos los bancos porque están todavía muy ligados al Estado) no hayan tomado ese camino para poder especular tranquilamente en bolsa y ahorrarse dineros. Evidentemente, los ingresos y los trabajadores de España seguirán como hasta ahora. Los de las mil subcontratas y UTEs seguirán igual de mal. Lo que vienen permitiendo los gobiernos.

¿El PSOE o el sanchismo?

El PSOE, no hay que negarlo, dejó de ser anticapitalista hace muchos años (los que hay a su izquierda son anticapitalistas para los demás, ellos sí deben disfrutar de las mieles del capitalismo). En la senda de la socialdemocracia, impulsó la expansión europea y la globalización financiera (las ovejas que entraban por las que salían). De hecho, los gobiernos socialdemócratas (como los liberal-conservadores) intentaron utilizar la diplomacia como mecanismo de expansión comercial. De esto debe saber más Pedro Sánchez porque es, se supone, el tema de su tesis doctoral, esa misma que copió de un libro sobre el mismo tema. Lo paradójico es que ahora se alarme por una acción empresarial al albur de la Unión Europea (que va a presidir en breve) y de la globalización.

¿Qué supone para España la salida de Ferrovial? Poco o muy poco en términos de PIB. Algo más, es posible, en la balanza comercial. Pero nada más. En España habrá ingenieros estudiando e implementando el proyecto de una autopista en el Canadá o de una presa en China. Todo igual, salvo la imagen del Gobierno. Y eso al sanchismo le duele mucho. Entre otras cuestiones porque vive de la imagen, especialmente, del “guapo” oficioso de los seres gubernamentales. Al construir el relato sobre lo paradójico, lo efímero o lo espectacular siempre se corre el peligro de que la realidad te pegue un guantazo, así, de media vuelta, a lo Bud Spencer. El gobierno queda mal, no tanto por la salida, como por la imagen que están dando por ella.

El Gobierno amenazando como cualquier cobrador de la mafia

Lo impactante ha sido la respuesta del Gobierno. Si al comienzo de todo el proceso hubiesen hablado con Del Pino (cabe recordar que dos de las primeras personas que se reunieron, secretamente hasta que se descubrió, con Sánchez en Moncloa fueron George Soros y Florentino Pérez) para consultarle los porqués y ver si se podría hacer algo, todavía quedaría algún margen para el cabreo. Si hubiesen dicho que muy bien, que en un mercado europeo cada empresa es libre de actuar como entienda mejor para los intereses de sus dueños (los accionistas), pues se hubiese evaporado el torticerismo mediático en dos días. Pero les puede la soberbia.

María Jesús Montero ha acabado amenazando con lanzarles a la Agencia Tributaria para no se sabe muy bien qué. Que si cuando se hagan las cuentas a final de año, igual las bonificaciones no son las mismas que si se quedasen. Una amenaza que, es de suponer porque tontos no son (aunque en el Gobierno crean que sí, que todos somos tontos y elles listos), ya tendrían pensada. El problema es que la ministra de Hacienda crea que puede utilizar a la Agencia Tributaria como mecanismo punitivo. Da miedo realmente esa sensación de creerse los jefes del cotarro y no unos meros gestores temporales. Cuando los ministros del primer gobierno socialista llegaron a sus respectivos ministerios, algunos funcionarios les dijeron, con toda la mala leche del mundo, “eventuales”, algo que cualquier político debería grabarse a fuego.

Montero ha tornado, conviene recordar que llega de esa parte del PSOE de prietas las filas y bastante caciquil que es el PSOE andaluz, en cualquier cobrador de la mafia en busca del dinero del chantaje para proteger los negocios. Y en ello le han seguido otros miembros del Consejo. Nadia Calviño, aunque en tono más moderado (pues aspira a colocarse en alguna institución económica gorda en cuanto salga del gobierno), también ha señalado que lo de Ferrovial es un error que tendrá consecuencias. ¿Cuáles? No se sabe, pero consecuencias. Y, para rematar todo, el ministro de la Presidencia.

Bolaños y sus pruebas inexistentes

Félix Bolaños ha solicitado, como han hecho las ministras, a Del Pino que explique a sus accionistas la verdad de la absorción por parte de la filial holandesa. Se supone que debe ser una verdad vinculada a lo político, la cual está de algún modo oculta. Algo así como “lo hago por joder a Pedro Sánchez” y poder acometer una campaña de victimismo del presidente y de mártir de los poderosos (cuando no hace más que reunirse con ellos y lamer el suelo por donde pasan) para que sugus (los pocos que van quedando) y prensa “amiga” (tan subvencionada como la que apoya irracionalmente al PP) tenga tema con el que trabajar un tiempo. Todo ad maiorem gloriam Petrus.

Lo gracioso del tema Bolaños es que ha afirmado que desde España podrían salir a bolsa en Nueva York sin ningún problema, porque otras empresas… No, no hay otras empresas que hayan salido a bolsa en Nueva York desde España. Lo cual, así, a priori, daría la razón a Del Pino. Sí lo han pensado algunas del Ibex35 (tenemos conocimiento de tres de ellas) pero no han pasado de un mero estudio. Debería pues el ministro explicar cuáles son esas circunstancias que permitirían salir a bolsa desde España en similitud con Países Bajos. No lo hacen porque, verdaderamente, no tienen ni idea. Eso sí, hacer el macarra se les da muy bien.

Desincentivar las inversiones

El problema no es que Ferrovial cotice aquí o allá. Siempre mejor acá, pero no es un problema en esta economía financiera global. El problema es que la reacción que está teniendo del Gobierno respecto a esta empresa puede ser un desincentivo a otras empresas que quieran instalarse en España. Si hay un Gobierno que persigue a las empresas cuando no se hacen las cosas como quieren en Moncloa, mejor no invertir. El PSOE normal, no el del Zapatero bolivariano, el del Sánchez woke, sino el que viene desde Julián Besteiro, hubiese pasado del tema de la forma en que se ha explicado más arriba. No hubiese reaccionado de forma macarra.

Imaginen ahora a los barones socialistas que están negociando con diversas empresas extranjeras que inviertan en sus regiones (algunas tecnológicas importantes), esos mini-clústeres empresariales en la España rural, la cara que pondrán cuando les digan que con Gobiernos macarras no se fían. Y los que no son socialistas, evidentemente. Porque la inversión extranjera es fundamental para generar empleo de calidad fuera de Cataluña, Madrid y País Vasco. Guste o no, se vive en un mundo capitalista y así son las cosas. Cabe adaptarse y reformar gradualmente o morir. Y parce que en el Gobierno prefieren morir. Bellos, hermosos, listísimos, espectaculares, pero muertos. Con lo listos que son y no han hecho ni un sencillo DAFO…

Abinader da una lección al mundo, con hechos, sobre cómo luchar contra la inflación

La pandemia del COVID-19, la codicia corporativa de las grandes multinacionales y la guerra de Ucrania han provocado una inflación mundial que está afectando a todos y cada uno de los países del mundo. Se trata de un incremento de los precios en los que los diferentes mandatarios no tienen responsabilidad directa (salvo Vladimir Putin, evidentemente) pero que están teniendo que afrontar las consecuencias.

Los principales bancos centrales, principalmente el Banco Central Europeo y la Reserva Federal de los Estados Unidos, han implementado subidas salvajes de los tipos de interés, unas medidas inadecuadas porque, tal y como han reconocido estos organismos, desacelerarán la economía, desinflarán la demanda de los consumidores y harán que los precios se reduzcan. Sin embargo, se están equivocando y con graves consecuencias para la ciudadanía. 

El presidente de la FED, Jerome Powell, ya está reconociendo las dificultades que están provocando las subidas de tipos. El crecimiento económico más lento y la desaceleración de la creación de empleo hacen que sea inevitable, según Powell, «algo de dolor a los hogares y las empresas».

La realidad es que el verdadero dolor que están causando estas medidas recae solo en los trabajadores. Las subidas de tipos de los bancos centrales tienen implicaciones muy graves para las rentas medias y bajas. Los hogares se tienen que enfrentar a unos costes mucho más elevados en financiación y vivienda, por ejemplo. La disminución de la demanda de los consumidores, evidentemente, se traduce en menos trabajos y menos horas para aquellos que aún trabajan.

Sin embargo, República Dominicana está creciendo y se ha generado un escenario de estabilidad económica que la ha puesto en el punto de mira para atraer inversiones extranjeras en todos los sectores productivos. Todo ello es consecuencia de la gestión que está haciendo Luis Abinader.

El modo en que el presidente dominicano está afrontando la inflación ha generado consecuencias positivas para la ciudadanía, sobre todo en los productos básicos. Según un informe de Dirección General de Protección al Consumidor de Honduras, República Dominicana es uno de los países de la región Centroamérica-Caribe en los que menos ha impactado la inflación global, principalmente en las subidas de los precios de los alimentos.

Productos como la leche, la carne de cerdo y pollo, los huevos, las patatas, entre otros, se pueden adquirir en República Dominicana a menor precio que los demás países de la región. Aunque la inflación ha afectado a todos los países de Centroamérica y el Caribe, en República Dominicana los alimentos básicos tienen un coste inferior en la totalidad de consumo a los demás países de referencia, lo que coincide con los datos mostrados por el Banco Central de RD que indicó que la inflación interanual se ha reducido a 5,90%.

Esta es la consecuencia de que las políticas económicas implementadas por Luis Abinader son las adecuadas para la situación global actual, dado que ha permitido que los productos de primera necesidad para las familias tengan un precio más asequible que en el resto de países de Centroamérica.

Si mi alcalde es bueno ¿no le tengo que votar porque Sánchez o Feijóo sean idiotas?

La incultura e idiotez mental de opinólogos, doxósofos, analistas, columnistas de la nada o, simplemente, directores de periódico, roza en España unos niveles tan altos que se podría decir que en eso somos potencia mundial. Da igual donde miren, escuchen o vean, allí habrá un inilustrado diciéndole lo que ha de votar, incluso contra cualquier sentido común o elemento racional. No verá información sino persuasión y espectáculo.

La moda en todos los medios de comunicación, da igual El país, que Vozpopuli, que ABC, que El diario, que el muy católico El debate es señalar que votar a este o aquel político de escalón menor al del Estado es dar o no dar la razón (aunque más parece la sinrazón) a Pedro Sánchez o Alberto Núñez Feijóo. Ese madrileñismo y/o barcelonismo del pensamiento inane es autoimpuesto por columnistas mascachapas que, mientras por un lado te piden que ejerzas el raciocinio, por el otro exigen ser completamente irracional para cumplir sus deseos más húmedos y los de sus amigos. Una orgía de la estupidez columnista que cabe denunciar.

Si mi alcalde (o alcaldesa, aunque como las conocidas son menos y tienen cierto color, el titular ha requerido del masculino neutro para evitar prejuicios del lector) es un tipo que tiene la ciudad o pueblo limpio; si tiene unos servicios municipales excelentes y adecuados a la población existente (nótese que no es lo mismo una ciudad madrileña que una pequeña ciudad manchega o andaluza); si no abusa con los impuestos y tasas; si la delincuencia está controlada; si se vive bien y sin interferencias políticas; en resumen, si lo está haciendo bien ¿por qué he de dejar de votarle, según cuentan los columnistas mascachapas, por ser del PSOE o del PP?

Si en su pueblo o ciudad tiene un alcalde del PSOE que lo hace bien, mucho mejor que el que hubo del PP, ¿por qué ha de penalizarle para supuestamente quitar a un Sánchez que no se presenta en estas elecciones? El argumento de los “listos” que escriben columnas no se sostiene racional, ni instrumentalmente. Como claman algunos medios, por cierto con más ahínco aquellos con publicidad de Clece, hay que cargarse a Emiliano García-Page para dar en los morros a Sánchez. Si a usted le va bien con Page ¿va a ser tan estúpido de hacer caso a los rufianes de las ondas y los mascachapas de las columnas? Lo mismo podría servir para Isabel Díaz-Ayuso, Ximo Puig, Javier Lambán o la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón.

Llegan unas elecciones municipales y autonómicas y el ciudadano normal debe valorar si su presidente o presidenta, alcalde o alcaldesa, lo viene haciendo bien y de acuerdo a sus intereses personales (la parte egoísta del voto) y generales (la parte de bien común del voto). Alguien de derechas tendrá unos intereses y alguien de izquierdas otros, porque es obvio que nadie está completamente libre de ciertos prejuicios. Ahora bien, los columnistas y odiadores de las ondas le piden a usted que no haga caso de sus intereses y que lo principal es echar a Sánchez de Moncloa o impedir que llegue Feijóo. Cuando llegue ese río habrá que cruzar ese puente.

Ahora se está ante el río autonómico y municipal. Y usted, haciendo uso de su raciocinio, puede votar al PP en el pueblo y al PSOE en la comunidad. O a Vox, o a Podemos (si es que quedan candidaturas), o a Falange Española. Da igual, usted puede votar buscando lo mejor para sus intereses a nivel municipal o autonómico. Luego, cuando toque echar a uno o elevar a otro, decidirá qué es lo que mejor le conviene. Decir que en estas elecciones se juega el futuro nacional es hacerle el caldo gordo a aquellos que realmente sí se están moviendo por intereses particulares, en primer lugar las subvenciones de ciertas comunidades, partidos o empresarios.

Como decía José Luis Cuerda, habrá que ponerse un cartel que ponga “No soy gilipollas” porque los columnistas, analistas de la nada, mascachapas mediáticos y directores de periódico o programa de radio están convencidos de que lo somos. Y la realidad es que para gilipollas, ellos. Vote usted lo que quiera, pero vote en favor de lo que le conviene a nivel municipal o autonómico. Si le cae mal Sánchez, no es el único, no le vote en las siguientes elecciones; si le cae mal Irene Montero (como al 75% de los españoles), no la vote en las elecciones generales; si piensa que Feijóo es lelo, no le vote en las elecciones generales; si cree que Adrián Barbón es nefasto, no le vote en autonómicas; si piensa que José Luis Martínez Almeida es un incapaz para gestionar (pese a ser facha, como dijo, y vendido al madridismo florentino), no le vote en las municipales.

Vote lo que vote no piense que por echar a uno del PSOE Sánchez va a dejar de ser presidente, igual hasta provoca una reacción favorable. En 1993 intentaron lo mismo y Felipe González aguantó el tirón. Curiosamente muchos de los que pedían aquella estrategia son los que la piden hoy. Al revés, si cree que Feijóo no debe llegar a Moncloa actúe en consecuencia. Antes de votar piense si este del PSOE o del PP le viene bien, que igual por matar a un Page para cargarse a Sánchez, al final lo que están haciendo es allanarle el camino para su perpetuación al frente del PSOE. Si usted, en cambio, es uno de esos mononeuronales que sólo hace lo que dicen sus medios de referencia, allá usted, es legítimo hacer lo que otros quieren que haga, pero no venga dando lecciones de libertad.

A vuelallanto… un escritor ha partido

El 18 de febrero de 1998 el escritor Fernando Sánchez Dragó escribió en el diario El Mundo un obituario por el fallecimiento de su amigo Ernst Jünger, veinticinco años después de la partida de Jünger, un 10 de abril de 2023 la historia se repite, pero esta vez por aquel que suscribió dicho artículo, que con el título de “A vuelallanto. En la muerte de Ernst Jünger” fue publicado.

En el mismo subrayaba: “Decir que con su muerte la literatura se nos queda huérfana es, ciertamente, un lugar común en la pluma de quienes escriben obituarios, pero a pesar de ello lo pongo, lo firmo y lo asumo, y hasta me atrevería a ir más lejos, porque la orfandad, esta vez, no lo es sólo de la literatura, sino de toda la especie humana. Así la autoinmolación de Sócrates, la desencarnación de Buda, la volatilización de Laotsé. Cuando muere un sabio, lector, las campanas doblan por ti, por mí y por quienes no me leen”.

Este párrafo quizás muchos de nosotros se lo queramos aplicar a nuestros escritores preferidos, aunque lo cierto es que solo es meritorio para unos pocos, y, sobre todo, para aquellos han aportado más que letras, sudor y tinta a este mundo.

Fernando Sánchez Dragó ha destacado por su extensa obra literaria, más de cuarenta obras publicadas que con gran erudición y amplio vocabulario ha aportado un enriquecimiento a la cultura general más que necesario.

Sus programas de televisión como “El mundo por montera”, “El sol de Medianoche”, “Las Noches Blanca” y “El Faro de Alejandría” destacaron en la televisión debido a la controversia de las temáticas y debates que se entablaban. Colaborando en las mismas el escritor Isidro-Juan Palacios y llegando a entrevistar al que hoy día es autor de nuestra casa editorial (Editorial EAS), Alain de Benoist.

El último programa que realizó fue “Libros con Wasabi”, donde llegó a recomendar dos obras de nuestra casa editorial: “Jünger: tras la guerra y la paz” y “Mishima: el último samurai”.

También tuvo amistad con otro de nuestros autores, el escritor y diplomático chileno Miguel Serrano, con el que se generó gran controversia al tratar de llevarle como ponente a los cursos de verano de la Universidad Complutense en El Escorial. Sobre su obra El Círculo Hermético llegó a decir «Les aconsejo que lean El Círculo Hermético (la verdadera historia de una relación enigmática)… Devórenlas. Digiéranlas. Incorpórenlas a su metabolismo corporal y espiritual». La influencia de esta obra en Dragó llega hasta el fin de sus días, ya que en su propia web donde figura el artículo “Fernando Sánchez Dragó construye su utopía en Soria” se explica que: Esta Eleusis soriana, advierte Dragó, no estará abierta a cualquiera: “Será un jardín abierto para todos y un paraíso cerrado para algunos. Los iniciados deberán demostrar un determinado grado de evolución personal”. La idea no es nueva, está basada en el Círculo Hermético que fundaron Hermann Hesse, Miguel Serrano y Carl Jung en Montagnola, en la Suiza italiana. Por cierto, Jung dijo una vez (y Dragó es un jungiano convencido) que es más fácil llegar a Marte que encontrarse a sí mismo.

Otros autores de nuestra casa, como A. Javier Nicolás o Tristán Castell de Pinós, también mantuvieron cordiales encuentros y trato con el prolífico escritor.

A pesar de que en el 2006, en la feria del libro de Alicante, pude adquirir su primer libro, ese famoso Gárgoris y Habidis, ⎯del que años después me dijo “Ahora no lo suscribiría y, por lo tanto, tampoco lo escribiría”⎯, mi contacto personal con Fernando Sánchez Dragó comenzó hace 10 años, en el 2013, le realice una entrevista gracias a la intermediación de un amigo común, el escritor Isidro-Juan Palacios, ⎯entre otras cosas ex director de la revista Más Allá de la Ciencia⎯, para un libro que aún esta pendiente de publicar, y que Dragó califico de ser un libro de entrevistas de actualidad y de eternidad. Tras responder a las preguntas que le hice por correo, me dijo: Querido amigo: aquí, con mucho retraso, tiene la entrevista. Haga con ella lo que le parezca. Lamento ser tan pesimista. El mundo se ha acabado y nadie se da cuenta. Saludos.

La relación esporádica pero gentil, que por ambas partes nos hemos profesado, y que a su vez ha llevado a colaboraciones puntuales, nutrió una confianza que solo comprendería aquel que entiende que un libro es más que tinta sobre papel. De la misma manera que el escritor chileno Santiago Elordi volvió a retomar contacto con Dragó a través nuestro, nosotros lo pudimos hacer a través de Fernando con algún conocido suyo.

Asimismo, contamos con su aprobación para publicar en nuestro libro “Jünger: tras la guerra y la paz” ese “A vuelallanto” sobre Jünger del que hoy hacemos mención, y en la obra “Plan-demia 2020” no el menos importante artículo censurado del 13 de diciembre de 2020 “Quédate en casa” que dio un fuerte golpe en la mesa en esos tiempos de confinamiento ilegítimo y dictatorial que el papa Estado justificaba por “nuestro propio bien”.

Por petición propia, Dragó recibía todos los libros que editorial EAS publicaba. Nuestro último intercambio de correos fue a principios de año, en el que nos comentó gratificantemente que no parábamos con las publicaciones.

Fernando Sánchez Dragó ha sido la controversia personificada, un disidente en un mundo de servilismo, una voz que ha gritado en el desierto, un rebelde de lo políticamente correcto, con sus luces y sus sombras, su pensamiento iba enfocado en contra de los ismos, un presocrático del siglo XXI que seguía una filosofía helenística, cínica, estoica y epicúrea. Aunque, en definitiva, y a mi modo de ver, todo lo que él era, todo lo que fue, ⎯al igual que su homologo y admirado Jünger (durante un periodo de su vida)⎯, un Anarca… Y esa figura del anarca literario es la que a Fernando Sánchez Dragó le seguirá en lo eterno.

Terminemos pues, este obituario de la misma manera que lo comenzamos, con el final del “A vuelallanto” que Dragó le escribió a Jünger:

El maestro, rico en saber y en vida, como el Ulises de Kavafis, acaba de llegar a su última Ítaca. O, quizás, a Thule. Hacedle un duelo de trabajo, de lecturas, de rebeldía y de anarquía. Amén.

Más de 180.000 turistas visitaron la República Dominicana en Semana Santa

El tiempo no se detiene y con él, entre otras cuestiones, sigue la incertidumbre del conflicto armado entre Rusia y Ucrania. Los efectos de esta crisis se mantienen latentes en la economía de los países y, por consiguiente, se necesita seguir trabajando de manera constante para fortalecer el sistema financiero de las naciones, algo que no se escapa de la administración del presidente Luis Abinader.

Al respecto, por ejemplo, el turismo en República Dominicana sigue avanzando de la mano del ministro David Collado. En lo que va de año, este ministerio ha participado en diferentes eventos con el interés de seguir desarrollando este sector, como muestra, se puede citar que en enero, este gabinete,  hizo presencia en Madrid, en la Feria Internacional de Turismo (FITUR) 2023; en febrero, tuvo su participación en la feria Vitrina Turística ANATO 2023, en Colombia; en marzo, estuvo presente en la Feria Turística de Berlín (ITB) 2023; y ahora en abril, Collado ya ha anunciado que viajará, en primer lugar, a Miami.

El ministro manifestó que “esta semana tendremos un encuentro con más de 600 agencias de viajes y los principales tour operadores de Canadá, Estados Unidos y Latinoamérica en el primer tradeshow que realizamos”.

Una buena gestión demuestra su compromiso con su pueblo cuando, sin importar los resultados positivos que han obtenido, sigue forjando para que las cifras sean elevadas. Por ejemplo, en este caso, independientemente de que en el 2022 la República Dominicana atrajo a 7.1 millones de turistas, los hechos demuestran que no ha sido razón para que el gobierno se acomode, sino que sigue trabajando en otros países en busca de obtener mejores resultados que, al final, son extrapolados al pueblo de diferentes maneras positivas, sin lugar a dudas.

El resultado de las prácticas certeras implementadas en el sector turismo evidencia que, aparte de los atractivos turísticos con los que cuenta el país quisqueyano, era necesario un gobierno que ponga como prioridad el trabajo transparente, continuo y dedicado, el cual, solo dará beneficios, tales como, los 180.000 turistas que recibió la República Dominicana en Semana Santa, superando una ocupación hotelera del 90% y del 100% en el Este del país.

Estas personas, al igual que los residentes del Estado caribeño, aparte de tener garantizado un escenario turístico ideal para disfrutar de sus vacaciones, contaron con un personal ampliado que trabajaba por preservar su seguridad, actuando en apoyo al operativo preventivo “Conciencia por la Vida Semana Santa 2023” que ejecutó el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) a nivel nacional.

Como ya es costumbre, las Fuerzas Armadas dominicanas trabajaron en este operativo en conjunto con el Ministerio de Turismo, la Presidencia de la República, la Policía Nacional, la Defensa Civil, entre otras instituciones, un hecho más que resalta el valor humano de las FF. AA. y de su ministro de Defensa, teniente general Carlos Luciano Díaz Morfa, quien expresó “nuestras Fuerzas Armadas han trabajado arduamente para colaborar en este operativo que contempla todas las medidas necesarias para prevenir y responder a cualquier eventualidad que pueda surgir en esta semana tan especial”.

La grandeza de la defensa de un país se mide cuando, aparte de defender la soberanía nacional, garantiza los derechos fundamentales del ser humano.

De política no, pero de rayas colombianas sí que sabéis

Si hay algo que debe ser insoportable es escuchar cantar, guitarra en mano, a Pablo Iglesias. El amor lo puede todo e Irene Montero estaría encantada. Al subir una fotografía a la red Instagram, la pareja de Galapagar no sabía la que se iba a liar por culpa de los bulos que gustan lanzar algunos. Porque una cosa es que algún tuitero o cachondo mental suelte la broma, que tendría el recorrido que tendría, a que políticos y pseudoperiodistas se lancen a mentir sobre una posible raya de cocaína en la mesa de los políticos podemitas.

Lo curioso es que toda esta gente de derechas parece que sabe perfectamente cómo es una raya de cocaína. Cuando observé la imagen, que circuló bastante con letras de canciones del tipo Guantanamera, en lo que me fijé fue en la guitarra que llevaba Iglesias, la posición de las manos y la postura al cogerla… Sin duda, tras más de treinta años tocando la guitarra, una especie de deformación profesional. Y no le veo estilo al chaval. Otras personas se habrán fijado en la ropa, en lo cuqui que es el rinconcito, en lo poco clase trabajadora que es la imagen o cualquier tipo de fetichismo que se les ocurra. ¡Ay! Pero la derecha fue rápida a lo que fue.

Muy de aplicar códigos morales a los demás que ellos mismos dicen negar en virtud de una libertad muy libertaria, resulta que son los primeros que se fijan en una posible raya de cocaína (resulta que era un adorno del bolso –un bolso bastante hortera con la inscripción mi regla es mía, que parece la nueva obsesión de la ministra o algún tipo de fetiche de la pareja, lo mismo da–). Mucho han de conocer las rayas de cocaína para saber distinguir con tanta celeridad, en una parte pequeña de una foto, una posible “loncha”. De hecho, como a mí me pasó con la guitarra, debe ser algún tipo de deformación profesional, o un conocimiento por el uso frecuente de este tipo de estupefacientes.

Lo peor de todo, como adelanté arriba, es que estos tipejos, de derechas todos ellos, son los principales moralistas y canceladores del país (sí existe la cancelación de derechas aunque no lo crean). A todo le buscan algún tipo de moralina para aplicar tan sólo a las personas de izquierdas. Ellos y ellas, porque también hay ellas, señalan y no paran a los contrarios erigiendo una ética que dejan de aplicar si son de los suyos. Nada nuevo que no se vea también en los periódicos de derechas (¿alguna vez sacaron los costos de tener al padre de Rajoy viviendo y siendo cuidado en Moncloa con equipo médico y todo?).

La libertad de meterse una raya de coca parece que sólo es para algunos, los que conocen perfectamente cómo es y lo reconocen en redes sociales, mientras, Pablo e Irene no pueden. La verdad es que la pareja de Galapagar tiene más pinta de porretes o setas, pero según la moral de estas gentes, si quisiesen meterse una raya también podrían ¿o no? Un bulo más de los de siempre (en la izquierda también hay una buena tropa de buleros) que, al final, les deja como la escoria de personas que son. Normal que alguno sea reconocido como El condenas. Sánchez Dragó, que falleció ayer, no hubiese sido tan tiquismiquis.

El gobierno de Luis Abinader consigue ampliar relaciones comerciales con las grandes potencias tecnológicas

Nunca en la historia de República Dominicana se había generado tanto interés a nivel internacional, tanto desde el punto de vista político, como, sobre todo, desde el económico. Luis Abinader ha conseguido llevar al país caribeño a la primera división mundial gracias a la efectividad de las medidas adoptadas desde diferentes esferas: política, social y económica, principalmente.

La estabilidad y la resiliencia de la economía dominicana en un escenario mundial en el que aún no se ha producido una recuperación total de las gravísimas secuelas de la crisis del 2008, más las consecuencias de la pandemia y de la guerra de Ucrania, ha llevado a que las grandes potencias se fijen en la isla de La Española como jamás lo habían hecho.

Tal y como publicamos en Diario16, la gestión de Luis Abinader es motivo de conversación en los pasillos del Capitolio de los Estados Unidos. El propio presidente Joe Biden alabó públicamente la metodología de lucha contra la corrupción aplicada en República Dominicana desde agosto de 2020. En política nada es casual y no se suelen regalar elogios.

Por otro lado, en la Unión Europea hay una fijación con determinar los elementos que están llevando al país caribeño a obtener los resultados económicos y la estabilidad social lograda en los últimos dos años y medio. Así se demostró en la Cumbre Iberoamericana celebrada en Santo Domingo con las declaraciones del rey de España, Felipe VI, y del presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa.

No obstante lo anterior, el interés generado por República Dominicana ha llegado a unos niveles tan importantes que las grandes potencias empresariales y tecnológicas se han fijado en el país. Así ha quedado demostrado tras la visita oficial de la vicepresidenta Raquel Sánchez a Corea del Sur.

El país coreano, en los últimos años, ha tomado el liderazgo en el sector tecnológico mundial por encima de Japón. Multinacionales como Samsung o LG son líderes mundiales en el sector de las nuevas tecnologías compitiendo en igualdad de condiciones con los gigantes estadounidenses y chinos.

Por otro lado, en el sector de la automoción, el Grupo Hyundai se ha posicionado en un liderazgo absoluto en las soluciones de conducción respetando el medio ambiente y reduciendo las emisiones de carbono de sus vehículos.

En principio, la teoría indica que debería ser República Dominicana la que se acercara a Corea. Sin embargo, durante la visita oficial de Peña, fue el primer ministro Han Duck-soo quien planteó profundizar y expandir la colaboración entre ambos países proponiendo, incluso, la firma de un Tratado de Libre Comercio, lo que supone un espaldarazo y un aval a los resultados de la gestión que Luis Abinader está desarrollando desde agosto de 2020.

Según Han Duck-soo, República Dominicana es el líder actual en la región de Centroamérica y Caribe y, por esa razón, es muy importante para Corea. Además expuso el gran interés existente en ampliar las relaciones actuales a sectores en los que aún no se han establecido.

En consecuencia, una potencia empresarial es la que ve que es necesario colaborar con el gobierno de Luis Abinader. Esto no había pasado jamás y el pueblo dominicano debe tener conciencia de que el trabajo no se puede quedar a medio hacer. Además, la ciudadanía debe entender que el populismo no arreglará sus problemas. Los hechos, sí.

Rubido no le perdona a Sánchez lo de Rajoy

O piensa que los españoles, especialmente los que votan al PSOE, son idiotas; o Bieito Rubido tiene algún tipo de trauma con Pedro Sánchez. Lo más probable es que tenga muy metida en el alma la moción de censura –tras verificarse judicialmente que el PP es una cueva de ladrones– que llevó a la salida de su “amigo” Mariano Rajoy. Desde ese momento hasta la fecha, el periodista no logra superar la falta del “señor de las palabras” de Moncloa. Tampoco supera que en ABC prescindieran de él por seguir una línea editorial similar a la que está tomando en su actual empleo.

Alfonso Bullón de Mendoza tuvo la buena idea de hacer resurgir El debate como un medio claramente católico. Por el momento político y social, que lo católico fuese una más de las voces del periodismo, no era algo que fuese a desmerecer. Abandonar el tono populista de algunos, por la derecha y la izquierda; defender unos valores propios, que son parte de la herencia europea; hacer del periodismo algo digno; todo ello encajaba en un entorno empresarial mediático como el actual. Elegir a Rubido, con fuerte presencia en televisiones y radios, no parecía malo a priori. Los datos de audiencia están ahí, pero igual que se sube se baja en este mundo del periodismo, más si ese aura católica no está presente el propio periódico salvo en las excelentes secciones de religión y cultura.

En España no es que haya católicos a paladas, pero los que hay son tanto de izquierdas como de derechas (por utilizar estas categorías cada día menos fiables), por ello tomar por idiotas a una parte, igual no es lo más conveniente. ¿Por qué se está tomando por idiotas a ciertas personas? Nada mejor para contestar a esta pregunta que leer el editorial del domingo de Resurrección del señor Rubido: “Unas elecciones decisivas”. No hace referencia a las elecciones que llegarán en diciembre, sino en el próximo mes de mayo. Tampoco lo hace respecto a la cabeza que hay que tener para abstraerse de lo que sucede en otros niveles del poder y centrarse en lo bueno o malo que hagan presidentes de CCAA y alcaldes. No, son importantes porque son el primer paso para sacar a Sánchez de Moncloa.

Estos comicios tienen una condición casi plebiscitaria que retratará, definitivamente, el futuro del presidente y de la inestable coalición que encabeza” dice el gallego. “El cambio no será patente si, a los buenos resultados que ya prevén las encuestas, no se le añade la derrota socialista en alguno de sus feudos más emblemáticos y, a la vez, la rotunda victoria de los populares en alguno de los suyos”. ¿Qué quiere decir esto? Que Isabel Díaz-Ayuso debe arrasar (el dinero es el dinero) y que Ximo Puig y Emiliano García-Page deben perder. Sólo así caerá el totalitario que está en Moncloa. Una reflexión, por cierto, bastante cercana al totalitarismo que se denuncia, a la par que demagógica y populista.

El ideal democrático establece que las decisiones sobre una elección deben partir desde la razón mucho más que desde el corazón o la fe (en una ideología, por ejemplo). Si un alcalde y su equipo lo ha hecho bien (sea del color que sea) se les debería votar para revalidar la confianza en el grupo de concejales (que se olvida que son listas y no simples jefecillos, aunque caciques haylos). Si una presidenta de Comunidad Autónoma no lo ha hecho bien, pues se le debería quitar el apoyo. Votar según la razón, algo en lo que Benedicto XVI (ese al que han dedicado un especial el pasado fin de semana) estaría completamente de acuerdo.

La propuesta rubidiana es completamente irracional. ¿Deben los españoles votar a quien lo puede hacer peor que quien está en el gobierno (del color que sea) para una supuesta derrota de una persona que sí lo hace mal? Curiosamente Rubido está obsesionado con Page, ya contamos que esa obsesión es extraña, la única persona que realmente se viene enfrentando a Sánchez dentro del PSOE. Un presidente de Comunidad que tiene los segundos impuestos más bajos (por aquí no le pilla el liberalote Rubido); que defiende las tradiciones populares; que está haciendo crecer económicamente la región; y que tiene mejores servicios sociales (junto a multitud de alcaldes socialistas) que su musa madrileña. ¿Por qué votar a un señor que le llaman en la región “Paco, el bulos” y que defiende la privatización de la Sanidad? Irracional o ¿intereses mercantiles del levante o de alguna constructora que financia medios?

Suponiendo que Sánchez fuese un dictadorzuelo, un ególatra, un manga ancha con los gastos, el falconero y todo lo que se quieran inventar ¿por qué un español va a votar a favor de algo que le perjudique personalmente? ¿Dónde queda ese individualismo que supera a la masa que defiende la Iglesia católica y que es don de Dios? Más bien debería dedicarse a no contar medias-verdades en su medio; o en preocuparse porque escriban sin faltas de ortografía y con conocimiento (el otro día hablaban de misas en viernes santo); que en instar de forma irracional e ideológica a los españoles a que voten en contra de sus propios intereses particulares/racionales. Salvo que todo sea mentira y el gallego aspirante le haya prometido algo y, entonces, ya no será irracionalidad sino interés propio.

Post Scriptum. Paradójicamente Rubido, como otros directores de medios de derechas, lleva años aplaudiendo a los mismos que hoy se quiere cargar. También cuentan cómo las baronías críticas y algunas alcaldías no quieren que Sánchez aparezca por sus plazas para no perder. Ni el beso de Judas fue tan falso.

Valverde disputará el título de los semipesados del Consejo

Federico Valverde podrá disputar el título de los semipesados del Consejo Mundial de Boxeo después de la pericia mostrada en su último combate en la tostadora mágica de Madrid. O eso, al menos, se desprende de las magníficas reseñas del combate que está haciendo la prensa nacionalmadridista. Está en peso y parece que alentado por los medios podría lanzarse frente a un boxeador más experimentado que Alex Baena. Artur Beterbiev debe echarse a temblar. Y no descarten que Canelo Álvarez se anime a subir de peso para enfrentar al uruguayo.

Por suerte para el jugador madridista lo anterior es una chuscada, pero la cantidad de basura que están soltando desde los medios nacionalmadridistas para justificar la agresión del uruguayo a un contrario no es broma. Más bien es una forma de actuar típica de ese sector de la prensa (si es que se puede llamar prensa) donde lo principal es que la víctima del ataque (un puñetazo, a traición además) pasa a ser el culpable de todo. No importa que Baena se haya llevado una hostia, que Valverde sea un tipo pendenciero y violento, lo importante es que nada, ni nadie salpique la imagen impoluta de cierto equipo. Una imagen, por cierto, artificialmente creada.

Curiosamente, todos los comentarios del nacionalmadridismo comienzan igual “si es cierto que…”, sólo con la intención de justificar la agresión. Nadie ha presumido que, como ha dicho el agredido, sea falso y la excusa del uruguayo y su entorno sea un ardid. Primero porque, de haber sido cierto lo que le dijo Baena en enero, Valverde lo podría haber filtrado (como hacen con otras cosas cuando le interesa) a la prensa nacionalmadridista y ya el entorno mediático se hubiese comido al jugador del Villarreal. Segundo porque de ser cierto, como comentan en Marca y As, que Baena insistió en el tema del hijo ¿dónde están los testigos que verifiquen la versión? Porque ni Valverde, ni Baena estaban solos en ese momento de la agresión.

Que han existido en cualquier deporte insultos y frases salvajes para descentrar al contrario lo sabe hasta un niño de 10 años (como ese al que han querido criminalizar por -¡oh blasfemia!- por pasarse del Madrid al Atleti). Pero guardar, rencorosamente, durante meses un insulto para atizarle a un contrario parece que es un nuevo dogma moral correcto. Al menos para gentes como el subdirector de El mundo, Vicente Ruiz en Twitter: “Cómo de podrida tiene que estar una sociedad para que un acto tan noble como el de Valverde no le convierta unánimemente en un ejemplo frente a la mezquindad de los mediocres”. ¿Está justificando que se pegue a periodistas por mentir o insultar, por ejemplo? ¡Nooooo! La prensa es pura y sólo vale cuando hay un madridista por medio. Porque lo curioso es que todo el mundo compra la versión de Valverde… y se inventan las pruebas si hace falta.

En Marca y As se dedicaron ayer a buscar y rebuscar para criminalizar a Baena. Que si las disculpas de Valverde (“Yo no soy así” dicen que ha dicho el pájaro) o los posts de Mina Bonino (esposa del agresor) diciendo que ella bastante ha tenido y que lo último es “poner en tela de juicio fechas y noticias”. Que era de carácter público que algo pasaba con su embarazo… Pues no, no era de carácter público y menos con el mensaje que supuestamente revelaría lo que sucedía y que sería la prueba fundamental contra Baena. No señora Bonino, en su mensaje del día 15 no decía nada de embarazo, ni de nada. Todo el mundo se enteró cuando realizó la entrevista, después del choque contra el Villarreal. Ahí se supo el problema, el intento de no ir al mundial del boxeador y demás. ¡Por favor, no traten de tomarnos por idiotas… una vez más!

Es que ni en la imagen que están sacando, en la que se ve que Valverde se aguanta las ganas de darle una hostia a Baena durante el partido, se puede apreciar que diga algo. Aquí nada más que hay un agresor, Valverde, y un agredido, Baena. Lo demás justificaciones nacionalmadridistas para asegurar la pureza de su club. Cabe preguntar a todos estos, si Vinicius recibiese una leche por todos los menosprecios e insultos que hace en todos los partidos ¿lo justificarían de igual forma? De hecho, llevan perdonando al chico todo, incluyendo agresiones a jugadores del Mallorca, escudándose en nosequé del racismo. En periodismo se trabaja con pruebas y hechos, y de momento el único hecho es que Valverde le ha soltado un puñetazo a Baena.

#NovedadesLiterariasD16 Ficción, reediciones y no ficción literaria (9-Abr)

Les presentamos las novedades de ficción, reediciones y no ficción literaria de esta semana. Como siempre, se hará un corta y pega de las notas de presentación de las obras tal y como llegan u ofrecen las editoriales y/o las distribuidoras sin ningún tipo de apreciación sobre ellas, salvo la elección de unos u otros títulos.

Ficción

Novela

Jane Austen, Lady Susan, Montesinos, 16€

Jane Austen escribió Lady Susan alrededor de 1794, aunque probablemente no debió darla por acabada hasta 1797, año en que también pondría punto final a otra novela, Susan, que sería publicada como Northanger Abbey. Lady Susan saldría de la imprenta póstumamente en 1871. Susan Vernon, Lady Susan, es una viuda relativamente joven, todavía hermosa, que trata de asegurar su futuro y el de su hija, y para lo que no duda en utilizar cualquier artimaña haciendo caer en sus redes a los hombres que ha elegido como fáciles presas. Dotada de una inteligencia maquiavélica, no dudará en seducir a dos candidatos simultáneamente esquivando maledicencias y presiones familiares. Lady Susan rompe pues todos los lugares comunes de la novela romántica: no solo es hermosa sino inteligente e ingeniosa, sus pretendientes son significativamente más jóvenes que ella y aunque al final la moralidad obtiene su recompensa, la propia Lady Susan es tratada en la novela con indulgencia.

Rumena Bužarovska, Mi marido, Impedimenta, 21,50€

Un poeta sin talento, un ginecólogo con aires de artista, un padre opresivo, una pareja impotente, un muerto… Y sus mujeres. Once narradoras se convierten en la cámara oculta de sus matrimonios y reflexionan sobre sus maridos, sobre sí mismas y sobre su debatible decisión de esperar a que la muerte los separe. La autora busca lo grotesco en lo cotidiano y arroja su luz estroboscópica sobre los misterios de la vida en pareja. Sueños y esperanzas; desganas y derrotas; autoengaño, vanidad y autodestrucción forman y deforman complejas relaciones que muestran la cara más hilarante y terrible de los roles de género. La autora desgrana quiénes somos y quiénes queremos ser en un análisis en primera persona de la vida conyugal que juega con la frontera entre parodia y tragedia.

Maria Judite De Carvalho, Los armarios vacíos, Errata Naturae, 18€

¿Cómo empezar de nuevo después de una pérdida? ¿Y del desengaño? ¿Cómo recomponer la identidad quebrada, las esperanzas y los anhelos sofocados, prescritos, ligados a otro, a otra existencia? En su vida, Dora Rosário ha de enfrentarse de forma radical a estas preguntas en dos ocasiones. Ésta es su historia, pero no sólo: gracias al deslumbrante virtuosismo de Maria Judite de Carvalho, a su gran precisión, sencillez y contención, accedemos a una intimidad universal, a la conciencia atemporal de tantas y tantas mujeres, familiares, cercanas, pero casi desvaídas y desdeñadas. Una historia que nos llega tras la recuperación de esta imponente escritora cuya reciente publicación en inglés ha provocado una oleada de reconocimiento en Estados Unidos.

Margery Sharp, Una tarta de rododendros, Hoja de Lata, 21,90€

Ann Laventie, la menor de tres hijos en una larga línea de nobleza antisocial de la campiña de Sussex, no encaja del todo en el molde de sus hermanos Dick y Elizabeth, dos jóvenes cultivados, elegantes y ultramodernos. Su padre es erudito y lo suficientemente rico como para centrar toda su atención en la lectura y otras actividades intelectuales. A Ann, en cambio, le preocupan cosas mundanas como su ligero exceso de peso, y es la única de la familia que disfruta de la mera compañía de sus sencillos vecinos y de los placeres más insustanciales. Tras una estancia prolongada de los Laventie en los ambientes más refinados y creativos de Londres, esas diferencias entre hermanos se agudizan, y la situación explota cuando Ann regresa a casa con un prometido absolutamente anodino para los estándares familiares.

Tras las alocadas Cluny Brown (Hoja de Lata, 2020) y El árbol de la nuez moscada (Hoja de Lata, 2022), llega ahora Una tarta de rododendro, la primera novela de Margery Sharp. Otra elegante comedia social que ya muestra todo el encanto, el humor y la sofisticación que caracteriza la obra de esta brillante autora redescubierta.

A. E. W. Mason, El misterio de la Villa Rosa, Espuela de Plata, 19,90€

El misterio de la Villa Rosa empieza con el señor Julius Ricardo veraneando en Aix-les-Bains. En una visita al casino, se encuentra con un joven inglés, Harry Wethermill, y Celia Harland, bella joven sin dinero de la que Harry está enamorado. Menos de cuarenta y ocho horas después, Harry pide ayuda a Ricardo. La patrona de Celia, madame Dauvray, tras una sesión de espiritismo, ha aparecido estrangulada, sus valiosas joyas han desaparecido y han hallado a su doncella atada y narcotizada. Celia parece haber huido y es la sospechosa evidente. ¿Quién asesinó a la rica Madame Dauvray y desvalijó su casa? ¿Qué pasó con la protegida de Dauvray, Celia, quien desa­pareció la misma noche en que murió la víctima? ¿Tendría algo que ver la joven con este horroroso crimen? Haciendo uso de su amistad, Ricardo convence a Hanaud para que intervenga en las investigaciones. At the Villa Rose (1910) está considerada por la crítica especializada como la primera novela policiaca moderna.

Jo Ann Beard, Días de fiesta, Muñeca Infinita, 22,90€

Tras Los chicos de mi juventud, Beard vuelve con textos que captan el dolor y la alegría de toda experiencia humana, mostrando la cima de su talento, capaz de poner palabras a nuestros momentos más duros y negándose a parar cuando las cosas se ponen difíciles. Su escritura une la intuición y la observación para crear algo innegablemente real y honesto.

Un libro tan contundente como sutil, que nos deja asombrados. Sus historias se sienten vividas, incluso vivas, como si todavía estuvieran sucediendo. Brillan con intensidad emocional, evocando los destellos de la memoria que llegan en el umbral entre la vida y la muerte, permitiendo que su obra exista más allá de las etiquetas de ficción o no ficción.

Robert Bryndza, Secretos en la oscuridad, Principal de los Libros, 18,90€

La agencia de detectives de Kate Marshall despega cuando ella y su socio, Tristan Harper, reciben su primer gran caso. Hace doce años, la periodista Joanna Duncan se esfumó sin dejar rastro tras destapar un escándalo político. La opinión pública y la policía han pasado página, a día de hoy nadie sabe dónde está Joanna, pero su madre no quiere darse por vencida.

Igual que la policía, Kate y Tristan investigan los lugares y a los sospechosos relacionados con Joanna, pero, esta vez, los efectos personales de la reportera se convierten en la clave para vincular su caso con el de otras desapariciones de la época… y del presente.

Pronto, los detectives se darán cuenta de que Joanna pudo haberse topado con algo mucho más siniestro de lo que esperaba: la identidad de un asesino en serie que se esconde a plena vista.

Vernon Lee, Una mujer de mundo, El Paseo, 19,95€

Esta novela corta de la escritora inglesa Vernon Lee está entre lo mejor de sus páginas de ficción, incluidas las dedicadas a la fantasía y lo sobrenatural por las que llegó a ser una autora muy reconocida. La trama, en la que todo rezuma ese mundo estético y artístico en el que vivió la propia Lee, describe con maestría y de forma ambiental el periplo de una joven, la señorita Flodden, a ojos de un extraño personaje, un atildado especialista en cerámicas –cuya voz es muy identificable con la de la propia autora–. Este, deslumbrado por ella, la anima a llevar una vida dedicada a su pasión por lo que ama, sin ataduras ni convenciones. Desde ese planteamiento Lee escribió este pionero y soberbio relato sobre el aprendizaje, el privilegio del arte, el amor, el desclasamiento y contra la frivolidad, los corsés sociales y cualquier tipo de claudicación femenina.

Álvaro Retana, El vicio color de rosa, Renacimiento, 17,90€

El vicio color de rosa es, como dice Luis Antonio de Villena, «la primera novela española que se dedica, por entero» al tema de la adicción al opio. Una de las cosas más originales de esta ingeniosa novela es la fusión de distintos mundos representativos de un momento cultural de gran importancia en la sociedad española, un punto de inflexión marcando la entrada en la modernidad, popularmente denominada los felices (o locos) años veinte. La adicción al opio se concibe como otra forma de espectáculo que acompaña a las cupletistas y espiritistas en sus actuaciones. Y es que ambos –espectáculo y adicción– son en realidad inseparables, alimentándose mutuamente y convirtiendo así la escritura misma en otro espectáculo, testigo de su propia toxicomanía. Retana ve la novela como espectáculo de la vida moderna y defiende la frivolidad como parte de una modernidad vista bajo el signo de lo maravilloso. Con finos toques de ironía, El vicio color de rosa crea unos paraísos artificiales, a base de los sueños de opio. Dentro de poco estas visiones van a convertirse en una pesadilla para el protagonista, forzándole a reemplazar un paraíso con otro: el amor.

Julie Klassen, Un hotel junto al mar, Libros de Seda, 19,95€

A la muerte de su padre, Sarah Summers y sus hermanas quedan sumidas en la pena… y la pobreza. Con el fin de ayudar a su madre enferma, Sarah convence a sus hermanas de abrir a huéspedes la casa que tienen junto al mar. Emily y Georgiana están de acuerdo, pero no Viola, que tiene que llevar un velo para ocultar una cicatriz que tiene en la cara.

Cuando se embarcan en el proyecto, no esperan recibir otros visitantes que ancianos o convalecientes, pero no, también las visitan caballeros que están de buen ver. Cuando llega un misterioso viudo escocés al hotel, Sarah se verá tremendamente atraída por él. Pero ahí sigue Viola, que no solo tiene cicatrices en la cara, sino también en el alma. ¿Qué sucederá entre las hermanas? ¿Superarán las rencillas y conocerán el amor?

Gabriela Redondo y Carlos Luria, Yo no debería estar aquí, Carena, 19,90€

«Empezaba a tomar cuerpo un sentimiento de culpabilidad. El desastre se había producido aquella mañana, pero desde hacía dos meses se venía cocinando a fuego lento, del mismo modo en el que se urden las guerras y algunas despedidas. Y yo no había querido, o no había podido, o no había sabido verlo. Miré hacia otro lado, como esas personas que niegan su enfermedad hasta que una mañana la almohada aparece bañada en sangre. Fue un error.»

El drama de Alexandra puede parecer una historia particular hasta que nos damos cuenta de que es un drama compartido por miles de mujeres. Ella es una brillante abogada barcelonesa de 39 años, impulsiva y entrañable, cuya vida se desmorona cuando se ve sometida a un feroz chantaje sexual por parte de su superior. Alexandra se embarca entonces en una arriesgada lucha en la que deberá enfrentarse no solo a su poderoso acosador, sino también a sus propias inseguridades y a los demonios familiares. Una emocionante peripecia narrada con crudeza y dosis de humor, porque en la vida los dramas siempre dejan resquicio para alguna sonrisa.

Carlos Torrero, Saltar anuncio, Sloper, 17€

Una cajera de supermercado con vocación de astronauta. Un escritor que descubre su doppelgänger en un cirujano amarillo durante la visita nocturna a un acuario. Los salmonetes con cerezas que recuerda el niño que creció viendo el exótico y húmedo espectáculo de «La Negra» entrando en el Mediterráneo. La inspiradora historia de un churrero sin mano, mitad hombre, mitad robot. Las piernas de un escritor joven que nunca llegarán a la presentación de su prometedora novela. El inquietante relato de un escritor viejo rodeado de fruta, como él, en avanzada fase de descomposición. El producto de Teletienda que salvó a aquel matrimonio. La fiesta latina que destruyó a aquel otro. El día a día en la oscura vida de un creativo publicitario brillante. El verdadero rostro de la partitura de la canción de aquel anuncio memorable. ¿Te acuerdas? El extraño texto aparecido en la web de un profesor de talleres de escritura creativa. El reaccionario discurso de agradecimiento de un cineasta premiado en la noche de los Goya. Y así hasta veintitrés excelentes cuentos, uno para cada hora del día. O casi.

Miguel Ángel de Rus, Bäsle, mi sangre, mi alma, MAR Editor, 14€

Bäsle, mi sangre, mi alma, narra la historia de amor vivida entre Mozart y su prima Maria Thekla, olvidada por los biógrafos del genial compositor, y que ha sido rescatada de su correspondencia particular por Miguel Ángel de Rus.

Al leer las cartas de Mozart se comprueba que el músico vivió un amor juvenil lleno de pasión e impedimentos. El músico recorría Europa, y sus sentimientos se desgranaban en las cartas que enviaba a su padre, a su hermana y a Maria Thekla, cuyo recuerdo enciende su alma. ¿Qué llevó a Mozart a perder aquel amor? ¿Pudo Mozart tener un hijo secreto con su prima? ¿Cómo influyó en su obra y en la relación con el padre? Hay una cara por descubrir de Mozart: apasionado, rebelde, precursor. Esta novela trata una época importante en su vida; se constata la ruptura con el príncipe-arzobispo de Salzburgo, el músico reconoce su incapacidad de soportar la altanería y la estupidez de la burguesía y los comerciantes adinerados a quienes vende sus servicios. Novela histórica, llena de descubrimientos e intriga que se mantiene hasta el final.

Simone Weil, El amor, Hermida Editores, 14,90€

Continuando con la labor emprendida con el libro La Amistad, este libro se compone de los fragmentos sobre el amor extraídos de los Cuadernos que Simone Weil escribió desde 1934 hasta meses antes de su muerte. El amor como antídoto al sufrimiento es unos de los temas más recurrentes que Weil analiza a través de sus distintas significaciones, en una esmerada y delicada reconstrucción.

El amor no sólo surge de la necesidad de salir de nosotros mismos y de unirnos al otro, sino que nos despierta del sueño inconsciente que supone vivir con indiferencia en el mundo y entre los demás, liberándonos de una soledad estéril y destructiva. Al amar tenemos conciencia de estar vivos y los otros cobran verdadera existencia para nosotros. Por ello, si nos viéramos privados de él serían meras sombras, máscaras, trajes viejos de hombres que existieron.

Así pues, el otro es una especie de principio de realidad que nos une a la vida, evitándonos ser meros espectadores pasivos del mundo. Dependemos de él mientras le amamos, y es el objeto de una inclinación ineludible que nos ata a la vida, atrayéndonos así con fuerza hacia la tierra.

Hilario J. Rodríguez, Construyendo Babel, Contraseña, 19€

«Hay quienes consideran «Construyendo Babel» un ensayo, pero también hay quienes lo consideran una novela. Yo, sin embargo, creo que lo único de verdad importante es que no se lea como un libro, sino como una biblioteca. Eso quiere decir que sucede entre sus páginas y entre los libros que menciona porque se apropia de ellos, los hace suyos. Su historia no es solo la historia de una familia: es la introducción de esa historia en los espacios que hay entre otras historias, entre otras familias, en escenarios y tiempos distantes. Por eso comienza y acaba constantemente; por eso sus personajes pueden morir y resucitar en la misma frase; por eso el amor surge al mismo tiempo que se diluye; por eso, cuando uno acaba su lectura, tiene en realidad la sensación de estar comenzándola.

»El origen del libro fue un misterio familiar. Mi padre tenía un hermano a quien yo no llegué a conocer, que fue borrado de los álbumes y las conversaciones mucho antes de que yo naciese, y cuya pista se perdió en Portugal en 1953 y reapareció en un remoto pueblo de Brasil en 1992, cuando a mis abuelos les llegó un telegrama en el que les comunicaban su muerte. Sobre ese tío mío descubrí algunas cosas cuando, a la muerte de mi padre, encontré entre los libros de su biblioteca una gramática de lengua akroá, que era la más hablada en la zona donde —según me dijo mi madre sin desvelarme mucho más— vivió mi tío los últimos veinte años de su vida y que hoy es una lengua casi extinguida. Aquel libro extraño, que fue el último vínculo que unió a mi padre y su hermano, se acaba de convertir ahora mismo, mientras lees esto, en el primer vínculo que me une a mí contigo, querido lector, querida lectora».

Juan Villoro, Materia dispuesta, Almadía, 20,90€

¿En una ciudad cuya tierra se sacude pueden existir certezas? ¿Parados sobre su suelo movedizo, pueden sus habitantes esgrimir convicciones férreas o códigos morales fijos que les digan cómo vivir? En un territorio tan vacilante como este, cualquier tradición parece absurda.

Con una prosa atlética, gran sentido del humor y una atenta observación de los detalles, Juan Villoro construye una atmósfera desaforada y casi alucinante en la que da cuenta de un paisaje social y artístico a través de un personaje que más que protagonista, es un espectador. En este irónico reverso de la novela de aprendizaje –en la que no se sabe bien qué hay que aprender ni cómo– Mauricio y la ciudad emprenden una evolución sincrónica, de modo que sus significados y sus cuerpos se entrelazan. Poblada por personajes secundarios enfrascados cada uno en sus propias búsquedas y derivas, la historia de Materia dispuesta ofrece al lector no solo el desarrollo de un protagonista entrañable, sino toda una teoría sobre la configuración del sujeto contemporáneo. Gracias al gradual cambio de voz narrativa (de primera a tercera persona), Villoro sugiere una concepción de la adultez como una condición de insuficiencia, en añoranza constante por la sensación de completitud e identificación de la infancia.

Edmund White, La hermosa habitación está vacía, Blatt & Ríos, 20,90€

La hermosa habitación está vacía, segunda parte de la trilogía autobiográfica iniciada con Historia de un chico, sigue a nuestro personaje a lo largo de una nueva etapa de su vida –finales de los años cincuenta y década del sesenta– en la que emprenderá el camino que lo lleve a dejar de considerar su sexualidad como una enfermedad, digna de culpa y desprecio.

Así, entre el fugaz contacto con desconocidos en baños públicos, el descubrimiento de sus nuevos amigos bohemios y la feliz y turbulenta compañía de otros hombres gays que viven su identidad con desenfado, el narrador se abrirá camino hacia una mudanza a Nueva York, donde será testigo y protagonista de una fuerza liberadora, tanto personal como colectiva.

Kim de l’Horizon, Libro de sangre, De Conatus, 22,90€

Libro de sangre es una buildungsroman en la que el protagonista, el propio Kim, escribe a su abuela unas cartas para poder tener una relación con ella. Debido a su situación complicada como no binario, no sabe cómo hacerse entender. Intentando explicarse, se explica a sí mismo a través del recuerdo de su infancia y el de su nueva vida reciente.

Andrea Cabrera Kñallinsky, La galería de los antepasados, Antonio Machado Libros, 17,90€

Una saga familiar, marcada por sus mujeres y también por la magia, gira alrededor de una casa entre plataneras.

La historia comienza con una partida de cartas desigual, en la que un hombre de campo, próspero y cabezota, el patriarca del clan, se juega su flota de camiones para lograr una ladera, aparentemente baldía, propiedad de un vecino tahúr.

La casa que se construye en ese terreno, el primero del pueblo, alberga unos misteriosos azulejos cuya peculiaridad es la de mantener presentes a los antepasados fallecidos. Así, seguirán relacionándose, desde otros planos, con las generaciones de esta familia conformada por personajes femeninos sorprendentes, cargados de ese profundo sentimiento de lealtad y cuidado del que hicieron gala las mujeres de antaño, vinculadas a la tierra y que entendían la vida desde la comunidad.

Bajo una apariencia apacible se hilan mil historias, algunas entrañables, otras no tanto. Se cometen crímenes, se pierden cosechas devoradas por insectos, se labran amistades, rencillas y amores que conforman un cuadro coral, en el que las distintas realidades suceden más allá de las dimensiones en las que nos parece vivir, se entreveran en el día a día de unos personajes y unas situaciones dibujadas al más puro estilo del realismo mágico.

Eva Piquer, Aterrizaje, Tránsito, 17,90€

Una mujer atrapada en un duelo decide sumarse a un viaje a Islandia con tres desconocidos. Quieren fotografiar el fuselaje de un avión que cayó en la inmensa playa de arena negra de Sólheimasandur en 1973. Esta descabellada visita al corazón del frío y la intemperie, nacida del deseo de dejar atrás Todo Aquello, la obliga a formularse preguntas y recordar vivencias que hasta entonces habían permanecido enterradas.

Esta es la historia de un aterrizaje literal y de un aterrizaje emocional. De un viaje motivado por el deseo de encontrar el coraje para volver a empezar. Hipnótica y tensa, Aterrizaje es una reflexión sobre el azar y la supervivencia, sobre la culpa y el alivio que conlleva reenamorarse de la vida, sobre la necesidad de visitar los restos para ser capaz de volver a levantar el vuelo.

Clara Pastor, Voces al amanecer y otros relatos, Acantilado, 14€

Cuatro relatos, ambientados en escenarios distintos pero similar atmósfera, integran el microcosmos que Clara Pastor recrea con maestría y sensibilidad en este volumen, hecho de los merodeos de la memoria, que se ramifica en infinitas sendas, y de los tanteos de los personajes por salvar la distancia—a veces un abismo—que a menudo los separa de las personas más cercanas. La red protectora de la familia y los hogares de la infancia se convierten así en anhelado refugio del recuerdo ante los desencantos de la vida adulta, pero también en telarañas invisibles. Sutiles y sugerentes, los cuentos de Voces al amanecer se revelan al lector con la familiaridad de un secreto compartido.

Marcos Giralt Torrente, Algún día seré recuerdo, Anagrama, 18,90€

Este libro empieza con el intento de reconstruir un antiguo recuerdo prestado, imposible pero fértil ejercicio de memoria, y termina con la constatación de que a veces es preferible omitir alguna verdad para que un relato resulte verosímil. Entre el uno y la otra, y en un nada estricto orden cronológico, Algún día seré recuerdo recoge una cuarentena de textos breves escritos por Marcos Giralt Torrente desde el año 2000. Son artículos y reportajes de prensa, crónicas de viaje, dietarios, semblanzas y fragmentos autobiográficos, reflexiones sobre arte y literatura, y también estampas familiares y alguna carta, que configuran un jugoso compendio de las muchas facetas que puede adoptar una vida dedicada íntegramente a la escritura.

En estas páginas asistimos a una memorable clase práctica de autodefensa con una pistola de agua; vemos a José Bergamín de niño en una exposición en el Parque del Retiro que al parecer incluía a unos indígenas enjaulados; conocemos a la intrépida tía paterna de Marcos Giralt, refugiada en una isla de Kenia de un futuro incierto en silla de ruedas; al propio autor, ensayando la técnica del collage a la manera de Kurt Schwitters; a Sergio Pitol, entusiasta compañero de viaje en Lima; a Joe Strummer preguntando a un joven Giralt acodado en una barra: «¿Estás perdido en el supermercado?»; a Frank Sinatra perseguido por Gay Talese… Sean de encargo o no, estas piezas reflejan inquietudes, gustos, afinidades y recurrencias, y constituyen un relato con diversas subtramas en el que literatura, arte y vida se entremezclan de manera inevitable: una suerte de cara B de una extraordinaria trayectoria literaria.

Ninni Schulman, Obsesión, Almuzara, 23€

Son nuestras necesidades más básicas las que impulsan las acciones de los dos protagonistas de la nueva y apasionante novela de Ninni Schulman: el deseo de tener cerca a alguien que se preocupe por nosotros y que nos haga sentir que somos indispensables. El deseo de amar y ser amados. Tras unos años oscuros fruto de una dolorosa experiencia, Pål siente que puede volver a amar. Cuando conoce a Iris —una mujer que lleva el mismo nombre de una flor bella y tóxica—, cree haber encontrado a la persona que buscaba para volver a ser feliz. Por su parte, también Iris acaba de pasar por momentos difíciles. Cansada de estar sola, sueña con tener a su lado a un hombre que la quiera de verdad, con naturalidad y sinceridad. Un hombre como Pål, que parece poder leer todos sus pensamientos y que encarna las fantasías que ella creía irrealizables. Abrumados y aturdidos por la pasión, los dos se abandonan a un éxtasis que les ciega y les confunde. Pero, ¿es todo tan perfecto como parece? En una tensión in crescendo y golpes de efecto, la relación ejemplar se convierte en una pesadilla, dando lugar a un thriller vertiginoso donde el amor es un hechizo que se apodera del lector sin dejarle ninguna vía de escape.

Gráfica, Ilustrados, Cómic

Robert Crumb, Memorias de R. Crumb, Libros del Kultrum,  33€

Las memorias del maestro del cómic por antonomasia (las ilustres recomendaciones que adornan las dos primeras páginas dan buena fe de ello). De de la mano de Peter Poplaski, he aquí la auditoría interna que pasa revista a la vida, las tribulaciones y las ideas de uno de los dibujantes de cómics más influyentes de los últimos cuarenta años. Una autobiografía visual irónica, autocrítica y cándida, que nos conmueve al tiempo que nos desvela los secretos mejor guardados de uno de los íconos culturales de la contracultura norteamericana. Crumb nos ofrece aquí una visión reflexiva y clarividente de la cultura popular del siglo xx repleta de humor, sátira y provocación, y nos muestra sin ambages los puntos débiles de la vida moderna, una pesadilla urbana de flaquezas, lujurias, angustias y crueldades que bajo su lupa burlesca se agrandan y adquieren proporciones monstruosas. Entretejido a esta crítica, discurre el relato surrealista de su peripecia vital, desde su atormentada infancia en los años cuarenta hasta la actualidad, pasando por su primera madurez artística durante la revolución psicodélica de los sesenta. Con más de 50 fotografías personales y 300 ilustraciones extraídas de cuadernos de bocetos, libros de cómics y exposiciones, estas memorias cuentan las cosas como son.

Sammy Harkham, La sangre de la virgen, Fulgencio Pimentel, 35€

California. 1971. Un joven ambicioso trata de abrirse camino en la industria del cine de terror y bajo presupuesto. Dividido entre el desorden de su vida familiar y sus escarceos en la vida disipada propia de la profesión, la frustrante realidad de sus posibilidades en el oficio entra en pugna con sus aspiraciones como artista, mientras los acontecimientos se suceden guiados por la fatalidad y también por una cierta banalidad. Al fondo, las eternas bocinas de Los Ángeles.

Antonio Hitos, Ruido, Astiberri, 22€

En Ruido se dan cita chicles antropomórficos, monstruos en la basura, ratas con inquietudes metafísicas y marcianos exterminadores a bordo de un monopatín rabioso que no para nunca de correr y que, huyendo de todo, acabará enfrentado al propio vacío y su naturaleza inexplicable: ¿qué hay donde no hay nada?

Con el fin de la juventud como eje central de la obra y una estructura dividida en tres bloques, el protagonista, compendio de los estereotipos con los que se representa a los adolescentes en ciertos iconos de la cultura popular, se enfrentará a la problemática del vacío, de la nada, y la imposibilidad de explicarla o delimitarla, y verá las implicaciones metafóricas que esas ideas tienen en su propia existencia.

Poesía y Teatro

Katya Vázquez Schröder, El corazón es una achura que no se vende, Valparaíso, 12€

El corazón es una achura que no se vende, dirá la poeta, como un artificio de poder, casi un mantra que se desprende de sus aullidos como la carne de los huesos, como el aire sucio del pulmón, como un universo que se resquebraja y de sus grietas emerge una raíz sólida para hacer la paz con el olvido. Los poemas reunidos en este libro conforman una liturgia propia y lábil: la de creer una y otra vez en la potencia del amor.

Hugo Mújica, Más hondo, Vaso Roto, 25€

Trabajar como obrero en una fábrica a los trece años; pasar la década de los sesenta en el Greenwich Village como artista plástico; colaborar con Timothy Leary en investigaciones sobre el LSD y el proceso creativo; participar de los movimientos antibélicos y de los derechos de igualdad racial y sexual; tratar a Allen Ginsberg y compartir su mismo gurú –Swami Satchidananda–, con quien convivió como discípulo un par de años; vivir siete años como monje de la orden trapense –en Estados Unidos, Argentina y Francia– y, allí, dentro de esa experiencia de total silencio, comenzar su camino en la escritura… Algo de esto y de su vida de viajero son hitos que laten en la obra de Hugo Mujica.

Esta recopilación poética marca un itinerario en el que vemos iluminarse los núcleos fundamentales de la condición humana. Mujica desnuda la existencia desnudando la poesía misma, despojándola de todo ornamento y toda distracción. Al llevar el lenguaje a su expresión más esencial, el autor logra dar voz a la propia esencia de la vida.

Francisco Morales Lomas, Teatro caníbal VI, Carena, 10€

En este sexto volumen del Teatro Caníbal Completo, de Morales Lomas, se pueden encontrar las siguientes obras: La plaza del caníbal, Boca a boca, Juegos caníbales, La familia, El hospital, El banco espiritual, La visita, Prohibido fumar, El lagarto, La funeraria y Relajación. Un conjunto de obras que, como señala el catedrático de Literatura Española Francisco Gutiérrez Carbajo, apelan a los temas universales de la vida, como el amor, el humor, la muerte…, siempre tratados con gran originalidad, tino y sabiduría, y en las que el proceder de Morales Lomas, como el de los buenos maestros, es comparable al de los antiguos orífices. Va puliendo minuciosa y detalladamente sus piezas para que funcionen como un perfecto mecanismo de relojería. Nada lo deja a la improvisación. Son obras que entran de lleno en el ser humano, en sus contradicciones, en su irrelevancia, en sus miserias y en su sabiduría para mostrar nuestra esencia como seres humanos en una sociedad siempre motivo para ser criticada y constante objeto de atención por el dramaturgo giennense.

Elvira Perpinyà, Di-versos, Acidalia, 10€

Abrir el libro de Elvira es entrar en esa primera luz, temprana, imaginaria, sensitiva, y pasear por su vuelo de palabras, danzar en los Di-Versos poemas de este libro… Cree en la fuerza de la palabra, vuela, dice, crece y créete, sé soñadora de ti, ofrécete a ti misma, ella alza la voz para abrirla, que la poesía sirva para andar, para abrir otro camino, para salvar lo que haya que salvar.

También juega con las palabras, con los versos, con el desdoblamiento y la rima, juega y te hace reír, sonreír, entrar y salir de la metáfora, del símbolo y también de la canción, hay poemas extensos y poemas breves, poemas para reflexionar y poemas para cantar. Todo para el silencio y para la voz viva y alegre.

Rodrigo Olay, Quizá yo, Pre-Textos, 12€

Rodrigo Olay es profesor de la Universidad de Oviedo. Ha publicado los libros de poemas Cerrar los ojos para verte (Premio Asturias Joven y Premio de la Crítica de Asturias), La víspera (Premio de la Crítica de Asturias), Saltar la hoguera (Premio Jaén) y Vieja escuela (accésit del Premio Adonáis). También es autor del cuaderno de haikus Lluvia fina. Colabora asiduamente con la revista Anáfora.

No ficción

Domingo-Luis Hernández, Un otro Borges, Montesinos, 28€

En la parte superior, y a lo largo de toda la lápida, con un tipo de letra estilo bradley, aparece grabado en la piedra un nombre, su nombre, Jorge Luis Borges. En el centro se estampa una de las ensoñaciones de quien fue autor, la ensoñación del guerrero, la ensoñación que se topó con su abuelo en el campo de batalla y que él persiguió y llevó a sus cuentos y poemas. Se ven soldados con faldas, perdidos en la antigüedad Germana. Son siete, el número mítico de la cábala y la numerología que detuvo a Borges durante mucho tiempo en su vida y en la escritura. Los seis primeros alzan el brazo al aire y portan un arma; cuatro con espadas, los dos últimos con hachas. El del extremo derecho no se distingue en semejante menester, pero se lo supone en igual disposición. Lo sensacional, y que llama la atención, es que el primero porta una espada rota y sin embargo ataca o se defiende. La ley del coraje no depende del arma sino del corazón, de la conciencia, de la responsabilidad. Tal cosa (cual Borges precisaría) el primero lo ratifica. Eso es lo que Borges aprendió de sus mayores, eso con lo que se comprometió, a lo que fue fiel y quiso que singularizara su vida; eso es lo que dice su tumba porque así lo proyectó, para que constara, para ratificar su ejemplaridad.

Joumana Haddad, En busca de los ladrones del fuego, Vaso Roto, 22€

Paul Auster, Umberto Eco, Peter Handke, Paulo Coelho, Mario Vargas Llosa, José Saramago, Yves Bonnefoy, Antonio Tabucchi, Nedim Gürsel, Elfriede Jelinek, Manuel Vázquez Montalbán, Rita Dove y Tahar Ben Jelloun se sientan frente a la periodista y activista libanesa Joumana Haddad para charlar sobre el proceso creativo, la gestión del ego y la razón de ser de la literatura. Una colección de entrevistas fascinante que nos permite asomarnos a las mentes de algunos de los mayores escritores de nuestro tiempo y que es, en última instancia, un elogio al arte de preguntar.

Marcel Proust, Sobre la lectura, Los Libros del Zorzal, 12,90€

“¿Entonces, qué? ¿Este libro no era más que eso? Esos seres a los que yo había prestado más atención y ternura que a las personas reales, sin osar confesar hasta qué punto los amaba (…); esas personas por las que me había sofocado y lagrimeado no volverían a aparecer jamás, no sabría nada más de ellas.”

Proust revive en este breve pero notable ensayo de 1905 sus lecturas de infancia. La propuesta del autor, sin embargo, va mucho más allá de la mera autobiografía. De lo que aquí se trata es de dar respuesta a una pregunta acuciante: ¿qué hacemos cuando leemos?

Charles Prawson, El nadador como héroe, Siruela, 26€

Convertido desde su publicación en un clásico inmediato, el nadador y buceador Charles Sprawson (1941-2020) explora en esta original y seductora obra de historia cultural el significado que las distintas sociedades han otorgado al arte de nadar: en la Grecia clásica y la Roma imperial, en la Inglaterra y la Alemania del siglo XIX o en los Estados Unidos y el Japón de los últimos cincuenta años. Sprawson nos ofrece además fascinantes destellos de la vida de los grandes héroes nadadores: Byron saltando dramáticamente entre las olas durante el funeral de Shelley; Edgar Allan Poe y sus solitarios y misteriosos baños; Rupert Brooke nadando desnudo junto a Virginia Woolf; Hart Crane zambulléndose hasta morir en la bahía de México…

Virginia Woolf, El viejo Bloomsbury, Guillermo Escolar, 10€

En estas memorias del viejo Bloomsbury Virginia Woolf recrea el ambiente de la convivencia en la casa de Gordon Square a principios del siglo XX.

Woolf describe las reuniones que allí acontecieron, los temas que se trataron con personalidades notables como Clive Bell, Saxon Sidney-Turner o Thoby Woolf, y consigue pintar el cuadro de un mundo vivaz y heterogéneo que tal vez comenzaba a morir en el momento justo de nacer.

Estamos ante un ensayo imprescindible para conocer la huella de estas experiencias en la autora, así como el contexto donde se desarrolló el afamado círculo de Bloomsbury.

Virginia Woolf ofrece en este ensayo las claves del ambiente intelectual, pero también sentimental, del célebre Bloomsbury.